chapter fifteen

349 16 0
                                    

Estaba durmiendo plácidamente en la cama del hotel

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba durmiendo plácidamente en la cama del hotel. Cuando mi celular sonó indicando que un número desconocido me estaba hablando.

Número desconocido
Holaa
Hoy que haces?

Quién sos?

El amor de tu vida soy

Michel Ronda?

Enserio estás enamorada de Simón?

Na, ya se que sos vos Enzito de mi vida

Ay, me sonrojó

Da bobo, que es tan importante para interrumpir mi sueño?

Querés venir a la Universidad? Van a hacer un asado y dejaron que inviten a nuestras parejas

Pero si yo no soy tu novia boludo, es Valentina

Pronto lo vas a ser... Y Valentina ya fue, después te cuento todo pero vení porfavor, no quiero ser el único solito🥺🥺🥺

Está bien, voy

Gracias hermosa, vení y decí tu nombre asi te dejan pasar

Bueno, me alisto y voy

Dale chau hermosa, te quiero 😘❤️

Enchufe mi celular y corrí hacía la ducha. Hice todo lo más rápido que pude y cuando salí, me puse un corset de cuerina blanco y un jean mom básico. Mi pelo decidí no hacerle nada y tampoco quise maquillarme porque el calor me agobiaba. Solo me puse unas cremas, serum, agarré mi cartera y salí hacía la universidad.

 Solo me puse unas cremas, serum, agarré mi cartera y salí hacía la universidad

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Llegué a la Universidad, le dí mi nombre al de seguridad y el me dejó pasar. Justo llegaba Cami mayan y me acerque a saludarla, la había extrañado.

—cami! Todo bien?— la abracé.

—hola linda, otra vez te encuentro por éstos lados, con quién venís?.

—enzo y antes de que digas algo no somos novios ni nada, somos muy amigos y el me quiso invitar.

—pero el no tenía novia?.

—si... Bah, no se, me dijo que me iba a contar que pasó, así que no se—ella asiente.

—bueno, nos estamos viendo lu, tenemos que arreglar para vernos eh.

—dale, si, vos decime y vemos.

—bueno, dale luci— la abracé y cada una fue con su anfitrión.

Lo busqué pero primero ví a Julián y Emilia, así que corrí hacía ellos y los abracé.

—holaa—ellos se rieron y me correspondieron el abrazo.

—hola luchi.

—hola hermosa, te extrañé— me dijo emi.

—yo más, te extrañé banda emi.

—luchi, Enzo está en nuestra habitación si lo estabas buscando.

—puedo subir?— el asintio—dale, voy.

Subí las escaleras hasta el piso de las habitaciones y busqué el cartel que indicará que era la habitación de Enzo y Julián. Cuando ví el cartel Enzo F, Julián A, toque la puerta y un Enzo sin camiseta me abrió.

—uh, perdón creí que eras juli, pasa— el me dejó entrar y se fue a poner una camiseta.

—no pasa nada, como estás?—me senté en una cama y moví mis pies como una nena chiquita.

—re bien ahora que viniste vos— se tiró a mi lado y apoyo sus manos debajo de su cuero cabelludo.

—que pasó que no invitaste a tu novia?.

—ya no es más mi novia, cuando estábamos volviendo ayer del partido me llamo por teléfono diciendo que terminamos, que encontró a alguien con mayor futuro y que cuando vuelva a mi casa no va a ver rastros de ella.

—uh, que cagada, como estás vos?—me acosté igual que el a su lado.

—re bien, ya no lo sentía como una pareja, era más como un peso con el que tenía que cargar, nunca lo sentí real.

—estoy igual que vos.

—ya te dije que estás re hermosa?—  interrumpió el silencio que habíamos creado.

—no, pero gracias—el se acostó de costado y me sonrió.

—altos ojos tenés, ahora que los miró de cerca, re lindos son— me acosté de costado quedando frente a frente.

— me pones nerviosa, bobo—note la sangre subir a mis mejillas, haciendo que tomen un color carmesí.

— además así sin maquillaje se notan más y te ves re hermosa— tape mi rostro y el se rió.

—ay te ves re tierna sonrojada— el sacó mis manos de mi rostro.

—dale bobo, porfavor— me dí vuelta dándole la espalda.

—que hermoso una siestita así— el se acercó y me abrazo por la cintura, apoyando su rostro sobre mi hombro.

—te recuerdo qué están todos tus amigos abajo, y lo más probable es que estemos por comer así que arriba—yo me levanté y el renegó en la cama.

—ufa, no quiero ir allá, te olvidas de mí— hizo puchero.

—dale bobo, si vine a hacerte compañía, no te voy a dejar solo.

Al ver que el no se movía me acerqué a su rostro, le dí un suave beso y me levanté yendo hacía la puerta de la habitación con intención de irme. Pero escuché unos pasos rápidos y luego unas manos en mi cintura que me hicieron girar. Enzo me acorraló contra la pared y me besó.

Era un beso fugaz, comparado con el primero, nuestros labios congeniaban a la perfección, era como si estuvieran hechos para estar juntos. Como si fueran las dos últimas piezas de un rompecabezas.

—yo que me estaba aguantando y venís y me das un piquito pedorro, ya no me pude controlar— susurro sobre mis labios, yo me reí y logré escapar corriendo por los pasillos de la universidad.

Llegué al patio dónde ví por el ventanal que estaban todos y sentí que Enzo llegó detrás de mí pero yo me fuí a saludar a todos, ya que no lo había hecho antes.

Por vos cambio | Enzo Fernández Donde viven las historias. Descúbrelo ahora