Caprichoso.

Pecador

Aziraphel y Crowley fueron a desayunar, el mayor estaba algo confundido respecto a sus sentimientos y el menor asustado de que lo fueran a terminar.

Se suponía que iban a ir a algún restaurante pero Crowley le propuso ir a comer algo en algun sitio del centro comercial pues debía comprar una cosa. Aziraphel accedió pues era muy limitado el número de veces que había ido a ese lugar y le parecía fascinante.

Dejaron el Bentley en el estacionamiento y se dirigieron al ascensor para subir a la primera planta del centro comercial. En el cubículo el mayor sacó su teléfono y lo ojeo un momento, hasta que sintió como la mano del peliblanco rozaba la suya, Azi le tomo primero uno de los dedos fingiendo mirar hacia otro lado, Crowley le siguió el juego y le tomó de la mano ganándose una sonrisa.

Las puertas se abrieron y pasaron por toda la primera ala, que era básicamente donde vendían ropa, pero ropa cara. Ropa que a no ser que Aziraphel se la robara del clóset de su novio jamás se la hubiese puesto.

Se quedó embobado mirando varias prendas pero sin llamar la atención de Crowley quien seguía vagando en las nubes tras llevar de la mano a Azi.

Debían tomar el siguiente ascensor pero estaba lleno, por lo que tendrían que esperar. Crowley volvió a tomar su celular, Aziraphel espió un poco aburrido hasta que una idea plantó en su mente.

- ¿Vamos por las escaleras? - Le preguntó sonriente.

- ¿Estas loco? Son demasiadas, que flojera - Contestó sin mirarlo.

- Vamos, - Le sacudió el brazo - ¿O acaso no puedes, viejito? -

Crowley arqueó una ceja divertido - ¿Disculpa? ¿Como me llamaste?

Aziraphel se soltó de la mano y corrió hacia las escaleras, Crowley suspiró riendo y lo siguió a un ritmo no tan rápido pero constante.

Tras unos escalones Aziraphel se detuvo a burlarse del exagerado de su novio que decía que no tenía aire para seguir subiendo. Cuando este lo alcanzó caminando lo empujó un poco para ganar ventaja y seguir corriendo con la intención de ganarle en la que parecía ser una carrera mal amañada.

Aún así Aziraphel llegó primero al segundo piso donde gracias a Dios si habían escaleras eléctricas.

El peliealgodon le tomo la mano de nuevo y subieron por las escaleras hasta su destino, el tercer piso.

- ¿Que quieres comer? - Le pregunto al más pequeño -

- Lo que tú quieras - Contestó, no tenía intención de abusar de Crowley.

- No, yo como lo que tú quieras - Dijo guardando el celular.

- No, enserio, lo que tú quieras -

- ¿Nos vamos a quedar así? Veníamos a desayunar ¿Que no? Pide algo.

- Tal vez... ¿Unos hot cakes?

- No, eso pudimos haber comido en casa... - Crowley miró algunos de los restaurantes ahí pero su mente se detuvo en la tienda donde venía a comprar "su cosa". - ¿Sabes... Por que no buscas un buen lugar? Debo hacer algo.

- ¿Puedo ir contigo? -

- No.

- Por fa, no quiero quedarme solo ¿Y si me pierdo? - No era imbécil no se iba a perder pero quería ver qué iba a comprar Crowley y por que no podia ver.

El pelirrojo rodó los ojos y suspiró derrotado.

- Bueno, ven conmigo - Le tomó de la mano y entraron a una "dulcería", un tipo algo extraño estaba en la caja registradora parecía más un narcotraficante que un dulcero y miro amenazante a Azi. - No lo mires a los ojos - Le susurró Crowley para asustarlo.