Un día

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"...Sentí que era invencible, me envolviste alrededor de la cabeza
Ahora llevo vidas diferentes, mi cuerpo está cargado de plomo
Las dos últimas líneas pueden leerse incorrectamente hasta que sean dichas..."

-Chlorine, Twenty One Pilots.

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La sala donde se llevaba a cabo la reunión de los dioses estaba siendo lo más parecido a una trifulca sin la presencia de Hades.

Beelzebub sonrió encantada al ver que en medio donde se encontraba anteriormente una mesa ahora estaban el dios de la tormenta y el engreído de Poseidón peleando como niños pequeños sin armas por petición de Heracles ya que había intentado detener a su tío pero éste decidió hacer caso a las provocaciones de Susanoo.

-¡No es justo que tengas que desposarlo! ¡Me niego a que sea tu esposo sin antes pelear por su mano! -El dios japonés no estaba de acuerdo con la postura de los dioses en lo que respecta a los humanos.

Había estado intentando acercarse al espadachín pero siempre era difícil encontrarlo sólo: si no se encontraba con Okita y Kondo, Hrist le acaparaba la mayor parte del tiempo.

Sólo una vez pudo verle y sostener una conversación con él, dándose cuenta que incluso muerto, Poseidón tenía un lugar importante en el pecho del primer humano bajo el sol.

"Haré lo que esté en mis manos para cortejarlo adecuadamente..."

-Piérdete basura, ella me eligió a mi desde antes -Poseidón atinó a dar un gancho a la mandíbula del dios japonés justo cuando Hades regresaba acompañado por Zeus.

-¡Vamos tío Poseidón! ¡Dale, con la silla! -Apolo gritaba eufórico hasta que se percató de que su tío Hades estaba en el recinto con cara de pocos amigos y un aura tan peligrosa que le recordaba su dominio sobre el Hellheim.

-Cinco minutos. Sólo me fui por un momento... ¡¿POR QUÉ ESTE LUGAR PARECE LA RÉPLICA DE LA ARENA DEL RAGNAROK?! ¡COMPÓRTENSE COMO DIOSES MALDITA SEA! -El albino tenía un tic en el ojo pero sin perder el porte de rey del inframundo caminó a grandes zancadas hacia los alborotadores jalando el lóbulo de sus orejas hasta que los ubicó en extremos opuestos del salón.

Una mirada afilada y el ambiente de lucha se esfumó como las esperanzas de salir rápido de allí.

-¿Sabes Hades? A veces siento que quien debería estar a cargo eres tú -Zeus recargó una mano en el amplio hombro de su hermano mayor, mismo que sólo le miró arqueado una ceja y rápidamente el olímpico comprendió que ni siquiera podía estar cerca de su hermano sin sufrir una paliza después de su cambio tan abrupto de humor.

-¿En qué nos quedamos de la reunión? ¿Dónde demonios está Shiva? ¡Apolo deja de intentar abrir la puerta! -La cabeza de Hades estaba a nada de estallar en una feroz migraña, preguntándose si su vida hubiese sido más sencilla si hubiese seguido dentro del estómago de su padre en lugar de tener que lidiar con lo que sea que se estaba gestando en ese momento de su existencia.

"Hubiera aceptado la taza de té con esa belleza imperial, lo que sea con tal de no estar aquí..."

Thor suspiró, incluso Loki parecía extremadamente callado, algo completamente extraño tomando en cuenta que siempre se la pasaba armando alboroto.

"Quizás el rechazo de la valquiria le sentó bastante mal, pero él sabía de esto"

Loki había sido rechazado por la primer valquiria y fue ese mismo día que se enteró de la existencia de Siegfried. Desde ese momento, el dios del engaño no volvió a ser la misma deidad molesta que le jugaba bromas de mal gusto a cualquiera.

𝑺𝒉𝒐𝒘 𝑴𝒆 𝑳𝒐𝒗𝒆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora