El principe se enamoró. ¡DAM!¡BITCH! [OMEGAVERSE][TERMINADA][Corregido]

- Burlas -

Alastor tenía una reunión. Lucifer pensó que sería lo mejor presentarse formalmente con los colegas y amigos de Alastor, así podía sacarse un peso de encima antes de meterle una paliza a Adán.

¿Por qué no puedo ir? - Lucifer miraba enfadado desde una silla a Alastor, que se arreglaba en el espejo de su habitación.

Porque esto es una junta de negocios, necesito poner nuevas estaciones de radio y tú, lo único que harás será jugar en toda la reunión y lo más probable gruñirme como perro con los viz. - Alastor miró a Lucifer, que miraba a otro lado silbando.

Vas a codearte frente a ese tal Zestial - Lucifer dijo entre dientes y el ceño fruncido.

¿Qué dijiste? - Alastor se giró a mirar con los ojos desquiciados al Rey del Inframundo.

¡Que vas a coquetearle a ese alfa! - Lucifer gritó, no quería a ese tal Zestial cerca de Alastor.

¡Será mejor que te vayas al carajo! - Alastor le devolvió el grito.

¿Qué es lo que te molesta? ¿Que tengo razón? - Lucifer se acercó a Alastor, que tomó su micrófono listo para estampar al Rey del Inframundo en las murallas.

Bueno, al menos a mí no me manosean los omegas a donde sea que vaya. - Alastor se acercó con una sonrisa de suficiencia.

¡Fue una vez, solo quería sentarme a tu lado! - Lucifer suspiró al ver el estado de ánimo de Alastor, no quería molestar a su pareja. Cuando Alastor se dio la vuelta molesto, Lucifer miró a todos lados, ¿qué hacía? ¿Qué hacía?

Espera - Alastor se sorprendió cuando fue rodeado por los brazos de Lucifer en un horrible, asqueroso, cálido y muy cómodo abrazo. El demonio de la radio giró la cabeza para ver a Lucifer con mirada de cachorro - lo siento, de verdad lo siento - Lucifer se disculpaba, oh, de ahí lo había sacado Charlie.

Puedes venir - Alastor murmuró.

¿Qué dijiste? - Automáticamente Lucifer sonrió.

Puedes venir, con la única condición, no puedes hacer un drama - Alastor miró la corbata mariposa de Lucifer y comenzó a ponerla recta.

Claro, seré el mejor compañero de negocios, serio y todo eso - Alastor suspiró, ya se estaba arrepintiendo.

Charlie - Lucifer bajaba feliz con Alastor las escaleras, todos estaban haciendo ejercicios de confianza.

¿Sí? - Charlie aún estaba llorando en los brazos de Vaggie.

Ella no se detiene - Vaggie suspiró mientras Angel sostenía un peluche tratando de distraer a Niffty.

Vamos a salir con Alastor a una reunión, y... cálmate, princesita, nada pasará - Lucifer le guiñó un ojo a su hija. Cuando ambos estaban en la calle, Lucifer le ofreció su brazo para caminar a Alastor.

¿Qué haces? - Alastor lo miró feo.

Dijiste que querías un caballero, yo soy un caballero - Alastor miró a Lucifer, lentamente se sostuvo del brazo del alfa y comenzaron a caminar, estaba disfrutando de la caminata, los demonios gritaban y se suicidaban al verlos en el camino.

Caminaron en un cómodo silencio, aunque por dentro Lucifer estaba muriendo de emoción, Alastor estaba caminando de su brazo, como una pareja en público, si alguien preguntaba, él no había incendiado ese árbol a distancia para que Alastor disfrutara de la vista... pero sí, fue él.

Cuando llegaron a la reunión, rápidamente los amigos de Alastor estaban ahí.

Es un placer verte esta noche, Alastor - Zestial tomó la mano de Alastor y la besó, Lucifer casi rompe la mesa, pero... se controló.

Como siempre es un placer, Zestial, señoritas, niñas - Todos saludaron mientras se sentaban esperando a los demás.

¿Entonces... ustedes? - Rosie miró a los dos con una sonrisa mientras las hijas de Carmilla daban risitas coquetas.

Bueno... - Alastor bajó un poco el cuello de su ropa y todos abrieron la boca.

Quien lo diría - Carmilla rio.

No tiene nada de malo - Lucifer defendió a Alastor.

Oh, no, no se moleste, su majestad - Rosie rio - Es sorprendente porque Alastor, nunca, nunca ha dejado a nadie ser su pareja, ni en vida - Alastor se sonrojó.

OH - Lucifer miró al demonio de la radio que tosió y regresó al tema - Carmilla, las armas, tengo las almas que me pediste - Alastor sacó unos contratos.

Oh, Hitler - Carmilla sonrió mientras le entregaba un contrato de armas a Alastor y ella recibía los contratos.

Pero qué tenemos aquí, el venadito - Val rió mientras se burlaba de Alastor - ¿No está por aquí el enano que quiere tu agujero? - Vox y Velvett trataban de callar a Val al ver a Lucifer.

Oh, ¿necesitan a estos 3 para algo? - Preguntó Lucifer con una gran sonrisa.

No / para nada / ni en mis sueños - Escuchó a los demonios y con una sonrisa, chasqueó los dedos, 4 demonios en una habitación completamente negra.

¿Qué mierda? - Chilló Vox.

Bien, bien, quiero algo, dame el contrato de Angel Dust - Lucifer extendió su mano mientras sus cuernos y alas aparecían.

¿Qué? no - El proxeneta miraba a los lados, buscando hacia dónde escapar.

DA-ME- LO - Las sombras del lugar comenzaron a tragar a los 3 como si fueran arenas movedizas mientras Lucifer volaba.

¡Déjaselo, Val! ¿Estás loco? - Vox no podía salir hacia arriba.

Solo entrégale el contrato de esa puta - Vox gritó.

Oh - Lucifer se acercó tomando la pantalla de Vox - no hables así de uno de mis cachorros - Vox comenzó a gritar cuando Lucifer apretó su cristal hasta que escuchó un chillido, y la TV se quemó, pero seguía vivo.

¿¡Qué carajo, déjalo!? Toma, toma el jodido contrato - Val hizo aparecer el contrato y se lo dio a Lucifer que sonrió ampliamente - ahora suéltanos - La polilla gruñó.

JAJA, no - Lucifer abrió un portal y luego miró adentro antes de salir - Disfruten su muerte ahogados en las sombras, Lucifer cerró y se fue de esa dimensión JA, putas.

Desapareció sus alas y cuernos, y caminó hacia el grupo otra vez.

¿Y los viz? - Zestial preguntó.

¿De verdad lo hiciste? - Alastor lo miró con los ojos abiertos.

Oh sí, no volverán a molestar - Lucifer sonrió, todos se miraron, mejor no preguntar.

Alastor se sintió extraño mientras llegaban los demás, como... feliz, no le gustaba que lo protegieran, pero quitar ese molesto zumbido de su oído... bueno, fue... lindo.

Tienes... una mancha aquí - Alastor sacó un pañuelo y limpió una mancha de sombra negra en la mejilla de Lucifer.

Gracias, cervatillo - Luego la reunión comenzó.