Capitulo 14

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Capitulo Catorce





      Los doctores decidieron darme de alta al día siguiente a petición de Peter, quien se quedo todo el tiempo conmigo, asechando cada movimiento que hiciera o cada palabra que hablaba con el doctor o las enfermeras. Yo pude dormir unas cuantas horas, a excepción de el, quien permaneció todo el tiempo despierto, solamente observando, pensando y siendo atormentado por sus propios pecados y dolores mentales. Al amanecer, lo único que pude hacer fue quedarme recostada observando a Peter cerrar sus ojos por un momento, hasta que por el cansancio termino durmiendo pacíficamente con sus brazos cruzados. Me levante y coloque la sabana encima de el sin perturbar su sueño. Tome la segunda sabana de reserva que estaba perfectamente doblada en la esquina de la cama y la extendí tapandome en el proceso. Continue durmiendo después de varias horas.

Durante la tarde, Peter se encargo de hacer los últimos tramites y el papeleo para mi salida. Yo tome una ducha y me puse ropa limpia, después de horas de sufrimiento por el frio dentro de la habitación al fin pude ponerme ropa un poco mas abrigada. Toque mi collarín recordando segundos antes de fallecer a causa de la caída, que tal vez, si pude haber muerto, si tan solo el jamas hubiera llegado a desatar la cuerda. Aunque el doctor nos había explicado que estaba viva  porque los milagros existen, yo solo puedo pensar en toda la pesadilla que estoy viviendo, y a ese ser humano asqueroso que aun no puedo quitarme de encima.

—Delilah—me llama Peter mientras cierra la puerta.

El sufrimiento no termina...

—¿Que sucede, Peter? —pregunto levantándome de la cama, volteo a verlo, y observo que sostiene en una de sus manos un pedazo de papel, extiende su mano y lo tomo lentamente con curiosidad, desdoblo el papel y observo la foto impresa, una foto mía con mis ojos tachados con tinta roja y una frase en la parte de abajo, —"los obstáculos pueden removerse con la fuerza de un solo dedo... "—leí con indiferencia, después mire a Peter quien me miraba preocupado por la situación, yo me rei rompiendo la hoja en miles de pedazos, —sabes que esto, al menos a mi, no me da miedo. Pero, si te prometo, que le voy a meter estos pedazos de papel en el trasero a quien sea que haya hecho esto.

—Creo que ya tengo una idea, sobre quien puede ser, ¿tu no?—se cruza de brazos exhalando.

—Si, yo también se quien puede ser. Pero, no quiero pensar mas en eso, ¿conseguiste los boletos de avión? Hay que irnos este dia.

—Si —asiente tomando la mochila y metiendo el resto de mis cosas en ella, —lo mejor sera irnos. Probablemente cuando regresemos las cosas estén menos tensas.

      Nos miramos mutuamente con ironia y negamos al mismo tiempo.

Con suma importancia para dejar de lado lo que pasaba, sin dejar de pensar en lo miserable que era Peter también, en ocasiones, nos dispusimos a hacer silenciosamente todo nuestro viaje. Al llegar al aeropuerto el preparó todo, como si de mi madre se tratara, reviso maletas, boletos, horarios y todo lo demás. Yo aguarde sentada mirando a mi alrededor y a las personas que caminaban por todas partes, acompañados, solos o simplemente esperando. No hubo mucho que ver, este tipo de cosas suelen ser demasiado aburridas para mi. Incluso para cualquiera que tuviera que esperar la salida de un vuelo, o un autobús. En ocasiones el tiempo de espera era tan largo y tedioso, que lo único reconfortante podía ser escuchar las charlas ajenas de otras personas o simplemente escuchar música. Ahora no podía hacer ni una ni otra cosa. Peter volvió revisando unos folletos entre sus manos y se sentó a un lado mío dejando los folletos sobre mis piernas. Los mire sin tomarlos.

—¿Que es esto?—pregunto tomandolos con pereza.

—No sabia que habían muchas cosas que ver, va a ser un muy interesante —dice emocionado.

|Darling, oh, darling|Libro#1| "Por siempre tuyo, tu novio"|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora