⇝12 ღ

21 4 0
                                    

Y cuando creí que me rechazaría, tomó mi mano y caminó junto a mí en dirección a la pista, sonaba una linda canción de años pasados, era como una balada, Joshua y yo nos movíamos al compás de la música. Dejó caer su cabeza en mi hombro y seguimos bailando, durante toda la canción fue silencioso, un silencio cómodo, distinto a los otros que habíamos tenido, uno más como el que experimentamos en el carro. Al término de la canción, los músicos presentes comenzaron a tocar un poco de Twist.

—¿Sabes bailarlo? — pregunté.

—No —  contestó Joshua riendo.

—Ven, te enseñaré, solo relájate y deja que tus pies vayan al ritmo de la música.

Bailamos un poco. Sé de estos bailes porque mi madre cuando éramos niños, solía poner canciones de este tipo y bailar con nosotros, era divertido.

—¿Cómo sabes bailar esto? ¡Es agotador! — dijo mientras tomaba asiento en la mesa.

—Digamos que tuve una buena maestra en casa — mire a mi mamá, quien junto a mi papá no dejaban de bailar.

.
.
.
.
.

Me desperté gracias a que mi teléfono sonaba como loco, indicando que tenía una llamada entrante.

—¿Hola? — dije aún somnoliento.

—¿Shua? — preguntó mi madre — Hijo, buen día, te llamo para decirte que hoy es el cumpleaños de Jeonghan, habrá una cena esta noche en casa. Distraelo todo lo que puedas.

¿Hoy cumple años?... Si mis cálculos no fallan, él está cumpliendo 20 años. Me levanté de la cama y caminé hasta la cocina, okey... Paseo la mirada por toda esta, hasta dar con el gabinete que contiene las harinas, busco para hacer hot cakes y comienzo a hacer un desastre en la cocina.

A los minutos de haber comenzado, terminé con una pila de hot cakes al lado, los coloqué en una bandeja y me dirigí al cuarto en donde él se está quedando, entró cantando la típica canción de feliz cumpleaños, me sorprendió aún verlo dormido.

—Gracias — murmuró con un ojo abierto y otro cerrado.

—¡Felicidades! — reí — Te traje lo más típico, la verdad aún no se tus gustos.

—Gracias, de todas maneras, me encantan los hot cakes.

Le entregué la bandeja cuando él ya estaba sentado y comenzó a devorar su desayuno.

—Dios, está delicioso.

—No comes... ¡Tragas!

—Lo lamento, tengo mucha hambre.

No pude evitar mirarlo todo el tiempo y pensar "en dos semanas me casaré con él", aún no puedo creer a lo que mis padres me están obligando, pero a la vez pienso que no será tan malo.

.
.
.
.
.

Verlo sentado frente a mí, creo que es sin duda una de las mejores vistas que tengo de él, natural, bello desde el amanecer, sin una gota de maquillaje, con su cabello un poco desarreglado, atento. Por un minuto se me había olvidado que era mi cumpleaños, la verdad no tenía cabeza para pensar en eso, con tantas cosas que han pasado.

Una foto te durará más — dije al ver que no paraba de mirarme, era lindo, pero fue aún más verlo sonrojado ante mi comentario.


—No te miraba a ti — dijo mirando sus manos, con las cuales jugaba con nerviosismo.

—¡Claro! — dije con ironía — ¿Qué otra cosa mirabas?

—El moco que sale de tu nariz — señaló hasta mi nariz.

Instintivamente me la toque y en efecto había uno, pequeño y travieso, saliendo de ella. Lo quité inmediatamente y volví a lo principal... Mi desayuno.

Matrimonio Forzado - JihanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora