Pov Santana
- Por que se apareció el aquí? – Le digo sentándome en el sillón de mi habitación mientras le entrego un pote con helado.
- Hace un tiempo – dice tragando – tuvo un accidente. Iba alcoholizado cuando choco contra un árbol. Se supone que la persona más cercana en ese momento era yo. Me llamaron esa madrugada y fui a verlo. No estaba tan grave, pero tuvo que pagar una multa, tambien ingresar a un grupo de ayuda. Había tenido algunos problemas metiéndose en peleas y esas cosas. Los médicos me dijeron que era mejor acompañarlo, cuando le dije que estábamos separados me pidieron que no lo deje solo por miedo a que caiga en una depresión. Acepte porque aun me preocupaba por él, después de todo, habían sido muchos años.
- Pero también mucho dolor – No puedo evitar decirle.
- Mis padres dijeron lo mismo. No estaban muy contentos, Me llamaban a diario para saber cómo iba todo. Supongo que temían que el vuelva a hacer lo mismo conmigo. No lo veía a menudo, pero lo llamaba para estar tranquila de que estaba bien. Se veía más tranquilo, hasta que empezó a pedirme de volver nuevamente. Me seguí negando pero insistía cada noche. Poco antes de graduarme comenzó a enviarme regalos. Supe lo que intentaba hacer, así que le dije que se detenga. Cuando me gradué se apareció en mi puerta con un anillo. Dijo que de todas formas era mío, me lo había comprado poco después de pedirme casamiento, y que me lo iba a dar el día del nacimiento de nuestro hijo.
- En serio fue capaz de decir eso, en ese día?? – suelto indignada.
Ella asiente mientras toma otra cucharada – Fue en ese momento cuando supe que no iba a tolerarlo más. Me volví a Holanda con mis padres, pensaba buscar un trabajo de cualquier cosa que me sirva para al menos tomar distancia. No supe nada más de Sam en esos meses. Luego recibí la visita de Mike. Dijo que quizá debería probar suerte en Los Angeles, me dijo que sería más fácil conseguir trabajo ahí, y el podría ayudarme. Fue cuando empecé a hacer pequeños trabajos con diferentes cantantes. Ahí fue cuando baile para Beyonce en el show de Los Angeles. Después de eso, Mike llamo pidiéndome ayuda con una de tus canciones y no lo dude, después de todo, el me había ayudado mucho. Y así fue como llegue a ti. Ese día fuimos a tomar unos tragos con mi primo, cuando recibí una llamada de Sam, diciéndome que se estaba volviendo loco, que quería verme, necesitaba tenerme con el. Estaba totalmente borracho. Me reprocho el haber abandonado la promesa que hice de no volver a bailar después de quedar embarazada.
- Como puede pretender que abandones lo que más amas hacer?
- No sabía si lo que estaba haciendo estaba bien. Pero cuando Mike me propuso la gira no tuve que pensarlo mucho.
- Por eso me pusiste los puntos esa tarde?
- Debía hacerlo! – dice con una débil sonrisa – Ibas a volverme loca sino.
- Quiero que sepas que eso no me gusto nada. Hice cualquier cosa para que Mike desistiera
- Pero no lo hizo
- Gracias a dios que no! – le digo tomando su mano y besando sus nudillos.
- En fin, estaba tan bien con la gira. Que intente evitar sus mensajes, pero cada vez se ponía más violento conmigo las pocas veces que lo atendía. Ese día cuando viste la llamada volvió a proponerme casamiento.
- Por eso estabas tan triste.
- Sentía que se repetía la historia una y otra vez. Y no podía tolerarlo más. Pero apareciste tu – dice pasando las yemas de sus dedos por mi mejilla – y estaba tan bien que no volví a contestarle ni leer nada de él. Fue por eso que vino a buscarme, creyó que de esa forma iba a obtener alguna respuesta.
