Immortal She - CHARLES LECLERC -+18

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Annia, con la mirada entrecruzada entre George y Charles, respiraba profundamente mientras intentaba mantener la calma en medio de la tensión palpable en la sala. Frente a ella estaban sentados George y Charles, con expresiones de frustración y enojo dibujadas en sus rostros.

El jefe de Ferrari y el de Mercedes, visiblemente consternados por la situación, intervinieron con tono enérgico para reprender a los pilotos por su comportamiento inaceptable.

-¡Esto es inaceptable!-, exclamó Toto Wolff, el jefe de Mercedes, con un gesto de incredulidad. -¿Qué demonios les pasa? ¡Golpearse como idiotas en medio de una carrera !-

El jefe de Ferrari, igualmente furioso, añadió

-Esto es vergonzoso, Charles. Y tú también, George. No puedo creer que hayan arruinado una carrera perfectamente buena con su estupidez-

Charles, con semblante sombrío, se limitó a gruñir

-Solo sanciónenme y ya. Estoy harto de esto-

Annia los miraba a todos con una mezcla de preocupación y decepción, consciente del daño causado por el conflicto entre los dos hombres que había amado en diferentes momentos de su vida.

Toto Wolff, con un tono firme pero comprensivo, se dirigió primero a George

-¿Qué te pasa, George? ¿Por qué reaccionas así?-

George, visiblemente afectado por la situación, se pasó una mano por el cabello y murmuró

-Lo siento, Toto. No debería haber permitido que esto sucediera-

Luego, volteó hacia Charles con una mirada de reproche y confusión. 

-Charles, dime a ti qué te pasa- le exigió.

Charles, con un dejo de amargura en su tono, respondió con sarcasmo

-¿Qué quieren? ¿Que lo reciba con un beso y un abrazo cuando está con ella?-

Annia, sintiéndose insultada y dolida por las palabras de ambos hombres, intervino con una voz cargada de frustración

-¿Saben qué? Ni siquiera son ustedes los afectados. ¿Escucharon lo que decían de mí? Dios, ¿son idiotas? Háganse un favor y no hagan estas estupideces, y menos cuando están en público y... aún peor cuando Jules los ve-

Con un gesto de determinación, Annia se dio la vuelta y salió de la sala, dejando a los demás sumidos en un incómodo silencio mientras reflexionaban sobre sus acciones.

POV'ANNIA

Entro en el acogedor motorhome y veo a Jules, absorto en su juego, con una expresión seria en su rostro. Me acerco suavemente y me siento a su lado, observándolo con cariño.

- Jules... ¿aún estás molesto?- pregunto con ternura, preocupada por sus sentimientos.

Jules levanta la mirada hacia mí y sus ojos reflejan su confusión. 

-No, mamá... solo que no entiendo-responde con sinceridad, su voz ligeramente cargada de incertidumbre. -George es mi papá, lo conozco de toda mi vida-

Una risa suave escapa de mis labios mientras lo escucho. 

-Bueno... Charles también lo es-le digo, tratando de explicarle de la mejor manera posible. -Escucha, a veces los papás tienen problemas y toman decisiones tontas... pero él es tu padre-

Jules reflexiona sobre mis palabras por un momento

-Él te extraña mucho... ¿crees que puedas saludarlo?-

Sus palabras me sorprenden gratamente. 

-¿George no tendrá problema con eso?... ya sabes, es igual que yo. No nos gusta que los hombres te hablen- dice con una sonrisa traviesa mientras me besa en las mejillas.