Cuando regreses... A mi [Camren]✔️

Capítulo 27

Título: ~Vivir en la praderas del Infierno.

Pov Lauren

El tiempo pasa, pasan los días y el tiempo se va, las personas se enamoran, son felices, lloran y ríen mientras la vida se va.

Una chicas de 23 años ¿Cómo debería vivir? Trabajando, disfrutando, saliendo a fiestas y persiguiendo sus sueños.

¿Mi problema?

Que mi único y más grande sueño simplemente está lejos de mi, en un paradero indefinido porque por más que le rogué a Normani nunca aceptó decirme donde está mi princesa.

¿Cómo ha influido eso en mi vida? Pues bien, antes pesaba 67 Kg ahora a duras penas llegó a los 56 Kg, en casi tres meses me han hospitalizado de cinco a seis veces por deshidratación, pérdida de conocimiento o por debilidad, en fin por mil motivos.

La tonalidad de mi piel según Vero ha perdido su brillo, yo soy como la Luna que no brilla sin su Sol y Camila es ese Sol que tanto anhelo.

A penas salgo de casa, me la paso abrazada a la ropa de Camz, la cual no tuve el valor de lavar con miedo a que perdiera su olor característico, una rutina que se basa en llorar 20 horas y dormir inconsciente por 4 horas.

Así ha sido mi maravillosa vida luego de perder a Camila por segunda vez.

Todas las noches mientras lloro le rezo a Jesucristo por la salud de mi princesa, que la cuide y la mantenga a salvo. Le pido que la ayude a no odiarme y también le agradezco en silencio a Normani porque cada que me ve se encarga de mantenerme al tanto del estado de Camz.

Se preguntarán por mí trabajo. Bueno no sé ¿Cómo? O ¿Por qué me envían mi sueldo completo todos los meses sin falta?

En eso se resume mi vida estos últimos tres meses. Soñando con volverla a ver, teniendo pesadillas con que me odié, muriendo de miedo de que le suceda algo.

Hoy es 11 de febrero del 2021, otro día en que no vi salir el Sol, es que él decidió quedarse con ella y a mi solo me toca la cruel y tenebrosa oscuridad.

-Lauren ya es hora de cambiar -Vero entró a mi cuarto abriendo las cortinas -Ya te he aguantado por casi tres meses en tu faceta depresiva y te acompañé en tus crisis de deshidratación pero no puedo seguir permitiendo que mi mejor amiga siga en este Baticuatro y que viva solo por el aire que respira.

-No me quiero levantar -me quejé mientras me tapaba la cabeza con mi manta -No quiero nada, solo déjame.

-Lauren te has puesto a pensar que pasará cuando vuelva Camila.

-Ella no volverá, al menos no conmigo -comencé de nuevo con mi perreta -Me quiero morir ¡Sin ella me siento morir!

-Deja de decir estupideces -Vero me quitó la manta de encima -Y no vuelvas a repetir lo de que te quieres morir idiota.

-Ya déjame -escondí mi rostro bajo mi almohada -No quiero hacer nada.

-Bueno como no recibo órdenes tuyas no te haré caso -ella comenzó a levantarme y lo hizo con suma agilidad ¿por qué? Mi peso puede llegar a ganarle al de una pluma en un concurso -Si Camila te viera estaría decepcionada.

-¡Deja de decir eso! ¡Ya para! -grité con poca fuerza -Ella me odia y por más que la ame, por más que me esté muriendo por tenerla conmigo eso no pasará.

-Nada en está vida es imposible simplemente tienes que luchar por conseguir lo que deseas -las palabras de Vero me hicieron reflexionar.

Yo siempre creí tener la razón, siempre me permití juzgar a las personas y sus errores pero ¿Por qué no juzgar mis errores? Nunca escuché los consejos de Vero, no le hice caso a Normani cuando me advirtió que sujetara a Camila cuando se desmayó ante mi y lo peor que hice, no escuché las razones de mi princesa y por eso perdí lo mejor que pude tener en mi vida.