Capítulo 12

1.4K 76 4
                                    

(Pov Rose)

No me lo había podido quitar de la cabeza, ¿Qué significaban todos estos sueños? No podía ser que yo... no, no podía ser, al menos no ahora ¿cierto?

Yo no podía estar embarazada, bueno si era posible y lo sabía pero no podía embarazarme ahora, no con todo lo que se estaba presentando y el pensar en todo esto solo hacía que estuviera más nerviosa, y si... tenía que admitirlo también asustada. Lo cual era irónico considerando que podía enfrentarme a un strigoi sin problema alguno pero un bebe me causaba pánico, que comparando lo con un strigoi era totalmente inofensivo. Como ya dije irónico.

Pero pensar en esto no iba a ayudar en nada, pero aun así yo no podía dejar de hacerlo.

- ¿Jill? ¿Qué fue lo que viste?- pregunte, debía de pensar en otra cosa para no terminar con un ataque de pánico.

- No vi nada en realidad, desde que Adrián toma medicamentos yo no puedo entrar en su mente pero aun puedo sentir sus emociones pero muy ligeramente, ya no es como solia ser antes. Pero esta vez...- su voz se apagó mientras negaba con la cabeza y expresión confundida y preocupada - fue extraño, por un segundo sus emociones fueron tan fuertes que pensé que me metería en su cabeza, pero no sucedió nada y luego todo se detuvo.

- ¿A qué te refieres con que se detuvo?-pregunte con curiosidad eso nunca me paso a mi cuando tenía el vínculo con Lissa que había desaparecido después de haber muerto - o casi- por segunda vez

- No sé cómo explicarlo exactamente- dijo viendo me con mirada nerviosa a lo que me hice un gesto intentando decir "inténtalo" despues de que Jill se entreara de que era de la realeza habia cambiado mucho, ahora era muy dificil verla nerviosa - Fue como si hubieran apagado un interruptor o de repente el vínculo se hubiera muerto, como dije fue muy extraño, nunca me paso algo así.

-Si eso es extraño, nunca me sucedió algo así- no era del todo cierto me había pasado algo parecido años atrás, cuando Lissa había restaurado a Dimitri y el lazo entre nosotras parecía haberse frio en magia pero no iba a mencionar eso ahora, mucho menos cuando Dimitri estaba a mi lado en el avión que nos llevaría al norte de Maine donde viven Sydney y Adrián sabiendo lo difícil había sido para el superar sus días como strigoi y las pesadillas que lo habían atacado durante meses de las que el no quería que nadie supiera, ni siquiera yo.

Aun recordaba la noche que lo supe no había sido nada lindo, no sabía por qué había despertado realmente yo era de sueño pesado y no había muchas cosas que pudieran despertarme, pero esa noche realmente lo agradecí; Dimitri normalmente era tranquilo mientras dormía, la loca para dormir siempre había sido yo, pero esa noche era diferente, él se movía de un lado a otro quejándose y eso no era para nada normal, intentando no alterarlo más de lo que ya estaba trate de despertarlo sacudiendo lo por los hombros

-Dimitri, despierta- dije sacudiéndolo por los hombros pero no parecía reaccionar a nada, lo sacudí más con más fuerza por lo hombros hasta que abrió los ojos de golpe.

La mirada en sus ojos era nerviosa y lo que más me asusto en ese momento fue el miedo que vi en ellos.

-Estas aquí- murmuro contra mi cabello mientras me abrazaba con fuerza

-Siempre estaré aquí, no importa lo que pase siempre estaré contigo- no sabía que responderle pero lo que le había dicho de verdad era cierto habíamos pasado por muchas cosas juntos no importa lo que viniera siempre estaría con él.

-¿Qué fue lo que sentiste?- pregunto Dimitri sacandome de ese recuerdo. Se habia pasado todo el rato que llevabamos en el avion en silencio sin decir ni una palabra.

-Al principio fue shock, mesclado con miedo y preocupación y luego ya no hubo nada; incluso ahora el vínculo parece muerto.

El resto del vuelo lo pasamos en silencio. Y finalmente llegamos a casa de Adrián y Sydney. Jill bajo corriendo del auto y fue directo a golpear la puerta casi parecía que quisiera derrumbarla a golpes y no dudo que lo hubiera hecho de no ser porque Eddie abrió la puerta causando que Jill cayera, si no fuera por los buenos reflejos de Eddie, Jill hubiera terminado cayendo al piso en vez de a los brazos de Eddie.

En cuanto Jill se dio cuenta de quien la había atrapado su cara se volvió totalmente roja y empezó a tartamudear incoherencia que no logre entender, por un segundo parecía la misma chica de quince años que descubrió que en realidad era una princesa de una línea real que se extinguía realmente deprisa.

-¿Chicos? ¿Qué hacen aquí?- Era Sydney parecía que acababa de llegar a la puerta

-Así que era ustedes quienes intentaban derribar la puerta -Dijo Adrián parándose detrás de Sydney.

Bueno que les parece? Se que he tardado muchisimo en actualizar pero acabo de entrar a la prepa y aun trató de acostumbrarme. Si les gusto por favor voten y comenten. Gracias
Hasta la proxima
Monse

Vampire Academy: esto aun no ha acabadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora