Trunks ha matado a los temibles androides y ahora gobierna paz y tranquilidad en el mundo. Ahora Trunks se aventura a otra mision; revivir a las personas que han muerto por los androides y de paso conoce una jovencita llamada Mística quien lo ayudar...
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Ha pasado seis meses desde mi matrimonio con Trunks, ahora Trunks se dedica a trabajar junto a su madre en la Corporación, otras veces entrena conmigo y con su padre en la cámara, y otras veces nos vamos junto a Gokú y Vegeta al planeta de Bills para un entrenamiento más riguroso. No me quejo, la vida junto a él es esplendida.
Gokú, ha alcanzado un nuevo poder... sí... parece que también es un dios Saiyajin al igual que Vegeta, solamente que sus cabellos tienen un color muy diferente al nuestro. Wills, no sabe por qué... ni siquiera Kaiosama... pero ¡en fin! La familia de dioses Saiyajin está creciendo.
Ahora me encuentro con Bulma cocinando algo para nuestros esposos, todo un manjar, ya que ellos siguen siendo iguales de comelones.
—¿Y no has pensado en tener otro hijo? —le pregunto a Bulma quien se sonroja y trata de que Bra empiece a caminar con sus 8 meses de edad.
—Ya mi juventud ha pasado Mística... —responde al mismo tiempo en que siento que me estoy mareando cada vez más y más, haciéndome caer sentada al suelo, preocupando a Bulma quien se agacha a verme— ¿Estás bien?
—Sí... solo me mareé... desde hace una semana estoy con ascos y mucho sueño... me mareo fácilmente... ese pollo que hizo Milk en la fiesta de Gohan (por su cumpleaños) ¡me dejó con el estómago muy mal!! —explico mientras me siento en una silla enrollando mi cola en la cintura.
—Dijiste... ¿mucho sueño, ascos y mareos? —pregunta Bulma poniéndose pálida, yo asiento al mismo tiempo en que Bulma corre sosteniendo a Bra hacia alguna dirección, dejándome sola en la cocina. En los pocos minutos transcurridos llegó mi maestro Gokú por medio de la tele transportación llegando con una cara muy seria.
—¡Sentí un Ki sorprendente!! —me dice preocupado.
—De seguro es el mío... me he sentido algo mal todo este tiempo... y no puedo controlar mi Ki...
—No es tuyo Minic... —dice Vegeta (sí, ahora me llama Minic, ya que es un nombre Saiyajin y es el verdadero) llegando al comedor—. Es diferente... —al instante, llega nuevamente Bulma con un Couter Saiyajin lo cual me sorprende.
—¿Y eso??? —pregunta Gokú señalando el couter.
—Lo tengo desde que Raditz vino a la tierra, lo guardo por algún problema... —habla Bulma mientras enciende el aparato—. Quiero hacer una prueba con Mística... —dice Bulma jalándome hacia un punto vacío del lugar— trata de desaparecer tu Ki...
—No puedo... me cuesta... aunque siento que todo lo he disminuido no es así... —le contesto arqueando una ceja, miro a Bulma entregarle a la bebé a Vegeta y prendiendo el aparato tecleando órdenes.
—¡Inténtalo! —dice, yo asiento y trato de bajar mi Ki, siento como va desapareciendo.
—¡Ahí está de nuevo!! —grita Gokú sorprendido—. Ese ki... ¿viene de Mística??? ¿Pero cómo?? ¡No conozco esa energía!!
