Capítulo 45

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Haru...

Sentía dolor, sentía un dolor profundo recorrer cada para de mi cuerpo. Era un dolor indescriptible, me sentía cansado y abrumado.

Era como estar dentro de un sueño, pero un sueño para nada bonito. Sentía miedo, algo malo estaba pasando.

Mi cabeza no razonaba del todo lo que estaba haciendo... Por qué estaba haciendo algo malo ¿Verdad?

Mátala

Una voz comenzaba a susurrar en mi cabeza... ¿A quién tengo que matar? Esperen... ¿Por qué rayos tengo que matar a alguien? ¿Qué estaba sucediendo? ¿Qué estaba sucediéndome?

Haru...

Otra voz... esta vez era diferente, era más dulce, más delicada... Quien fuera la portadora de aquella voz había hecho que las pulsaciones en su cabeza se calmaran.

¡Mátala!

La otra voz insistía con más fuerza, casi con desesperación... ¿Por qué? ¿Qué tengo que hacer? ¿Por qué yo?

"¿Qué sentirías si fueras tú el que la estuviera maltratando así? ¿Si a partir de ahora todo el amor que sientes se convirtiera en odio y rencor? ¿Si tu única meta en la vida...sea asesinar a la persona que amas?"

No estoy seguro de lo que estoy sintiendo en estos momentos... pero puedo asegurar que no es odio... nunca podría odiar o tan siquiera pensar en hacerle daño a alguna persona que amase.

Narrador Omnisciente

La mente del mago de fuego era completa oscuridad, pero había algo, una pequeña luz que lo estaba jalando de regreso a la realidad.

Hubo un instante en el que el corazón de Haru se aceleró y las dudas que había en su mente desaparecieron. Todo el dolor fue remplazado por una luz cálida que comenzó a tranquilizarlo.

Un leve contacto, una suave caricia... un beso.

Para cuando Haru estuvo consciente de lo que sucedía a su alrededor se percató que se encontraba rodeado por los brazos de Hikari, la cual se encontraba llorando mientras lo abrazaba.

Un poco más apartados visualizo a dos espíritus del zodiaco defenderlos de los insistentes ataques del mago del elemento tierra. Si su memoria no fallaba aquellos eran Tauro y Sagitario.

Sentía una leve caricia en su cabello. La maga celestial los acariciaba con ternura, como si no hubiera una batalla a su alrededor.

El mago de fuego atrapo la pequeña mano de la maga y la apretó contra sí. Hikari al sentir el suave pero firme agarre del mago de fuego lo miro sorprendida.

-¿Ha-Haru?- la voz de Hikari salía entrecortada, cosa que para el mago de fuego no pasó desapercibida.

-Por favor, dime que no hice lo que creo que hice- murmuro el mago de fuego mientras las lágrimas amenazaban por salir nuevamente de sus ojos, la maga celestial se limitó a sonreírle tratando de transmitirle tranquilidad.

-Bueno...- la maga celestial bacilo un poco en su respuesta, ya tendrían tiempo de arreglar todo lo que había pasado... ahora su prioridad debería ser la batalla que se estaba llevando a cabo a sus espaldas.

Ambos se pusieron de pie sosteniéndose uno de otro. Ambos se encontraban débiles tanto de mente como de cuerpo. Pero en esos momentos no había otra opción más que luchar.

Los dos magos se dispusieron a ayudar a sus compañeros. Takeshi miraba con recelo a Haru, mientras se aseguraba mentalmente de golpear a Haru por haberlos hecho sufrir así.

Un grito ensordecedor saco a todos de la concentración que mantenían en la lucha. El mago de las sombras miraba con una sonrisa a Hikari y Haru.

-¿Saben? Es gracioso como siempre triunfa el amor... siempre el jodido amor- la voz del mago oscuro sonaba entrecortada, como si estuviera a punto de romper en llanto.

-Pero no importa, de todas maneras ambos moriréis- la voz del mago recupero su seriedad inicial antes de que con una poderosa ola de energía oscura los transportara a todos a un lugar que ellos ya conocían...

Los seis jóvenes magos despertaron desorientados y algo mareados... La primera en incorporarse fue Sakura para comenzar a visualizar a su alrededor y observar con asombro que se encontraban en las ruinas del castillo de las sombras.

-Qué raro es volver aquí ¿No?- dijo Yuiji mientras posaba una mano en su hombro. Sakura solo asintió con la cabeza.

Una vez que todos recuperaron la conciencia observaron el lugar con detenimiento... Hace varios meses habían librado una de sus primeras batallas desde que se iniciaron como magos.

Un aire de nostalgia los invadió a todos. En esa época aún no sabían nada de su historia. En esa época aún les costaba creer que realmente eran magos... y que no era un simple sueño espectacular que terminaría al sonar el despertador...

Todos comenzaron a recorrer el castillo. Estaba más deteriorado que hace unos meses, pero aún se sentía ese aire misterioso y lúgubre.

Al llegar al salón principal, lugar donde se libró la batalla, miraron sorprendidos a una chica de cabellos rojizos.

-¡Ábrete puerta de los gemelos! ¡Géminis!- todos miraron sorprendidos a la maga celestial... según tenían entendido nadie más que ella podía usar a los zodiacos.

-¿¡Quien rayo eres tú!?- cuestionaron los magos al unísono al encontrarse con la sonrisa engreída de la pelirroja.

-¿Qué no lo notaron? ¡Soy una maga celestial!-

Definitivamente el rostro de los seis jóvenes magos era digno de fotografía... Ellos no salían de un problema para ya meterse en otro.

N/A

De acuerdo... Lo siento mucho ;-;

La razón por la que se quedaron sin capitulo fue una razón que me dolió hasta el fondo de mi alma... ¡Pantallazo azul de la muerte!

Mi computadora murió... y con ella todos mis documentos. Sí, eso significa que me quede sin todas mis historias.

Y ya no hablo solo de esta, estan también miles de historias que yo he escrito y no he publicado en ningún lado.

Mi madre y yo intentamos ver que se puede hacer, a ver si se pueden salvar los documentos.

En fin.

Espero que les haya gustado el capitulo :3

Voten y comenten que les pareció :v y para todos aquellos que querían drama... pues creo que el final del capítulo habla por mí.

Por cierto, siento la mala estructura y redacción de este capítulo, lo tuve que escribir desde el IPad lo cual me es un poco incómodo.

Me despido por hoy, y espero poder leerlos en menos de una semana... espero ;-;

-Ale


Una escuela ¿Normal?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora