Seras Solo Mia

Disculpas aceptadas

En la noche del viernes Trent estaba teniendo un atracón de chocolate en la cocina. Luke que ya sabía que algo le estaba pasando a su amigo, lo ayudo a calmarse y a dejar la comida. Luego hablaron y Trent sintió la oportunidad de sacar todo lo que estaba sintiendo. De desahogarse...
Trent: ¿Invitarla al parque? -lo miró como si estuviese loco-
Luke: ¿No lo entiendes? será como una cita...los dos solos...compartiendo un picnick y bañándose en el lago...-le dijo obvio-
Trent: Después de está discusión Mels no aceptará salir conmigo ni muerta -contestó sin animos-
Luke: Vamos... dile algo lindo de lo que te salé cada vez que estás con ella y listo, la convencerás más rápido de lo que imaginas -dijo radiante-
Trent: No es una mala idea, eres bueno en estas situaciones...
-despeinándolo un poco-
Luke: Lo sé, vamos a descansar...así mañana estarás listo - se fueron a sus dormitorios-
Trent no logró pegar un solo ojo en toda la noche, ya estaba acostumbrado, desde que Mels había llegado sus noches se hacían largas y solitarias. Estaba imaginando como se disculparía con ella e invitarla a salir, sabía que no iba a ser fácil...

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Se levantó temprano y se quedó dando vueltas en círculos por el living esperandola, para hacerle caso a Luke y arreglar las cosas con ella, invitándola al parque solitario que se encontraba del otro lado de la ciudad.
Luego de casi 2 horas caminando por la sala, Trent la vio salir de su habitación, como de costumbre, la bonita muchacha iría a caminar un rato.
Cuando ella llegó a la sala lo miro sin ninguna expresión de nada, odiaba cuando le hacía eso, no lograba poder ver a través de sus ojos, lo sacaba de quicio, pero optó por abandonar su postura y seguir con el objetivo, ella siguió su camino, ignorándolo olímpicamente.
Trent: Mels... ¿podemos hablar? -la seguía por el comedor-
Ella hacía como si el no estuviera. Agarró las llaves y se fue por las escaleras, con Trent atrás suplicándole para hablar. Al salir de la casa, no la dejaba en paz, estaba dispuesto a hacer lo que sea porque ella lo escuche.
Trent: Por favor...-repitió quinientas veces- te juro que no te arrepentirás...
Paré y lo mire, como de costumbre mi orgullo era muy grande, me fue difícil dejarlo hablar, pero decidí darle una oportunidad por más de que estaba quemando de rabia, me calmé.
Yo: Tienes 2 minutos, no pierdas tu tiempo -dije fríamente cruzando mis brazos-
Trent: Mels... se que estuve mal -tragó saliva- me comporte como un idiota al discutir contigo por eso, porque como tu dijiste no somos nada -se acercó a mi y rodeó con su lengua la comisura de sus labios- Cada uno puede hacer lo que quiere...-dijo no muy convencido- Te quería proteger, siento haber actuado de esa manera -dijo mirando hacia el piso apenado- Espero que puedas disculparme -me tomó las manos-
Yo: No lo se Trent... -dije fingiendo entrar en duda-
Trent: Mels ... Esa noche cuando discutimos iba a irme con Caroline pero entonces me di cuenta que prefiero mil veces pelear contigo que hacer el amor con otra persona... -acaricio mi pómulo-
Me quedé asombrada, ¿acaso podía ser tan dulce? ¿Cómo decía eso? lograba enredarme cada vez más, se contradecía a medida que hablaba, ¿primero me dice 'como tu dijiste no somos nada' y luego 'prefiero mil veces pelear contigo que hacer el amor con otra persona', quién lo entiende? -me pregunté yo misma- Sentía un terremoto bajo mis pies y un impulso gigante de abalanzarme sobre el y probar de una buena vez sus labios, pero para qué si podía hacerlo más interesante, para qué dejársela fácil si podía seguir volviendo loco al chico, diciéndole que no y luego que sí, como el lo hacía conmigo.
Trent: Y...¿me perdonas? -preguntó entre ansioso y apenado-
Yo: -tardé unos segundos en responder- Está bien... estás perdonado -concluí seria- [ Trent eres tan inocente...nunca me enoje de verdad contigo, solo fue para enamorarte más...y al parecer te tengo en la palma de mi mano, no puedo creer que esté haciendo todo esto solo para asegurarme de que seas mío]
Trent: ¡siii ! -gritó entre emocionado y sorprendido-
Caminamos juntos durante casi unas dos horas por un parque, hablando y riendo como si nos conociéramos de otra vida, cantábamos y bailábamos, exactamente como dos ridículos.
Cuando el chico de rizos creyó que era el momento correcto, le preguntó...

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Yo: Por enésima vez Trent, ¡no saldré contigo! -chillé ya cansada-
Trent: Se que tengo muchos defectos y tu... -insistió, el chico si que era duro de orgullo-
Yo: Me gustan tus defectos... te hacen especial -sonreí coqueta-
Trent: ¿Especial? -frunció la ceja acercándose-
Yo: Sí, especialmente terco...-reímos- ¿Cuántas veces tengo que decirte que no quiero salir contigo? -dije enfatizando las últimas palabras-
Trent: Las necesarias para que digas que si... -susurró sensualmente en mi oído izquierdo, provocando un escalofrío por toda mi espalda, yo solo me encargaba de controlar mi respiración-
Yo: Entonces estaremos aquí todo el día porque no te pienso decir que si -me hice la indiferente-
Trent: ¿Porque? -haciendo puchero, como solía cada vez que buscaba algo de mi-
Yo: ¿Porque quieres salir conmigo? -pregunté al mismo tiempo en el que levantaba el ceño-
Trent: Para demostrarte que valgo la pena, que podemos dejar de pelear y llevarnos muy bien...-me dijo en tono de suplica, algo así como ofreciéndome un trato-
Yo: ¿A si?... entonces grita fuerte que quieres salir conmigo -le dije divertida, sabiendo que no lo haría-
Trent se apronto para gritar y le tape la boca.
Yo: ¿Qué haces estás loco, ibas a gritar? -le dije sonriendo mientras tiraba del cuello de su blusa-