El perfecto experimento de mi vida

* Capítulo 8.1 - El escondite *

Parte 1/4

Como había tenido problemas en mi antiguo instituto, estaba segura de que si conseguía amistades en este nuevo instituto, mis padres no pondrían ningún impedimento para que pasara tiempo con ellas. Tenía que inventarme un pretexto perfecto para conseguir ir.

Llamé a Ana para informarle sobre mi plan y sobre mi estrategia para meterle en él y por supuesto aceptó, además de colaborar aportando ideas. Finalmente, acabamos haciendo un típico tópico. Irme a su casa a dormir porque era su cumpleaños.

Llamada entrante: Mamá.

Era mi oportunidad.

- ¿Si? - contesté haciéndome la sorprendida.

- Acabo de salir del trabajo, voy hacia tu colegio.

- Mamá, veras hay algo que quería decirte...

- No me digas que has vuelto a pelearte con el cartero...

- No, no es eso. - le interrumpí. - He hecho una amiga nueva. Se llama Ana y... esta noche es su cumpleaños...

- Ya veremos Ashley, depende de la reunión. - sentenció.

Y todo parece ser que salió a pedir de boca, pues cuando llegó a casa, me dejó ir. Por suerte, tenía allí mi vestido asique con una mochila pequeña ya llevaba más que suficiente.

Sobre las 7 de la tarde, llegué a casa de Ana. Nos arreglamos y guardamos las cosas de la casa que más valor económico y sentimental tenían para que no les pasara nada.

Cerca de las 12 empezó la fiesta, llegando los primeros invitados, preparados para beber hasta perder la noción del tiempo y el espacio. Esta iba a ser nuestra fiesta e íbamos a disfrutarlo. Mark llegó un poco más tarde porque sus padres no se dormían. Se acercó a nosotras nada más vernos.

- Necesito beber... - dijo él.

- ¿Qué pasa? - dije preocupada.

- Peleas con Beth.

- ¿Beth? - pregunté

- Su novia. - dijo Ana, algo cansada por el tema.

- Ahí no me meto. - dije librándome del asunto.

Cogimos una botella de tequila y otra de vodka. Y a los 3 cubatas y una gran serie de chupitos, nuestro cuerpo había perdido el sentido de la gravedad. Tenía la sensación de flotar y nada de lo que podía observar estaba nítido.

El grupo de Jason, se acercó a nosotros y nos quitó lo que quedaba de tequila, a pesar de ser muy poco, asique propusimos un plan alternativo, como jugar al escondite. Mark era el que nos tenía que buscar asique salimos corriendo como pudimos, en busca de un buen sitio para ocultarnos. Ana fue hacia el piso de arriba, pero entre tanta multitud le perdí enseguida de vista asique me dirigí hacia el patio exterior. Debido a varios factores como las prisas, la velocidad que creía estar cogiendo y la multitud de personas, acabé en la piscina.

Uno de los invitados se percató y empezó a invitar a más gente al agua, lanzándolos contra mí. Todos me caían encima y casi no podía moverme o salir a la superficie para coger aire. Lo intenté pero llegó un punto que no sabía si estaba sola, si estaba en el fondo o ambas cosas.

****

En breve más.
- Foto de Ashley.