24. It's allright

815 79 162
                                    

SUNGJONG

Debe de haber pasado una hora y media o un poco más hasta que me calmé, y aunque seguía teniendo ganas de llorar, no me permití hacerlo. Al pensar en el beso me daban ganas de llorar otra vez, pero tenía que suprimirlo de mi memoria, sólo así las cosas saldrían bien mañana.

-Esto apesta -dije para mí mismo pasándome la manga de la camisa por los ojos.

¿No odias que al llorar, tu nariz se llena de mocos y tus ojos se ponen rojos? Porque yo sí.

Unos golpes en mi puerta hacen que de un salto.

-Sungjong-ah, ¿vas a cenar? -la voz de mi hermano me llama desde el otro lado de la puerta.

No quiero responder, pero no quiero que entre y me vea así. Abandono mi posición de bolita en el suelo, justo junto a la ventana, y voy hacia a puerta.

-Sungjo... -abro la puerta y se detiene.

-No tengo hambre, gracias -digo, tratando de ocultar mi cara en la oscuridad de mi habitación.

-Yah... ¿Por qué estás así? ¿Pasó algo? -preguntó preocupado y dio un paso dentro de mi habitación.

-No es nada, Sungkyu, no te preocupes -digo, pero él no hace caso y enciende la luz para verme mejor.

-Vamos, ¿qué sucede? -insiste.

-Es... Son los exámenes finales, me tienen mal -miento y mi voz tiembla.

-Aw, no te preocupes Sungjong, sé que lo harás bien -trata de animarme en algo innecesario.

No quiero seguir mintiendo, pero sigo sin confiar plenamente en mi hermano.

Sin intención de hacerlo, empiezo a llorar otra vez, ahora frente a él.

-¿Dije algo malo? Lo siento, ¿qué hago? ¿Quieres un abrazo? -pregunta, y suena como si fuera a explotar por lo confundido que está.

Incapaz de hablar, niego con la cabeza.

-¿Entonces quieres abrazar a tu peluche? ¿Cuál de ellos? ¿Al que maltratas o al nuevo? -pregunta tras pregunta, suena más desesperado-. No llores, vamos, te compraré caramelos de limón y llamaré a Dongwoo.

Respiré un poco para tratar de calmarme.

-¿Harías eso? -pregunté acompañado de un hipido de llanto.

-Aguarda -salió de mi habitación.

Aún llorando como un maldito bebé me siento en mi cama y tomo a "mi peluche maltratado". Vivió una temporada bajo mi cama, pero por fin lo volví a encontrar. Lo tengo desde los cinco o seis años, es un oso blanco no muy grande y desde que tengo uso de razón, lo golpeo cuando estoy molesto, por eso Sungkyu dice que lo maltrato. El peluche cambia de nombre dependiendo de con quién esté molesto, hoy le pondré Myungsoo.

Cuando Sungkyu entra a mi habitación otra vez, estoy en plena batalla con el oso de peluche. Él mira con total naturalidad cómo el peluche vuela desde mis manos hasta la siguiente esquina de mi cuarto.

-Aquí tienes los caramelos, Dongwoo dice que viene en camino. Yo iré a cenar, ¿sí? -dice Sungkyu entregándome una bolsa llena de todo tipo de dulces con sabor a limón.

-G-gracias, y por favor, no le digas a papá y mamá de esto -le pedí.

-Está bien -sonrió un poco, me pregunto cómo hubiese sido todo si, en lugar de distanciarnos cuando él tenía unos ocho años, hubiésemos sido hermanos unidos desde siempre.

-¿En serio gastaste tu dinero en todo esto para mí? -señalé la bolsa.

-Nah, saqué el dinero de encima de tu escritorio -dice y se retira.

paradise ➳ myungjongWhere stories live. Discover now