paradise ➳ myungjong

35. Our paradise

SUNGJONG

Hoy era el día en el que viajaría a Seoul junto a Myungsoo para no volver más.

Le pedí que me esperase dos días para ver todo lo que necesitaría y dejar en mi casa el resto. También para planear cómo me iría.

La idea era que sólo Sungkyu lo supiera en un principio, y que si mamá se preocupaba demasiado, le contara que me fui con Myungsoo. Nada más. Mis padres no podían saber donde estaba ni lo que estaba haciendo. Era... Algo así como un niño perdido, de los de Peter Pan.

Ya estaba listo para irme, era temprano, por lo que papá estaba en el trabajo y mamá había salido a algún lugar. Sólo estábamos mi hermano y yo en casa.

—No puedo creer que te vayas de casa antes que yo —rió Sungkyu mientras yo tomaba mi maleta.

—Incluso si Myungsoo no me hubiera hecho la oferta, me habría ido apenas tuviera suficiente dinero. Odio vivir aquí con... Nuestro padre —le dije.

—Lo sé —rascó su nuca—. ¿Sabes? Es en momentos así que me arrepiento de cómo te he tratado.

—A algunos idiotas les hace falta una oportunidad para cambiar —sonreí y comencé a caminar con una mochila al hombro y la maleta en una mano.

—De todos modos, lo siento.

—No te disculpes, está bien —le aseguré.

Me acompañó hasta la salida, donde un pequeño auto esperaba con el maletero abierto. Myungsoo y sus padres hablaban a un lado de éste.

—¡Ahí estás! —mi novio corrió a abrazarme—. ¿Todo listo?

—Sí, sólo debo despedirme de Sungkyu —le informé.

—Los dejo solos entonces —se alejó de nuevo.

Sungkyu tenía sus minúsculos ojos brillantes y mordía su labio.

—Despídete rápido, no quiero llorar —hizo su cabeza hacia atrás y se abanicó la cara con las manos.

—Tampoco te quiero ver hacerlo —reí. También estaba triste, pero soy capaz de tragarme las lágrimas un poco—. Cuida de mamá, ¿sí? Supongo que papá perderá la cabeza cuando se entere de esto. Nos vemos.

Fui envuelto por sus brazos un poco bruscamente.

—Mantenme al tanto de lo que pase allá, ¿okay? Si necesitas ayuda para aplazar lo del servicio o con quién quedarte si pelean, dime y lo resolveré por ti —susurró—. Te quiero, hermanito.

—Y yo a ti —me separé de él—. No seas melodramático, me puedes ir a ver cuando quieras.

—Pero no tendré a quien molestar todos los días —rió y luego miró más allá de mí—. ¿Puedes venir un segundo?

Me volteé para ver que le hablaba a Myungsoo.

—¿Sucede algo? —Myung nos mira a ambos.

—Cuida de mi hermano, ¿sí?

Mis mejillas no tardaron en sonrojarse.

—¡SUNGKYU! —reclamé, pero fui ignorado por mi hermano y mi ahora risueño novio.

—Sé que puedes protegerlo bien, así que tienes mi confianza. Les deseo lo mejor a ambos en Seoul —sonrió.

—Jongie no la pasará mal conmigo. Lo prometo —Myungsoo le sonrió de vuelta.

—No los retraso más. Adiós, chicos.

Kyu volvió a abrazarme y luego hizo lo mismo con Myungsoo. Nunca me hubiese esperado ver eso.