37. Standing Face to Face (Final)

279 45 44
                                    

Un mes más tarde...

Era difícil seguir con la dinámica de ser frío con Myungsoo tomando en cuenta su comportamiento el último tiempo. Estaba siendo tan dulce, tan atento con él que de vez en cuando cedía y simplemente era el de siempre, el Sungjong de antes. Por supuesto, unos minutos después volvía a su papel de idiota, con la esperanza de que su novio se aburriera de él y lo mandase a la mierda.

Sungjong sabía que Shinyeong le había dicho a Myungsoo que quería terminar con él, por eso el cambio de actitud. No es que antes Kim haya sido un novio horrible con él, pero el cansancio le ganaba siempre a su instinto de ternura. Siempre estaba demasiado cansado para dar una vuelta o salir a comer, siempre estaba en lo suyo, metido en su mente y sus problemas. Incluso habían veces que lloraba a escondidas para evitar darle explicaciones a Sungjong.

Ahora era distinto, incluso si Myungsoo sentía que moriría de cansancio, hacía todo tipo de cosas por Sungjong, desde regalarle pequeños detalles hasta llevarlo a cenar afuera los sábados.

Para Lee, era doloroso recibir este trato, cuando todo lo que tenía para devolver era frialdad y una despedida que se aproximaba. Porque, sí, ya lo había dejado todo para el último momento posible. Estaba a tres días de tener que presentarse para hacer el servicio y aún no terminaba con Myungsoo.

El domingo era su penúltimo día juntos. También era el día de su última cita.

Myungsoo la planeó sin tener idea de que era la última, él sólo quería que fuera una especial. Con el dinero que le enviaban sus padres y el par de won que les pagaban por show a Infinite, había ahorrado suficiente para comprarle un regalo a su novio, uno que le demostrara lo mucho que lo necesitaba en ese momento. Para él, esa cita era una súplica para que no terminaran. Para Sungjong, una hermosa tortura.

Salieron del apartamento a las seis y dieron una vuelta por el parque cerca de su casa. La verdad era algo que hacían seguido ese último tiempo. Caminaban hablando sobre lo que fuera, veían a los niños jugar y a la gente pasar a su alrededor.

-Jongie, ¿nos podemos sentar? -pidió Myungsoo, acercándose a una banca vacía.

-Por supuesto -respondió-. Si estabas cansado me lo hubieras dicho.

-Descuida, mis piernas ya se acostumbraron al entrenamiento, ha pasado como un año.

-Diez meses -corrigió Sungjong. Esa información la tenía más que clara-. Han sido diez meses.

-Eso es casi un año. Casi un año viviendo juntos, ¿qué quieres hacer para el aniversario? -Myungsoo abrazó a su novio.

-No lo sé, no pienses en eso, aún falta mucho -Sungjong pasó saliva.

En otras palabras, lo que quería decir era que no se hiciera ilusiones, porque él no estaría para ese entonces. Ni siquiera estaría allí dentro de tres días.

-Qué aburrido te has puesto -bufó Kim, con tono de aegyo-. Estás un poco serio, ¿te encuentras bien?

-Sí, estoy bien -Sungjong sonrió y acarició el cabello de Myungsoo, casi sin darse cuenta, como un reflejo.

-No te creo -dijo Myungsoo, sentándose derecho-. Pero sé qué te puede animar.

Metió su mano al interior de su abrigo y sacó una pequeña caja cuadrada de color azul oscuro.

Sungjong ya se imaginaba lo que era.

-Toma, ábrelo -dijo Myungsoo con una sonrisa brillante. Hoyuelos incluidos.

Jong aceptó el regalo con manos temblorosas y retiró la pequeña tapa, revelando un anillo.

Era simple, de plata y sin ningún diseño aparte del pequeño corazón grabado en el centro.

paradise ➳ myungjongWhere stories live. Discover now