Capítulo Diecinueve

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"¡Esa maldita perra!", grité y traté de bajarme de la cama, pero las agujas IV hicieron detenerme.

"Lauren, ella sintió que lo mejor era...", Clara tragó saliva. "Que ella volviera con Austin, y ustedes dos solamente fueran conocidas".

"¿Dónde está ella? Dios, cuando vea su maldito rostro", llevé mis manos a los costados de mi cabeza en señal de frustración.

"Cómo la enfermera Jackson dijo antes, encontramos aquí contigo a Camila en la mañana; ambas durmiendo", explicó mi madre y comenzó a retroceder lentamente hacia la puerta con miedo. "Ellos tuvieron que escoltarla fuera de la habitación ya que no tenías permitido las visitas. Necesitas calmarte, Laur. Déjame ir a buscar a la doctora, ¿De acuerdo?".

"¡No! ¡Tráeme a Camila!", grité mientras veía a mi madre salir de la habitación que se encontraba lleno de gritos frenéticos.

Gruñí e inmediatamente comencé a quitarme del cuerpo enredados los cables. Salí corriendo de mi habitación en una furiosa persecución, mis ojos se abrieron al ver a mi madre apuntarme con el dedo; Normani y Camila estaban a su costado. Entrecerré la mirada en la pequeña cubana y empecé a dar pasos cortos antes de lanzar todo mi cuerpo hacia ella.

"¡Lauren!", chilló Normani mientras caíamos al suelo.

"¡Quítate de encima!", chilló Camila, mis manos arañándola completamente fuera de control. De repente, sentí un fuerte agarre en mi espalda, alejándome de Camila y forzándome a estar en el suelo. Hubo un pellizco en mi brazo lo que mi cuerpo se sacudiera rápidamente; y luego mis ojos fueron forzados a cerrarse.





*****





"No quise hacerlo", murmuré, respondiéndole a la doctora y a mi madre quienes se encontraban al borde de mi cama. "No pude controlarme. Estaba muy enojada con ella".

Luego de un largo periodo de silencio, la doctora habló, "Vamos a tener que poner tu liberación en espera".

"¿Qué?", grité confundida y tratando de levantar mis manos por el gesto, pero fracasé, mis manos se encontraban sujetadas a la cama del hospital. "¡Fue un error!".

"Es obvio que no estás lo suficientemente estable como para continuar con tu carrera en estos momentos", explicó con una sonrisa triste. "Si dejamos que te vayas ahora, podrías poner a todo el grupo en peligro y hacer que fracasen".

"Pero", me detuve con un suspiro. No podía hacerle esto a todas; además, esto también era su trabajo. "Bien".

"Y tu madre nos dio el permiso para realizarte unas intensas pruebas", la voz de la doctora disminuyó al notar la molesta mirada que le di a Clara. "Pero no podemos realizarlas sin tu permiso también".

Mantuve la mirada en mi madre antes de continuar, "Seguro, ¿Por qué no?, pero solo con una condición".

"¿Y eso es?".

"Que usted permita que Camila me visite", dije con confianza. "De hecho, la traerán aquí ahora mismo y nos dejarán a solas".

Mi mamá se aclaró la garganta, "Lauren Jauregui. ¡Te harás estás pruebas sin ninguna petición por el bien de tu salud!".

"Haré las pruebas", miré a la doctora. "Si Camila me visita".

La doctora me miró y asintió, luego volteó a ver a mi madre en busca de su aprobación. Clara finalmente dejó escapar un quejido mezclado con un suspiro. "Bien. Esto es una completa mierda".




***





Antes de que me diera cuenta, Camila se encontraba en el familiar sillón que estaba en la esquina de la habitación del hospital. Ella se mordía su labio inferior mientras jugueteaba con sus dedos al momento en que la habitación quedó en profundo silencio.

"¿Ellos no te desataron?". ella rió un poco con una pequeña sonrisa.

"No lo tengo permitido hasta después de que me realicen algunas pruebas", le respondí, pero no pude regresarle la sonrisa.

Ella frunció el ceño ante mi expresión facial, "¿Por qué me quieres aquí, Jauregui?".

Me quedé mirando las líneas de los arañazos marcados en sus mejillas antes de hablar, "¿Por qué le dijiste todo a mi madre? ¿Por qué vas a volver con Austin?".

"Estoy tratando de protegerte", dijo ella con firmeza.

"¿De quién? Porque obviamente no estás haciendo un buen trabajo".

"Pensé que podría salvarte de Austin al salir nuevamente con él. Pensé que podría defenderte de mí si tan solo confesaba todo lo que había sucedido entre las dos a alguien cercano a ti, y seguir adelante", Camila suspiró. "Pero hay una persona del que no puedo protegerte, y esa persona eres tú".

"Estas en muy mal estado, Lauren. ¿No ves lo que te estas haciéndote a ti misma?", ella continuó.

"¡¿No ves lo que tú me estás haciendo a mí?!", discutí. "Nunca había tenido los malditos ataques de pánico antes de que tú realmente comenzaras a mostrar interés en mi".

"¿Interés? Tú y yo sabemos que solo era para hacer que tu arrepentido trasero se sintiera mejor acerca de toda la situación", Camila siseó.

"Pensé que se suponía que eras mi amiga, Camila".

"No quiero eso", respondió al instante. "Y sé que tú tampoco".

"Bueno, entonces, ¿Qué quieres?", me incline un poco hacia adelante. "Probablemente es sexo con Austin".

"No juegues con esa maldita carta de sexo conmigo otra vez, Jauregui".

"Por dios, ¡Sabes que es verdad!", escupí con una hiriente risa. "¡Él es literalmente tu prostituta personal! Dime, ¿Cuánto cobra por las chicas con trastornos mentales? Porque a veces me siento un poco sola".

Camila ahora se encontraba fuera de su asiento, su rostro estaba cerca del mío y la punta de dedo golpeando mi pecho, "¿Sabes que es lo que pienso? Creo que eliges a los que están enamorados porque tú nunca lo has estado. Estás celosa Lauren, porque sabes nadie se va a enamorar de ti. Eres una loca psicópata que ataca a las personas, y tal vez puedas amar, pero nadie va a amarte a ti".

"¿Cómo pude amar a alguien con un corazón tan frío?", respondí de regreso en su cara, sorprendiéndola. "¿Qué? ¿Esperabas que me quedara callada? No soy tu maldita marioneta, Cabello, así que deja de jugar conmigo".

"Tú fuiste quién me quería aquí", sus ojos color chocolate terminaron con mi frustración y desesperación. "¿Simplemente para pelear conmigo?".

"En realidad, te quería aquí para pedirte disculpas", murmuré.

"¿Qué?", ella retrocedió de mi cuerpo encadenado.

"¿Sabes por qué lo siento?", sacudí mi cabeza. "Te lo he dicho antes, pero esta vez es realmente en serio. Lo siento por todo el dolor que te he hecho pasar, y lo siento por alguna vez gustarme".

Vi como Camila acercaba su mano mi mejilla y apartaba mi cabello de mi cicatriz, "Lo siento por nunca haberme dado cuenta".

"¿Te das cuenta de lo bipolares que somos?".

Camila dejó escapar una risita alegre lo que me hizo levantar un costado de mis labios en una pequeña sonrisa, "Tenemos algunos locos cambios de humor, pero al final, todo vale la pena".

"¿De qué manera?"

"Para hacer esto", Camila se inclinó hacia abajo y besó ligeramente mis labios. "Y esto", luego ella comenzó darme ligeros besos en el rostro. Camila dejó salir una preocupada y triste sonrisa mientras colocaba su frente contra la mía. "Te voy a extrañar".

Cerré los ojos con la esperanza de despertar de esta pesadilla, pero también los cerré para disfrutar el momento, "Yo también te voy a extrañar".

If I Were A Boy (Camren) [TRADUCCIÓN]Where stories live. Discover now