Tal vez fue una señal, o mala suerte, pero la cuestión es que ayer no fue. En cada parada del camino, tenía la esperanza de que subiera, pero no.
Hoy salgo con las chicas, es el cumpleaños de una de ellas. El plan es emborracharla y luego sacarle confesiones para tener algo con que chantajearla el resto de su vida.
Es broma, solo nos divertiremos.
Nos juntamos en el lugar acordado, la música no nos deja casi oír nada. Pedimos algo para tomar. Intentamos entablar una conversación pero es imposible. La música lo impide y escuchamos algo que en realidad nunca se dijo.
En un momento de la noche, acompaño a una de las chicas al baño. Justo antes de entrar, de forma inesperada, me volteo a ver. Ni siquiera se que me llevó a hacerlo, pero lo que vi, me rompió el corazón. No literalmente, claro.
Iba pasando P. con una despampanante morena, guapa y delgada, con el pelo largo y liso. De pronto, sentí como si estuviese en una sobrerrealidad. Pero no. Solo me había tomado dos copas.
Mi amiga dice mi nombre, él se vuelve y me ve, justo en el momento en que soy arrastrada hacia el baño. Mis sollozos son incontrolables, tengo espasmos por todo el cuerpo. Luego de un rato, me calmo. Les aseguro a todas que estoy bien, que solo necesito un trago. Un par de horas mas tarde, ni siquiera tengo conciencia de mi nombre.
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P es de Platónico.
लघु कहानी¿Que probabilidad hay que se suban dos pelirrojos a un mismo autobús? ¿Y de que dos chicas lleven la misma mochila? ¿Y la probabilidad de que un día cualquiera un chico vaya leyendo un libro? ¿Y de que en ese autobús vaya el amor de tu vida?.
