38.

529 65 18
                                    




Inconscientemente mis mejillas se tornaban color rojizo al notar que Jesús me daba miradas cómplices al estar sentada con Daryl.



—¿Estás bien? —cuestiona el cazador colocando su mano en mi frente.


— Si, estoy bien —tartamudeo cada una de las letras dichas provocando que Daryl encarne una ceja confundido.


— ¿Segura amor? —pregunta burlonamente Jesus provocando que me sonroje aún más.



— Hasta aquí.




Ante aquella declaración dicha por el rubio se levanta para quedar enfrente de Paul, Rubén tomando del cuello de la camisa del castaño le da una mirada fulminante.



—No le digas así, cabrón —advierte con voz sumamente grave.


—Ya —interviene Abraham separando a ambos hombres, este niega con la cabeza— hemos llegado, Jesus.



El castaño con una sonrisa se levanta de su lugar, Rick aparcando la RV nos dio la autorización de poder bajar. Jesus tomándome por los hombros me alejo de todos; claro este sin ganarse una mirada fulminante por parte de Rubén.


— Se más discreta cariño, te lo dije para que me ayudarás no para que me delataras. Así que deja de ponerte roja como un tomate cada vez que Daryl te habla. Por favor ¿si? —pide Paul en mi oído a la par que da un apretón en mis hombros.— ¡Bienvenidos a Hilltop!




Y con aquel grito note como Rick se colocaba a mi lado, esta dándome una sonrisa de lado aparta a Jesus de mi.



—Lo siento. Rubén me pidió ayuda —susurra en mi oído mientras caminamos. Con una sonrisa niego con la cabeza con diversión— Podemos hablar tranquilamente, escuche a Jesus decirle a Daryl que podemos ver los alrededores. Maggie se encargará de hablar con Gregory; yo soy un poco... ¿impulsivo?




Asentí con una sonrisa. El líder sentándose en el pórtico de una mansión me hizo un gesto con su mano para que me sentara junto a él.  Así lo hice y nos dedicamos a observar nuestro alrededor.






—¿Sabes? —cuestiona provocando que gire a verle— no confiaba en ti cuando volviste. Estar un año y medio afuera, con un completo extraño. Sería un peligro para mí y los demás.



Ante aquella confesión me quedo rígida provocando que el suelte una pequeña risa.



—Pero —interrumpe— recordé todas aquellas cosas por mi. Le disparaste a Shane para salvarme, arriesgaste tu vida por mí hace semanas. Tú eres mis ojos, ¿lo recuerdas? Te lo dije con el problema del gobernador y déjame decirte que aún pienso en ello. Estaré aquí para ti Agnes.



Con una sonrisa me lanzo a sus brazos para envolverle en un abrazo.


—Gracias Rick —susurre con una sonrisa provocando que él me la devuelva de la misma forma— pero tienes que admitir que Pearce es genial.



—Seguiré pensando en ello.









(...)






— ¿Negan? —cuestione con una ceja enarcada. Rubén asiente un poco delirante, este me toma de los hombros.



—Es una buena oportunidad para nosotros. Nos darán comida parte de su ganado en cambio nosotros le damos seguridad; es un trato justo y lo logró Maggie. Así que podemos estar tranquilos y lo mejor es que Jesús no te molestará más— añade en tono triunfante con una sonrisa— no me gusta que te hable en susurros o te llame amor.


—Pero sabes tú bien que eres el único que quiero y amo —respondo acercándome a él a la par que veo a varias personas subir alimentos a la RV— me ignoraste todo el camino ¿cómo crees que me siento?




Y antes de que el rubio pudiera contestar los muros se abrieron mostrando a dos hombres y a una mujer que estaban totalmente en shock.



—Gregory —llaman al líder, este con una sonrisa se acerca para recibirles con una. El hombre que se le notaba totalmente devastado, desenfundado su cuchillo se lo clavó en su tórax provocando que este de un gemido ahogado de dolor.



Retirando mi arma de su funda, jale el gatillo para darle en la pierna al mismo hombre que había dado la apuñalada al líder.


—¡Alto! —grita Jesus sin embargo antes de poder detener a los suyos.





Una mujer de cabellos cafés me derribó para colocarse arriba mío a la par que un hombre de barba se acercaba con peligro a Rubén.



—¡Alto! —repite Jesus sin embargo un golpe en mi mejilla llego— ¡Ya basta, ya basta!




A pesar de que Jesus gritaba maldiciones, todo se detuvo y a pesar de que la mujer se encontraba arriba mío. No intento nada más: —¡Ellos nos ayudarán con Negan! —agrega con furia Jesus a la par que se coloca en medio de Rick y un hombre de ojos azules.






—Al parecer tu gente no entiende eso— agrega Rick a la par que da un pasos hacia atrás.




—Bájate de mi novia, estúpida —dice Rubén a la par que toma a la mujer de cabellos castaños y la lanzaba lejos de mi— solo yo puedo estar arriba de ella.








Será idiota.














El final será narrado por Rubén.

汽油Where stories live. Discover now