«CAPÍTULO QUINCE»

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Capítulo Quince: ¿Padres? (Parte Dos)

Bill caminó hacia la cocina para prepararle la leche a Ariel. Ya había pasado más de cinco horas desde que el reto había empezado y para ser sinceros.

No era tan malo como él creía.

Lleno de leche en polvo el biberón y luego le puso agua caliente. Lo cerró y lo empezó a agitar con fuerza.

—Jamás creí verte así.

Bill volteo y sonrió de lado al ver a su hermano el cual empezó a hacer el mismo procedimiento de "Preparar leche".

—Es un reto, no es real—viró los ojos.

—Ah ¿Eso crees? Channel dice que necesita tu ayuda urgente.

—¿¡Qué!? ¿A qué hora te lo dijo? ¿Ella está bien? ¿¡Ariel está bien!? ¡Allá voy mis niñas! —y salió corriendo.

Will negó y siguió preparando el biberón.

—Es un reto, no es real—lo imitó con voz gruesa—. Ay Bill... ¿Por qué serás así?

Caminó hasta encontrarse con la "madre de su hijo".

—Aquí tienes, linda.

—Gracias.

La chica agarró el biberón y se lo metió en la boca al bebé para empezar a mecerlo. Hasta ahora el reto estaba tranquilo, todo estaba bien y calmado.

Por ahora.

Bill deslizo sus pies en el piso y se agarró del marco de la puerta para no caerse.

—¿¡Están bien!?

La castaña lo miró confundida.

—¿Si?

—Will me dijo que necesitabas mi ayuda—le entregó el biberón, Channel rio—. Me mintió ¿Verdad? —asintió—. Hijo de pu...

—¡No hables así al frente de Ariel!

—Lo siento, cielo...

Silencio.

El apodo se le había escapado de los labios. Los colores no tardaron en aparecer en las mejillas de ambos.

—B-Bueno... ¿No quieres nada más? —dijo volteándose para que no viera su sonrojo.

—No, ahí está bien. Cambiare a Ariel, ya es de noche.

Channel se paró y se encaminó hasta el cajón que Cam les había dejado para la ropa de los bebés.

Toda la casa había sido adaptada para el reto por lo que todos tenían cuartos individuales ahora.

La castaña se agachó hacia el último cajón y empezó a buscar un bonito ropón rosado para su bebita.

—Ponle algo que la a...bri...—el rubio abrió los ojos y tragó fuertemente saliva.

"Ay no ¿Por qué me haces esto?" pensó mientras se mordía el labio.

—¿Dónde está? Estoy segura que lo vi por aquí...

El chico estaba desesperado. Tenía una perfecta vista del cuerpo de la chica, en especial de su trasero y eso lo hacía sentir caliente.

Demasiado caliente.

"Ay no, ay no, ay no ¿Por qué tenía que ser hombre?"

Apretó sus piernas mientras inflaba sus mejillas.

Drama en la IslaWhere stories live. Discover now