LOU | Larry Stylinson

Capítulo 29

El día de aquél beso, Harry llegó a su casa dormido.

Al parecer Des lo metió en el auto y lo acostó en el asiento de los acompañantes. Cuando despertó, se había despertado en su cama y se desesperó buscando a Louis. Anne llegó rápidamente, y le dijo que él estaba en su casa. Que Louis estaba bien y que, vuelva a dormir.

No pudo volver a dormir.

Así que bajó hacia la sala de estar, y miró la hora. Eran las 02:26 AM.

Llamó a Louis. Sentía que él estaba despierto, y no se equivocó cuando al segundo tono el castaño atendió el teléfono.

—¿Harry? —preguntó, y el rizado pudo escuchar lo rota que estaba su voz—. Hey.

—¿Lou? —dijo.

—Mentiría si dijera que no necesitaba tu llamada —habló Louis en un tono bajo, y triste.

Al parecer Louis no había pegado un ojo.

Al parecer estaba tan triste.

—Hacemos lo de siempre —dijo Louis—. Si no respondes es negativo, y si respondes es afirmativo. ¿De acuerdo?

—Lou —dijo Harry.

—¿Estás bien?

—Lou.

—De acuerdo... —dijo—. No puedo dormir.

No respondió a eso.

Y Louis no volvió a hablar.

Los dos quedaron en silencio, y luego de un minuto Harry fue quien escuchó un sollozo detrás de la línea.

—Lo siento —habló Louis—. No puedo evitarlo. Mi casa se siente más vacía aún ahora que mi padre no está. Y... no sé cómo dejar de pensar en lo mucho que duele, Harry. Y me alegra demasiado saber que te has tomado el tiempo de llamarme, como... como sabiendo que necesito a alguien —respiró hondo, y luego en un hilo de voz le dijo:—. Y te juro... por Dios pequeño, te juro que me acuerdo de nuestro beso y es lo único que me hace sonreír.

Harry se cubrió los ojos con su mano e intentó no llorar.

En serio intentó no hacerlo pero teniendo a Louis en el teléfono llorando, y diciéndole algo tan bonito como eso y a la vez tan triste. Era inevitable no echarse a llorar.

—Louis... —le musitó Harry apunto de llorar. "Te quiero, Louis" deseó decirle.

—Y dices mi nombre de esa manera, Harry —dijo Louis—. Por Dios, puedes decir mi nombre completo. Eso es perfecto.

El rizado hizo una risita.

Al pasar una hora, Louis le hablaba y Harry escuchaba. A veces reía un poquito, y  a veces sólo quería llorar.

Pero bien.

Haría todo lo posible para que Louis volviera a ser feliz como alguna vez fue en la vida.

Colgó cuando notó que Louis se había quedado dormido.

Buen trabajo, Harry. Lo lograste.

Los otros dos días sólo Louis pudo llamar a Harry, y quizá hablarle un poco. Tal vez porque Louis necesitaba a Harry, y Harry necesita que él lo necesite. Fácil.

Por un momento se le cruzó por la cabeza contarle a Des sobre el beso pero estaría demente entonces.

—¿Cómo está, Louis? —preguntó su papá sentándose—. ¿Bien?