Love, Emma.

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Estuvimos caminando un par de minutos hasta que llegamos al puerto. Nos sentamos y miramos el horizonte en un cómodo silencio.

- Creí que si no te lo decía podría seguir siendo la antigua Emma, para una sola persona.
No dijo nada, solo me miró de una manera muy intensa y entrelazó nuestras manos.
Estuvimos juntos todo el día, fuimos a comer a Granny's y navegamos en el pequeño barco que sus padres le dejaron, antes de que fallecieran. Cuando cayó la tarde tuvimos que despedirnos, de nuevo, vi cómo el taxi se alejaba y lo llevaba hacia el aeropuerto.
Crucé la calle y fui a casa de Granny para recoger a Henry. Regresé a casa con el bebé dormido, subí a mi habitación y me recosté con Henry sobre mi pecho.
Sobre la mesa de noche, junto a la cama, estaba un globo terráqueo, cerré mis ojos y comencé a girarlo, puse mi dedo sobre el globo y se detuvo, cuando abrí los ojos observé que mi dedo señalaba Boston. Recordé a Killian y me pregunté, qué estaría haciendo mi mejor amigo en ese momento.

El tiempo pasaba muy rápido para mi gusto, Killian mandaba vídeos muy seguido, con la excusa de que quería que Henry lo conociera, así, cuando llegara el día en que se vieran en persona Henry no tratara como a un completo desconocido.
Recibí un vídeo para la primera navidad del niño:

"¡Henry!¡Es tu primera navidad! Espero que hayas recibido mi regalo."
- Gracias por el libro, Killian. Estoy segura que le encantará, algún día.

Como cuando Killian consiguió un nuevo apartamento, cuando con ayuda de su nueva novia, Milah, decoraba su apartamento.

Para no quedarme atrás también enviaba vídeos, cómo cuando Henry dio sus primeros pasos.
Killian envió otro vídeo para la cuarta navidad del niño, dónde también estaba Milah, hasta mandaron tarjetas navideñas con su foto en ella, nosotras también enviamos tarjetas navideñas, sólo que, agregamos a Regina en la foto. Ni a ella ni a mi nos agradaba Milah, no la conocíamos, pero había algo en ella que nos daba mala espina.

Henry quería que les dijera que podía andar en bicicleta y contar hasta cinco sin caerse, pero me gustó más la idea de enviar el acontecimiento por vídeo, así fue, sólo que papá también grabó la caída de Henry cuando contó el número cinco, a Killian le pareció muy divertido.

1 año después.

Ahora tengo un trabajo estable, dejé a mis padres y conseguí un pequeño lugar donde Henry y yo podemos establecernos.
- ¡Buenos días, señorita Swan!¡Bienvenida de nuevo al hotel!, me parece que el penthouse es para usted.
- ¡Muchas gracias Regina.!

Miré al señor junto a mi en la recepción del hotel, tomé la llave que Regina me daba y entré al ascensor. Así es, el penthouse es para mi, al menos es la habitación que tengo que ordenar y limpiar hoy, puede que no dirija mi propio hotel, pero trabajo en uno, como personal de limpieza.

Por otra parte, Regina trabaja como recepcionista en el mismo hotel. Desde la primera vez que entré en su farmacia no hemos dejado de tener contacto, estuvo conmigo a lo largo del embarazo y después de dar a luz. Ha estado presente en cada cumpleaños y acontecimiento importante en la vida de mi hijo, Henry la considera como su tía y mis padres como su otra hija. Con respecto al apellido Swan, ella me lo puso después de haber tenido un ligero percance con un cisne.

Al estar limpiando la habitación encontré una revista, vi a la modelo de la portada y me pareció familiar, ¡era Ruby!. Por alguna razón no me agradaba cuando comenzó a salir con Killian, ahora no me agrada para nada, no después de haberle dicho a medio mundo sobre mi embarazo.