Parálisis (Editando)

40 Epílogo

Había pasado justamente un año desde que había vuelto a caminar, demasiadas cosas cambiaron y no siempre fue para bien, pero tampoco todo fue para mal. De eso se trataba la vida, de caer y volver a levantarte.

Entre las cosas malas esta Brent, quien se fue a Europa a estudiar, nunca volvimos a estar tan cerca como antes, pero de algún modo teníamos un lazo que siempre nos unirá. Y aunque lo agrego a las cosas malas sé que es una de las mejores, él es feliz y si él lo es yo también.

Otra de las cosas que nos entristeció fue el cambio en la vida de Clark quien se fue a estudiar a Canadá, dejando a Lidia vuelta un desastre, cosa que no duro mucho porque meses después ella también se fue con el a la universidad, así que solo fue algo malo para mi.

Entre las cosas buenas la academia había dado muchos frutos y hoy seria la prueba de esto, tantas chicas se esforzaron para esto, de todas la edades, no había limites, todos habíamos crecido y era hora de demostrarlo al mundo.

Estaba detrás del escenario donde habían cientos de personas esperando por verme, muchos dijeron que no podría bailar, otros me apoyaron y los demás simplemente no dieron su opinión y hoy estaba aquí para demostrar lo capaz que puedo ser junto a un gran grupo de personas sumamente talentosas.

Liam no había llegado y la verdad me sorprendía un poco, necesitaba verlo, saber que estaba aquí sonriéndome, Apoyándome.

La hora de salir había llegado, tenia los nervios a flor de piel, mis manos sudaban y no quedaba más que reconfortarme mentalmente repitiendo una y otra vez que para esto me he esforzado.

Salimos al escenario, aplausos, gritos, todo menos silencio. Familias sonreían al ver a sus hijos cumpliendo sus sueños y esto sin duda alguna es una de las mejores sensaciones que en mi vida he tenido.

Las luces fueron apagadas, el silencio hizo presente en el auditorio y un foco de luz fue enfocado en mi, levante el rostro mientras buscaba a Liam con la mirada, Sonreí al verlo frente al escenario y sin más comencé a bailar, era simplemente mágico estar aquí, cumpliendo mi sueños y con las personas que quiero apoyándome, esto no lo cambiaria por nada, porque lo que era tristeza fue convertido en alegría y no me cansaré nunca de agradecerle a Dios por las personas tan especiales que puso en mi vida, porque soy afortunada, porque tengo la mejor familia y amigos y porque tengo el mejor novio del mundo. La musica cambio dando paso a un estilo Hip-hop el publico comenzó a aplaudir y los demás bailarines ya estaban a mi lado con tantos y geniales pasos, mostrándole al mundo lo que han aprendido y que pueden lograr mas de lo que muchas personas piensan que no.

...

Luego de algunas mas presentaciones todo había acabado y me sentía todavía con energía de sobra, mi familia se había convertido en besos abrazos, palabras bonitas y mas abrazos, no podía siquiera pensar en para de sonreír.

Me di un baño rápido para cambiarme y salir con todos a cenar, lo habíamos planeado y por suerte termine con energía. Sonreí al verme en el espejo, no me acostumbraba a verme parada, con mis piernas haciendo cualquier movimiento, era extraño a pesar de que ha pasado un año, mi recuperación había sido increíblemente rápida, todo pasó tan rápido, me acostumbré a ponerme de pie, a brincar y aunque no puedo bailar como una experta doy lo mejor de mi y sé que con práctica mejoraré y quién sabe si llego a ser de las mejores. Coloque mi cabello detrás de la oreja y salí en busca de mi familia.

2 horas después estábamos en un restaurante bromeando sin parar, satisfechos por la deliciosa comida y el gran ambiente. Mis padres se fueron antes y solo quedábamos Clark y Lidia y claro Liam y yo.

Está noche no podría ser más perfecta, estar junto las personas que amas con el alma sin duda alguna no tiene precio.

-Bueno chicos, fue un placer haber estado con ustedes pero Luna y yo ya nos debemos ir.-Anunció Liam ya de pie a mi lado.

Lo mire desconcertada y el me sonríe tranquilo y pues tuve que seguirle la corriente.

-Este si, pasen buenas.-Dije extraña y ellos sonrieron asintiendo.

Liam coloco su mano en mi cintura delicadamente y salimos de aquel hermoso lugar.

-¿Que fue todo eso?.-Pregunté sonriendo.

-Tengo algo que mostrarte.-Anunció.-Pero...-Levanto un dedo.-No preguntes qué.

-No es justo.-Me queje

-Es una sorpresa cariño.-No dije más nada, ya no importaba, su pequeña y simple palabra acariciaba mi oreja "Cariño" nunca me había llamado de tal manera y no puedo evitar que se sienta bien.

Si, Liam Clark no deja de causar cosas nuevas en mi cada día y espero que siempre sea así, que cada día nos traiga consigo nuevas sorpresas, peleas para hacer mas fuerte nuestra relación y por supuesto una gran reconciliación.

Subimos a su auto ambos sonriendo y ninguno sin decir absolutamente nada. El camino fue en silencio, cerré mis ojos pensando en los inevitables cambios que damos aun sin quererlos, simplemente llegamos a un punto donde al mirar atrás ya no somos las personas que antes eramos, somos mas reales, estamos mas vivos, sentimos y amamos.

Unos labios rozando los mios me hicieron sonreír.

-Llegamos.-Dijo y salio del auto mas rápido de lo que esperaba. Abrió mi puerta invitandome a salir y como toda señorita educada la tome.

Estábamos en la playa, en la playa que habíamos venido hace un año.

-Ven por aquí.-

Mi rostro se iluminó, simplemente no podía creer lo que mis ojos veían. Era como volver atrás y vernos, verme sin poder siquiera sostenerme bien, verme besándolo, todo estaba totalmente exacto y era hermoso porque volvió a traer a mi vida uno de mis mejores recuerdos junto a él.

No encontrábamos abrazados mirando al cielo, las palabras sobraban, no eran necesarias, me encanto el detalle y estaba orgulloso por eso, su cara claramente me lo mostró.

-¿Liam?.-

-¿Si?.-

-Gracias.-Sonreí sobre su pecho y voltee mi rostro para poder verlo.

-No tienes que agradecer nada.-Dijo acariciando mi rostro.

-Si, si tengo que hacerlo. Gracias a ti estoy aquí, gracias a ti camino y he logrado mis sueños, eres mi ángel el que Dios me envió para ser feliz, para enseñarme a ver las cosas desde otra perspectiva, para tener fe en mi, en que todo lo que me proponga alcanzar. Gracias por enseñarme a amar, por dejarme amarte, gracias por estar conmigo, por quererme a pesar de todo.

-Te amo.-Dijo y nuestros labios fueron unidos.

Mi cuerpo estaba debajo del suyo, sus labios besaban mi cuello de manera lenta haciendo erizar toda mi piel, temblaba como gelatina cada vez que su lengua hacia contacto con mi oreja, lo sentía sonreír, sabia lo que estaba causando y claramente yo sabia que pasará si no lo detengo.

Lo amo, lo amo como a nadie y creo que estar con él seria una de las cosas más maravillosa que podría hacer.

Sin querer pensar más para que no vengan dudas a mi cabeza coloque mis manos en su cuellos atrayendolo hacia mi, sus manos paseaban por mi cuerpo de manera suave, lenta, cuidando cada centímetro de mi piel.

-¿Estas segura? Si no lo estas lo respeto y esperó el tiempo que desees, te amo y por ti haría lo que sea ¿Lo sabes?.-mi corazón latía rápido, no faltaba nada mas para confirmar que si quiero estar con Liam.

-Si quiero, quiero que seas el primero en todo.-

        ******Ahora sí FIN******