Capítulo 17: Entrando al Roller

436 17 0
                                    

Narra Matteo:

Subieron todos al auto, nosotros teníamos que llegar antes porque Luna tenía la llave del Roller, de todos modos al paso que íbamos  llegaríamos 20 minutos antes.

Íbamos bien, habíamos arrancado y emprendido el recorrido tranquilos, pero como siempre el silencio fue interrumpido por mis pequeños y ruidosos niños.

— ¿Tú qué te crees? ¿Acaso eres el rey del mundo? Déjame, puedo sola — reclamó Sol a su hermano.

— Yo no me creo nada, al contrario, la única que es creída acá sos vos  F R E S I T A — le dijo separando cada letra

— ¡Hey! La cortan con sus discusiones tontas o nos volvemos y se quedan en sus abuelos — murmuró mientras los miraba de reojo.

— ¡No mamá! — dijo con un chillido Sol.

— El día que aprendas a portarte bien, siempre vos ¿Ves lo que logras? Solo pareces una nenita caprichosa — giró los ojos su hermano.

— Tomás Basta vos también — dije mirándolo fijo por el espejo.

— Eres insoportable — gritó Sol mientras se cruzó de brazos.

— Listo, me cansaron — habló Luna — Llévame a la casa de mis padres — dijo con autoridad.
Yo: Tomás Basta

— Perfecto — murmuré y gire en otra calle que si daba para el Roller pero todo era para que ellos se confundieran.

— ¡NO! — gritaron al mismo tiempo.

— Bueno la cortan entonces — se da vuelta observandolos — No quiero escuchar una palabra más ¿Entendido? —

Los dos asintieron y se dispusieron a mirar por la ventana, supongo que más calmados.

Seguí manejando hasta llegar al Roller, no era lejos de casa, pero el viaje era insoportable con los niños peleando. Eran igual de egoísta a cuando yo era más chico, tenían ese mismo defecto mío que muchas veces trataba de matar pero por suerte también eran nenes amorosos y generosos en parte parecidos a Luna.

Llegamos, bajamos del auto y con cuidado abrimos la puerta, me sentía entusiasmado, volver a encontrarse con viejos amigos y todo eso siempre me daba energías y felicidad.

— ¡Wow! — exclamaron los niños mientras miraban asombrados cada rincón del lugar.

Nos quedamos un rato mirando tdoo nuevamente y luego ayudamos a Luna a acomodar un poco y a colocar la mesa. Tomás estaba barriendo el suelo y Sol acomodaba todo lo que estaba tirado, por suerte nos hicieron caso cuando les pedimos ayuda. Juliana dejó todo en condiciones antes cuando le pedimos que nos prestará el lugar.

Habíamos incluso traído nuestros patines, de verdad queríamos revivir buenos momentos, espero que los demás hayan traído también los de ellos.

Narra Nina:

—¿Ya llegamos? — pregunto por quinta vez Sofía.

— No — contesto Gastón armandose de paciencia.

— ¿Estamos cerca? — consultó esta vez Carolina.

— Si — suspiró Gastón

— ¿Llegaremos pronto? — Sofía otra vez.

— Si — sabía que Gastón no soportaría ni una pregunta más.

— ¿Falta mucho? — ahora cuestionó Carolina nuevamente.

— ¡NOOOO! ¡NO! YA VAMOS A LLEGAR — Dijo gritando fuerte mientras se enojaba.

— Chicas basta de hacer esas preguntas que harán que su papá se enoje — suspiré mirandolas.

Sin Principio Ni Final (Soy Luna)--Editando--Donde viven las historias. Descúbrelo ahora