The Best Friends ||Adrianette||

¿Layla B. Chao o Rossé Mary Bartolini?

Rossé Mary Bartolini, Lila B. Chao o simplemente Rossé Lazzo. Como sea que la llamaran era la misma, sin embargo, a pesar de haber pasado los años. Algunas cosas no habían cambiado para nada. Era la niña que fingía ser frígida y sin embargo era totalmente sensitiva a las situaciones externas.

La señorita Layla estaba en una tumba, hecha especialmente para el Señor Agreste de Dupain-Cheng. Comenzó a rezar mientras recordaba su lejano pasado, han pasado masomenos 11 años desde que lo vio por última vez. Nunca imaginó que lo vería de esta manera. La última plegaria fue dicha por ella y luego se recostó sobre la tumba abrazando la fría lápida del rubio.

-Si mi padre me hubiera dejado, hubiera venido a verte antes de que estuvieras aquí, Tío Adrien. No sabes la falta que me hiciste, que me haces y que me harás por el resto de mi vida. Siento ser la portadora de malas noticias actualmente pero, si pudiera, lo haría sin dudarlo dos veces. Hemos coincido en muchas cosas mientras estuve contigo a mis apenas cuatro años, espero coincidir contigo ahora... cuidaré de los pequeños por ti y desde lejos. Haré que todo para ellos sea lo mejor posible... -frunció el ceño, y se irguió mirando al cielo- Sin embargo no desistiré en mi intento de confrontar a esa mujer, porque tu tenias una visión muy buena de ella, pero para ser sincera, Fiorella Bartolini era una maldita mujer que no le importaba nada...

Unas pisadas la alertaron, se escondió detrás de otra tumba para observar a los visitantes. Dos niños, una niña y una joven mujer a la cual corría para alcanzar a sus hijos. Era ella, una Marinette madura y feliz. Esa sonrisa representaba una fortaleza inquebrantable, la había tenido desde que murió su amado Adrien a su apenas veintipico años. Le acarició la cabeza a los mellizos, Emma y Hugo. Con cuidado de no ser tosca, también despeinó al pequeño Louis, el mayor de los hermanos, que se estaba concentrando en rezar una plegaria por su difunto padre.

-Cuidanos desde el cielo. Te amamos y te amaremos siempre, Papá.... - Louis había terminado la oración, posteriormente los mellizos dejaron sus coronas de flores en la tumba de su padre mientras Rossé hacía acto de presencia.

-¿Cómo han cambiado las cosas a este punto?...-dijo Rossé tomando unas cuentas de un rosario entre sus manos- Veo que tú también has cambiado...

-¿Disculpe, quién es Usted? ...-¿Quién era? Cierto, nadie la reconocía. había pasado prácticamente 10 años desde la ultima vez que la vieron, ahora ella tenía unos 16 años, supuso entonces que no podría decirle con exactitud su nombre. Eso era una ventaja.

- Mi nombres Layla Chao...-expresó ella mientras miraba la tumba de Adrien- Adrien fue mi más grande benefactor en sus últimos años de vida. Iba a verme donde yo vivía y quise regresar a agradecer. Pero me llevé una gran sorpresa con lo que encontré. Supongo que fue terrible para usted llegar a este punto...

-Puede que sea terrible, pero, mis hijos me ayudan a sobrellevar esto. Porque son mis amados hijos. El fruto del amor entre Adrien y yo...-dijo Marinette sonriendole a la muchacha mientras esta comenzaba a mirar a los niños.

-Louis, Hugo y Emma...-dijo en susurro mientras daba una ligera sonrisa- Podría ayudarlos en lo que necesite. Actualmente soy hija de una familia adinerada, quisiera ayudarles con todo lo que pueda, incluso en lo que parece imposible ...-otros pasos más se hicieron presentes en ese lugar, era Bridgette tomada del brazo de Félix. Cuando logró visualizarlos dió dos pasos hacia atrás- En fin, me retiraré. Esta es mi tarjeta y mi número...-dijo ella estirando su brazo dándole una tarjetilla.

-Muchas gracias, cuando la necesite no dudaré en contactarla...-dijo leyendo la tarjeta- Rossé Mary...

Marinette alzó la mirada, Rossé Mary era el nombre de la hija de Fiorella una de las amigas de la familia Agreste y que no había tenido noticias de ella. Aunque, le habían dado por muerta. No, ella no podía ser la hija de esa mujer. Ahora que caía en cuenta ¿Donde se encontraba ella? . Quien sabe.