Siempre Te Encontraré (CLEXA AU)

Capítulo 37: Cambios

Nota: Tuve problemas con Wattpad al publicar el capítulo anterior y como hay gente que suele votar/comentar que no lo ha hecho os informo por si acaso y lo leáis para saber que tal pasaron el fin de semana nuestras chicas.

Lexa había vuelto a la universidad. Le estaba yendo muy bien, e incluso Indra la animó para que terminara los dos cursos y medio que le quedaban en solo dos, ya que donde ella trabajaba en dos años se jubilarían algunas de las trabajadoras e Indra pensaba que Lexa era ideal para el puesto ya que, no solo era una excelente estudiante, si no que había vivido en sus carnes el sistema y estaba segura de que conseguiría grandes cambios a favor de los niños.

Lexa por supuesto lo habló con Clarke, ya que eso significaba más estudio y no podría ayudarla tanto, pero Clarke le dijo que no se preocupara que estudiara y que cuando consiguiera ese trabajo ya la compensaría.

Por su parte Clarke cada vez hacía menos reportajes ya que sus otros trabajos le ocupaban mucho tiempo. Continuaba trabajando dos días a la semana en la escuela para niños autistas y desde el estudio cinematográfico con el que rodó la película en verano se habían puesto en contacto con ella para realizar varios cortos y algunos anuncios, así que no se podía quejar. Además una nueva marca de ropa la había contratado para la campaña publicitaria de la primera colección de la marca y había estado muy ocupada con las sesiones fotográficas.

Lo único que tenía preocupada a Clarke era que después de las Navidades tenía que realizar dos pequeños viajes para buscar localizaciones para un par de películas y no quería dejar a Lexa sola, no con su padre suelto por ahí.

Bueno también estaba el hecho de que como Lexa casi no podía ayudarla, y eso que siempre que podía ahí estaba ayudando en lo que fuera, Clarke había decidido buscar a alguien más aunque no fuera a tiempo completo. Y después de buscar y que nadie le convenciera al final su amiga Thalía le dio la solución. Una de las chicas del centro iba a cumplir los 18 años en breve, e igual que le pasó a Lexa se vería fuera del sistema, así que Clarke decidió contratarla a tiempo parcial hasta que cumpliera los dieciocho y después ya verían. Charlotte estuvo encantada con la oferta de trabajo y le aseguró a Clarke que la ayudaría en lo que pudiera. Ambas ya se conocían de la casa así que todo fue muy bien. Charlotte era trabajadora y además estaba dispuesta a aprender así que se lo ponía muy fácil a Clarke. Trabajaría unas horas por las tardes, ya que por las mañana tenía que ir al instituto, y algún fin de semana si era necesario.

Las rutinas de las dos chicas poco habían cambiado pero lo que sí que había cambiado era que no iban solas a ningún sitio. Anya y Luna casi siempre pasaban a buscar a Lexa para ir a la universidad y después la acompañaban a casa. Si alguna no podía siempre podían contar con Octavia o Raven, e incluso Lincoln y Wells se habían ofrecido a acompañarlas a cualquier lado si era necesario. E igual que a Lexa, a Clarke también la acompañaban si tenía que ir a cualquier lado, incluso muchos días se turnaban para pasar la mañana con la rubia en el estudio y que no estuviera sola.

Y es que no solo Lexa y Clarke estaban preocupadas por el padre de la castaña, los amigos de ambas también lo estaban y no tenían intención de que lo que sucedió en verano volviera a pasar. Lo que nadie entendía es cómo la policía todavía no había dado con él, es que ni siquiera tenían una pista.

Lo peor eran las noches de pesadillas, que en Lexa cada vez eran más frecuentes a medida que las fiestas navideñas se acercaban. Y es que Lexa estaba convencida que igual que apreció en su cumpleaños para joderlas, también lo haría ahora para Navidad. Clarke estaba preocupada por Lexa, tanto que incluso ella había tenido pesadillas algunas noches, y en todas Lexa moría. Y lo peor de todo para Clarke era ver la cara de asustada de Lexa después de esas pesadillas, y es que pese a que la castaña no lo dijera Clarke tenía muy claro lo que pensaba, y sabía que se echaba las culpas porque su padre aterrorizara también a su chica y no solo a ella. En realidad las pesadillas de Clarke habían empezado hace relativamente poco y habían sido bastante aisladas, pero es que Lexa estaba tan convencida de que su padre iba a aparecer en cualquier momento que Clarke pensaba que había terminado sugestionada por Lexa y su subconsciente se lo hacía pagar.