Capítulo 12-Maratón 1/3

39.1K 2.6K 218
                                    

Quiero partir esta maratón agradeciéndoles por estar aquí, votar, comentar o simplemente leer desde la oscuridad. No se preocupen, yo también he sido una lectora fantasma ;)   

¡Gracias por los 1.2 K de leídos! Para algunos podría verse como un número pequeño en comparación con otras historias, pero para mi lo es todo y mucho mas <3 

Las amo, de verdad. 

Y ya me dejo de sentimentalismos. Pueden Leer *3*

La mayor parte del camino nos la pasamos en un incómodo silencio. El silencio era tan incómodo que me había sentido tentada a prender la radio, pero rechacé esa idea cuando recordé que no estaba en mi auto y que muy probablemente terminaría cantando cual fuera la canción que estuvieran pasando.

Era ese tipo de persona, que no importa la canción, no importa el momento, no podía evitar cantar cuando escuchaba música. Y Si no sabía la letra, me la inventaba.

Un par de veces me había encontrado mirándole, admirándole. Sus ojos nunca dejaban el camino y había notado que cuando se concentraba demasiado en algo o estaba molesto hacia una extraña, aunque adorable, mueca con la boca, además de fruncir constantemente el ceño.

Sus grandes y fuertes manos agarraban con firmeza el volante. Manos que hace solo unos días había acariciado cada parte de mi cuerpo. Ojos que habían dejado un rastro de fuego a su paso. Labios que habían besado y mordido cada centímetro de mi piel. Cuando le miraba, no podía dejar de pensar en esa noche.

No sabía si a él le ocurría lo mismo, pero si así era, sabia ocultarlo de las mil maravillas. A diferencia de mí, que parecía que fuera a saltarle encima en cualquier momento.

Cuando por fin llegamos a mi edificio estaba tentada a correr fuera del auto y alejarme lo más rápido posible de él y su embriagador aroma. Pero eso sería descortés, desagradecido, y nunca había sido ninguna de esas cosas.

—Gracias por traerme, señor Goodwins —agradecí con una tímida sonrisa.

—No es nada —le restó importancia— Espero que te recuperes pronto. Hasta mañana, Cindy.

Si, recuperarme pronto. Te aseguro que en nueve meses más vuelvo a estar tan campante como siempre, pero con un bebé. ¡Ja!

—Hasta mañana —susurré para posteriormente bajar de lujoso auto y emprender camino a la entrada de mi edificio.

Sentía su mirada quemar en mi espalda, pero no iba a girar, no. No quería mirar. Bueno, quizá si quería, pero no debía.

Gracias a dios oí su auto arrancar una vez estuve dentro del edificio. Ahora lo único que esperaba era Jack no me hubiera visto con llegar con él. No estaba preparada para un interrogatorio y mucho menos para intentar mentirle.

Como ya es cotidiano en mi vida, no había siquiera una gota de suerte en mí.

El ascensor estaba dañado por lo que tuve que subir las escaleras. Y no es que me molestara subir escaleras, solía hacerlo de vez en cuando, pero no me sentía físicamente bien como para hacerlo. Aun después de haber vomitado seguía con el estómago revuelto y había comenzado a dolerme la cabeza.

Subí los cinco malditos pisos y cuando por fin estuve en mi planta mi respiración estaba agitada, me dolían las piernas y mi corazón iba tan rápido como una locomotora.

Saqué las llaves de mi bolso dispuesta a abrir la puerta, pero no alcance ni a meterla en la cerradura cuando la puerta fue abierta.

—¿Quién era el tipo que vino a dejarte? —Preguntó aceleradamente Jack.

My Complement. MADLY IN LOVE #1Where stories live. Discover now