Enamorada pero tú no lo sabes •{P.JM}• (ACTUALIZANDO)

52. El secuestrador

Me desperté al escuchar como mi alarma empezaba a sonar. Me senté sobre el borde de la cama y coloqué mis brazos sobre mi rodilla. Suspiré.

Ya pasaron dos semana en donde no se sabe nada de ella. Maldita sea, ¿tan difícil es para los policías hallar a una persona? Seúl ni siquiera es grande, a no ser que la hayan llevado fuera del país pero será mejor descartar esa idea antes de ponernos más depresivos de lo que estamos. Me levanto y camino hacia mi baño para poder ducharme. Al salir elegí un buzo holgado y una remera con tirantes. No es tampoco que iría en alguna parte. Solo a su casa.

Bajé las escaleras y encontré a mi Madre sentada en el sofá de la cocina con una taza de café en la mano mientras que la sirvienta hacía el desayuno. Me pregunto cuándo será el día en que mi Madre haga una vez más el desayuno. Ella casi no lo hace, solo de vez en cuando.

MDJM: ¿Que haces vestido así? ¡Ve a prepararte! Tienes que ir a la escuela

No hice caso a su comentario, pues solo me acerqué a la isla de la cocina y agarré unas de las tostada con mermelada.

MDJM: ¿Piensas estar ignorándome todo estos tiempos? -me volteé y caminé hacia la puerta para poder salir- ¡Jimin! -me detuve en seco y volteé para observarla con una expresión fría- Mírate -se acerca a mí-. Estás pálido, tienes ojeras, casi no comes, estás más delgado, ¿por qué estás viviendo de esa forma?

Jimin: ¿En serio lo preguntas? -suelto una risa sarcástica-. Esto es por tu culpa

MDJM: ¿Que? -frunce su ceño en confusión para luego volver a incorporarse- ¿Por qué estás diciendo eso Jimin?

Jimin: Si tu no me obligabas a estar con Yoonsi, ahora mismo iba a poder estar con TN y esto no le iba a suceder. ¡Ella no iba a ser secuestrada porque yo iba a poder impedirlo! ¡Todo esto es tu culpa! -mi cara volteó hacia el lado derecho al sentir como la mano de mi Madre chocaba por mi rostro-

Escuche como mi Padre se acercaba a nosotros. Ni siquiera me di cuenta cuando bajó de las escaleras.

PDJM: ¿Jimin te encuentras bien? -volteó hacia mi Madre- ¿¡Por que hiciste eso!? -ella no respondió- ¿¡Crees que golpeándolo solucionarás todo!? ¡Míralo! ¡Él se encuentra bastante mal y tu no haces nada más que estar criticándolo y empeorándolo! -mis ojos empezaban a humedecerse, no por el dolor que sentía en mi rostro. Si no que por la discusión de mis Padres y porque las palabras de mi padre hacía que recordara aún más a TN- ¿¡Podrías ponerte en sus zapatos por una vez de todas!? ¡Eres imposible mujer!

La cocina estaba en silencio. Jamás había visto a papá reaccionar de esa manera. Jamás lo había visto gritarle a mamá de esa manera. Jamás vi a mamá temblando frente a papá. Y me di cuenta que ella estaba teniéndole miedo, incluso a mí me asustó esa reacción

Jimin: Pa-papá. Está bien, yo...

Me interrumpe

PDJM: ¡No! ¡No está bien! -suspira-. Ven aquí -me abraza. Esta vez si las lágrimas caían de mi rostro y sentí como mi Padre sobaba mi espalda- Te prometo, que haré hasta lo imposible para encontrarla y traértela de regreso. Haré hasta lo imposible para volver a ver la sonrisa de mi hijo. Hasta lo imposible

Mis sollozos estaban siendo audible y a pesar de que ocultaba mi rostro en el pecho de mi padre, sabía que se podía ver que me encontraba destrozado.

PDJM: Necesito que te mantengas con fuerza Jimin, gastaré todo mi dinero si es posible para contratar a los mejores policías del mundo para traerla de regreso. Te lo prometo. Ve a dormir un poco más por favor -susurra en mi oído-

Niego con la cabeza y me separo lentamente de él

Jimin: No, iré a caminar. Necesito aire -respondo sobando mi nariz mientras me secaba las lagrimas-