Decisiones ¿Erróneas?

Compañero de bebida

**Narrado desde la perspectiva de Bonnie**

Normalmente no me involucraba en los asuntos ajenos, estaba demasiado ocupada siendo una bruja como para también tenerme que preocupar por los vampiros, hasta que justo a quien no quería ver jamás apareció en mi puerta. Después de la muerte de la abuela, me había sentido sola, sin esperanzas, hasta ese día...

-Flashback-

Escuché un sonido en el pórtico de la casa, cuando salí a averiguar, lo vi sentado en las escaleras, con la mirada agachada y una botella de Bourbon justo a su lado. Estuve tentada a hacerle explotar la cabeza, pero algo dentro de mi, frenó aquel impulso.

-¿Que haces aquí?-dije entonces, mi voz era fría, era obvio que destilaba desdén

-Vine a darte las condolencias-su voz sonó como un susurro, de hecho, si no hubiera sabido que era un vampiro, juraría que estaba ebrio, porque, los vampiros no podían emborracharse... ¿o sí?

-Lárgate-respondí "sutilmente"

-Oye, yo se que no quieres saber nada de mí, por que yo fui el culpable de lo que le paso a tu abue...-hizo una pausa que solo me hizo fruncir el ceño-se lo que se siente perder a alguien a quien amas-por alguna extraña razón, me senté a su lado-se que no quieres ver a ninguno de tus amigos-dio un trago a la botella-pero si fueran tus amigos insistirían en no dejarte sola en estos momentos

-¿Que es lo que quieres?-pregunté, esta vez no sabía que pensar, una parte de mí estaba conmovida, quería romperse, justo allí, mientras la otra no paraba de repetir que todo este sentimiento era por su causa

-Necesito a alguien que me acompañe a beber-dijo tendiéndome la botella, sin saber porque, acepté

-Fin flashback-

Eso había sido solo el inicio, a pesar de ser como era, solía tener de vez en cuando una palabra agradable que me levantaba el ánimo, incluso cuando ambos acordamos que frente al resto debía parecer que nos odiábamos, Alaric, Damon y yo, nos habíamos vuelto inseparables.

\\ Inicio del día //

La noche se me había hecho eterna, con la recién muerte de Jenna, no sabía como acercarme a los Gilbert, era como si las heridas de la muerte de abue volvieran a abrirse. A cierta hora, la cual no recordaba, marqué un número que ya era familiar para mí

-¿Que pasa Bon Bon?-saludó al otro lado de la línea

-¿Estas ocupado?-pregunté, mi voz se quebró unos segundos, pero eso fue suficiente

-No digas más, voy a tu casa...

-No, espera-pero ya era demasiado tarde, ya había cortado

Me vestí con un pantalón holgado y una sudadera, bajé de nuevo, para irme a la sala y esperarlo, pero en verdad me sorprendí cuando lo vi, cómodamente sentado en uno de mis sillones

-Tardaste mucho-dio un trago a su vaso, comenzaba a pensar que eso era parte de su mano

-¿Como llegaste tan rápido?-pregunté quitándole el alcohol para darle un trago

-Estaba por el barrio-sonrió de aquella manera en la que sabía que ocultaba algo

-Explícate-exigí, rellenando el vaso y sentándome a su lado

-Mejor dime, ¿que tienes?-preguntó con ese genuino interés que conocía tan bien

-Lo de Jenna fue un golpe duro-solté un suspiro-ni siquiera se como acercarme a Elena, debe estar destrozada...

-Si eso es lo que en verdad te preocupa, créeme, Elena esta más que bien-hizo una pausa, entonces entendí que era eso lo que se traía entre manos