No te ocultes...

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**Narrado desde la perspectiva de Elena**

Después del extraño juego de los chicos, tratando de parecer interesantes, nos acostamos todos en una de las orillas, había sido divertido pero para ser honesta mi cuerpo deseaba otro tipo de juego. Le sonreí varias veces a Stefan, esperando que entendiera, pero no, siempre me sonreía de vuelta y continuaba platicando alegremente con Matt.

Me sentía frustrada y pregunté al universo un par de veces el porqué había tenido que quedarse el Salvatore más inocente... a lo que usualmente mi cabeza respondía que me hubiera perdido de toda la diversión colectiva, aunque sonaba excitante el otro tipo de entretenimiento...

-Muy bien, ¿quién es el primero en ser derrotado?-la voz de Damon me hizo girar a verlo, se veía especialmente atractivo, con el pecho descubierto y para variar, un vaso de Bourbon en la mano

-Te tardaste demasiado-gritó Tyler-estamos agotados

-Por favor, ¿dónde está el espíritu deportivo de los lobos?-se burló el vampiro moreno con mordacidad

El licántropo iba a responder pero su mirada se enfocó en alguien detrás de aquel vampiro, de hecho, todos miramos, supuse que vendría la humana que Klaus había "pedido" que se quedará con los Salvatore. Nadie pudo disimular lo mucho que nos sorprendía, ni siquiera Bonnie y Alaric que venían junto a ella con botellas de alcohol y vasos suficientes para todos. El único capaz de disfrazar su sorpresa al parecer era el mismo Damon que frunció el ceño al vernos totalmente mudos. Se dio la vuelta para saber que veíamos, soltó un suspiro

-¿No tienes algo más discreto?-la chica se miró hacia abajo. Era una especie de musa salido de algún cuadro de artistas renacentistas que mostraba la belleza angelical. Era alta aunque viéndola así como iba, quizá 5 centímetros más bajita que Damon. Tenía el cabello recogido en una coleta, donde caía, como una cascada de fuego, era rizado. Su piel terriblemente blanca, hacía destacar el bañador color esmeralda brillante que traía. Era de los que se atoran en el cuello con gruesos trozos de tela, pasaba por la mitad de su pechos, se cruzaba hasta el final de las costillas en la misma línea de tela, formaba un rombo sobre su malditamente perfecto abdomen.

-¿Que tiene de malo?-preguntó con brusquedad

-No quieres que te miren como un trozo de carne y te pones a cocinar frente a los hambrientos-la joven frunció el ceño, Damon se acercó a ella y le susurró algo, que provocó una mueca de miedo en el rostro de la chica-tranquila, vamos a divertirnos

-Imbécil-leí en los labios de la chica

-Te escuché princesa-la pelirroja apretó los puños con furia

-Disculpalo, no sabe tratar con personas-no supimos en que momento Matt se había acercado a ella

-Usualmente está encerrado en el sótano-se burló Stefan complementando la broma

-Muy graciosos-se quejó el vampiro moreno, recorriéndome con la vista y sonriendo con malicia

-Juguemos entonces-gritó Tyler

-Dejemos los equipos como están-pidió Bonnie quien a pesar de verse incómoda alrededor de la pelirroja, no le era tan desagradable, supuse que por como le había respondido al vampiro

-¿Cuales son los equipos?-preguntó con una voz armoniosa, no la conocía, pero ya la odiaba. Jeremy le dijo los nombres de los integrantes de los equipos, levantó la ceja

-Excelente, me quedó super claro-aquel tono me hizo recordar a alguien que no me quitaba la vista de encima

-A ver princesa, te explico porqué mini Gilbert es una pésima ayuda-Damon se acercó a ella, después de rodar los ojos cansado-El rubio bobo de allí, es Matt Donovan, si quieres a alguien para salir y después cambiarlo, él es perfecto-la joven soltó una risa

Decisiones ¿Erróneas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora