Decisiones ¿Erróneas?

Mienteme o me miento

**Narrador**

-Tengo ganas de asesinarla...

-Tranquilo-Bonnie puso las manos hacia el frente tratando de tranquilizarlo

-Elena no es Katherine-susurró más para sí mismo que para su compañera-Elena no está jugando con nosotros...

-Ya te estamos perdiendo-dijo Alaric, que en cuanto estuvo cerca, escuchó las palabras de su amigo-Solo no vayas a cambiar los planes

Los tres sonrieron con complicidad, estaban felices de tenerse cerca, tenían personalidad diferente, a veces sabían que chocaban, pero cuando encajaban, todo parecía completo, el mundo parecía de nuevo un lugar interesante para vivir una eternidad.

-Caminen, ahora los alcanzo-pidió Damon

**Narrado desde la perspectiva de Elena**

Estaba molesta, estuvimos buscando a Damon y a esa arpía durante un tiempo que me pareció exagerado, mi respiración se relajó hasta que la vi acercándose a nosotros, sonrió de lado de nuevo, ese gesto era idéntico al de... caminé por donde ella había aparecido, Alaric y Bonnie se reían, venían en mi dirección, me escondí un poco y seguí caminando por donde habían pasado, me detuve cuando lo vi, estaba serio

-Cambia esa cara-se sorprendió no solo al oírme, sino también cuando sintió que me colgaba de su cuello para poder besarle

-Elena-susurró pegado a mis labios-deberíamos decirle a Stefan-escuchar eso me hizo alejarme, para verlo

-¿Estas bromeando?-él negó con la cabeza-¿Porque quieres decirle?

-Es mi hermano, no puedo ser tan egoísta como para no decirle lo que está pasando...

-Damon, ninguno de los dos sabemos que pasa-me lamí los labios-estoy confundida

-¿Y no puedes decidir con quien quieres quedarte?-el tono irónico que utilizó, me molestó

-Te quiero Damon-puse una de mis manos en su nuca

No tuve que decir nada más, me hizo estrellarme contra un árbol, antes de devorar mis labios, con hambre, sus manos me apretaban la cadera, pegándome más y más a su cuerpo, como si quisiera fundirnos, volviéndonos uno solo.

-Damon-la voz de Stefan me hizo dar un brinco, pero el vampiro frente a mí, no se detuvo ni un centímetro

-Viene tu hermano-traté de empujarlo pero era mucho más fuerte que yo

-¿Y que?-sentí sus colmillos rozando mi hombro

-Quítate-se alejó lo suficiente para verlo, su rostro había dolor, enojo

No supe en que momento se desapareció, solo que cuando lo noté, ya no estaba allí, solo era yo, un poco culpable, un poco resentida, aunque un poco de todo. Stefan me vio allí de pie, quieta, se asustó al ver una fina línea de sangre escurriendo por mi hombro, insistí que estaba bien y aunque estaba segura de que no me había creído, lo dejé pasar.

Al volver a la cabaña, Bonnie, Alaric y la arpía esperaban cerca del auto azul, vieron al vampiro moreno subirse al auto con una botella de Bourbon en la mano. No supe en que momento, los tres humanos se subieron al auto con él. Discutían, el vampiro pensaba en dejarlos a uno por uno por la carretera, pero después de que la pelirroja le susurró algo en el oído, arrancaron y se fueron, dejándonos a todos atónitos. No por lo ocurrido, sino porque Bonnie había hecho exactamente lo mismo que Alaric, se supone que odiaba a Damon, ¿no? Entonces las palabras de la pelirroja resonaron en mi cabeza

"Todos los tienen, pero hay que saber ocultarlos, donde los dudes incluso tu mismo..."