17

4.6K 480 115
                                    

Louis llegó ese día a su casa azotando la puerta, subió a su habitación sin siquiera ver la ración de comida que su madre siempre deja para él, o algún postre. Simplemente se quita la mochila y se tira en la cama. No quiere permitirse a si mismo sentirse tan jodidamente mal por algo que alguien le haya hecho o dicho, pero no puede evitarlo cuando se trata de Harry. ¿Por qué permite que tenga tanto poder sobre él? ¿Por qué no puede controlarlo?

Limpia sus lagrimas, y se desviste por completo para después meterse a bañar. No dura más de diez minutos en el acto, y luego sale para vestirse. Caminar ocho cuadras hasta su casa lo dejo algo sudado, aunque todo hubiera sido mejor que respirar el mismo aire que Harry, o eso quiere creer. Se recuesta en la cama de nuevo y toma su celular para colocar una canción, una en especifico. Y después de un rato, finalmente puede quedarse dormido.

Se despierta algo aturdido cuando escucha unos fuertes golpes en la puerta de su habitación, está apunto de levantarse a ver de quien se trata cuando su madre entra. Louis se siente algo decepcionado, tenía una pequeña esperanza de que fuera Harry quien había venido a arreglar las cosas. Pero la idea rápidamente se evapora.

 —Cariño... no sabía que estabas dormido —la mujer sonríe, y se sienta en la cama. Louis se incorpora.

—No importa, sólo quería descansar un rato —quita los audífonos de sus oídos, y deja el teléfono a un lado. Ya hace un rato se había acabado la lista de reproducción.

—¿Cómo te fue hoy en la universidad? —pregunta, y lleva su mano hasta el cabello de Louis para acariciarlo con ternura. Él menor sonríe desganado.

—Supongo que bien —murmura cabizbajo, y se encoge de hombros. Su madre alza una ceja.

—¿Seguro?

—Mamá, ¿puedo decirte algo? —Louis mira a su madre a los ojos. Debutándose si decirle o no sobre su noviazgo con Harry.     

—Por supuesto cariño, aquí está mamá.

—Harry... él me pidió que fuera su novio, y yo acepté —dice finalmente, sintiéndose abrumado por hablar sobre eso con su madre. Ella por el contrario lo mira emocionada.

—¿Es en serio? Me agrada Harry. Me alegro que haya sido con él con quien decidieras por fin sentar cabeza 

—¿Sentar cabeza? —Louis frunce el ceño abochornado, y niega múltiples veces.—En fin. Está mañana tuvimos una pelea. Yo me puse muy celoso. Es que mamá, estaba con una chica hermosa y ellos se veían tan felices. Y después me reclama porque yo la trate como se merecía. Es que, ¿qué le pasa? Harry es mi novio, no se tiene que acercarse a él. Te juro que lo vi, vi en sus ojos esa chispa de maldad. Y él, él la defendió, ¿puedes siquiera creerlo? ¡La defendió cuando su novio soy yo, maldita sea! —gritó alterado. Johannah alzó ambas cejas asombrada ante la actitud de su hijo. Nunca lo había visto actuar tan posesivo con nadie jamas. Louis celoso era algo que ella desconocía por completo.

—Amor... amor, escucha. No puedes prohibirle a Harry que tenga amigos. Si él es tú novio, entonces te querrá y sera fiel si necesidad de que tú se lo exijas. Si, Harry es guapo, pero eso no quiere decir que cualquier persona que se acerque a él tenga intenciones de enamorarlo o algo así —dice Johannah, y Louis reflexiona. 

—Pero... él, ella... tienes razón mamá. Siempre la tienes. —Johannah sonrió y besó la frente de su hijo.

—Si Harry te hirió de alguna manera, entonces estoy segura de que vendrá a disculparse. Pero no estés mal. Es más, baja conmigo y te doy pastel de crema que hice hoy.

Louis sonrió con nostalgia. Su mamá es la mejor. La ama porque es la luchadora más grande de su vida, la mujer más fuerte que ha conocido, y que aunque él sepa que ella está muriendo por dentro, por fuera intenta llenarlo de vida a él.        

Sweet lie➳ Larry AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora