Una Hermosa Historia

Captura la Bandera

El comedor era gigante.

Miki siguió a Percy por las mesas hasta llegar a una un poco apartada, esperaba que los demás se sentaran con ellos pero vio cómo Annabeth se separaba de Piper y ambas se sentaban en diferentes mesas, luego vio a Leo sentarse con otros campistas y finalmente observó cómo Jason y Nico se sentaban en las dos mesas que estaban a los lados de Percy y Miki, Jason tras Percy y Nico detrás de Miki.

Ella volteó a ver a su hermano y antes de poder pronunciar una palabra Percy habló.

- Nos separamos por cabañas, - explicó él - antes, como era el único hijo de Poseidón en el campamento me sentaba aquí solo. Es por eso que todos te están viendo.

Miki volteó, Percy estaba en lo cierto, ella era el centro de atención en el comedor, era como si tuviera escrito "Hamburguesas Gratis" en su frente con luces. Todos la miraban y susurraban entre ellos. Ahora sí estaba incómoda, bajó la vista a su plato vacío y se dio cuenta del hambre que tenía.

- Me muero de hambre - le dijo a Percy - ¿Cuándo van a servir la comida?

- No la sirven - dijo Percy sonriendo - sólo imagina lo que quieres comer y aparecerá en el plato.

- ¿Cualquier cosa?

- Lo que quieras, sólo mira...

Percy cerró los ojos. De repente en su plato apareció un trozo de pizza... ¿pizza azul?

- ¿Ves? - dijo él señalando la pizza - lo que tú quieras.

- Osea... - Miki sonrió - que si pido una Cangreburguer... ¿Aparece?

Cuando dijo éso escuchó a alguien bufar, Miki volteó y vio a Nico encojido sobre su plato tratando de contener la risa. Ella sonrió, 2-0 Miki.

- Aunque no debe saber muy bien - le dijo a Percy - mejor pido una hamburguesa normal.

Miki cerró sus ojos, quiero la mejor hamburguesa de Nueva York, cuando los obrió otra vez en su plato había una gran hamburguesa con un aroma exquisito; pero  antes de que ella pudiera darle un bocado Percy la detuvo.

- Hay que ofrecer un trozo a nuestro padre antes de comer... Mejor pica un pedazo para él.

Miki asintió y picó la mitad de su hamburguesa, luego siguió a Percy hasta la gran fogata e imitó a su hermano, susurró Poseidón y tiró la hamburguesa al fuego.

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Luego de comer, Quirón anunció la llegada de la nueva campista y dio inicio al juego de la noche: captura la bandera.

Miki estaba en el mismo equipo de su hermano, junto con las cabañas de Atenea, Zeus, Hefesto, Afrodita, Deméter, Iris y Némesis. El otro equipo era quienes tenían la bandera, porque, el juego anterior, a pesar de haber tomado la bandera, Leo dejó caer fuego griego y su equipo perdió automáticamente. Miki, como no tenía experiencia ni entrenamiento alguno, se quedó con Leo protegiendo su territorio, y ambos estaban sentados en el suelo esperando que saliera alguien del bosque.

- Gran diversión, ¿eh? - dijo Leo suspirando.

- ¿Quién te manda a lanzar fuego griego al otro equipo? - preguntó Miki riendo.

- ¡Fue un accidente!

Ambos rieron 

Canta

- ¿Cómo dices? - preguntó Miki a Leo, quien puso cara de desconcierto.

- Yo no dije nada.

- ¿Estas seguro? - Miki juraba haber escuchado algo.

Canta

- ¡Ahí está! ¿No lo escuchaste?

Leo la miraba con el ceño fruncido, obviamente no había escuchado nada. Fantástico... ahora voy a pasar por loca. Pensó Miki

Canta...

- Viene... del lago - Miki se paró y se puso a caminar hacia la orilla del lago.

- Miki... ¿Estás bien? - Leo también se había puesto de pie y veía cómo Miki hacía su camino hasta el agua sin dar indicio de escucharlo.

Canta

Miki se paró en la orilla del lago viendo la agitada superficie del agua...

Canta

En ese momento, los campistas comenzaron a llegar de entre los árboles, Annabeth llevaba la bandera para clavarla en su sitio dándole la victoria a su equipo, y, sobre todo, a la cabaña de Atenea.

¡CANTA!

Miki lo hizo, comenzó a cantar una hermosa melodía que en su vida había escuchado, las palabras que salían de su boca eran completamente desconocidas para ella. Y de pronto ocurrió lo más extraño, los campistas dejaron de correr poco a poco y quedaron hipnotizados por la canción que entonaba la chica. Miki vio la bandera en las manos de Annabeth y se preguntó cómo se vería con un tridente en lugar de un jabalí o un búho en ella...

Entonces, ¿qué esperas? ¡Pídela!

- La bandera - susurró Miki.

Inmediatamente Annabeth fue hasta ella y le entregó la bandera. Miki caminó hasta la pequeña colina a la que Annabeth se dirigía a colocar la bandera antes de quedar hipnotizada, mientras los demás campistas despertaban de su ensueño y clavó la bandera, que pasó de roja a azul y el jabalí que simbolizaba a Ares fue reemplazado por el tridente de Poseidón.