100 días para estar con él [EN EDICIÓN]

Día 5 [Viernes]

Kyungsoo estaba seguro que sus compañeros ya creían que tenía un complejo de suricato o algo así. Se había pasado casi la semana completa con el cuello estirado y la vista alerta por si aparecía Jongin con un letrero que diga "puedes hablarme" pegado en la cabeza.
Podía parecer bastante ridículo pero Kyungsoo estaba dispuesto a correr y regalarle su almuerzo si viera al moreno con cara de "tengo hambre".

Pero no. Después del lunes no había vuelto a encontrárselo por los pasillos, y tampoco había aparecido una oportunidad para acercarse. Y Kyungsoo no sabía si sus esfuerzos por hablar con Jongin no eran suficientes o realmente no estaban destinados a estar juntos.

Pasó el día con una expresión enfurruñada, incluso Luhan se atrevió a decir que se veía adorable cuando hacía puchero y Kyungsoo deshizo el gesto de inmediato.

- Aburrido. - murmuró Luhan con una mueca, y luego volvió a su actitud animada con una simple levantada de hombros, sabiendo que no podría (ni quería) cambiar a su amigo.

KyungSoo ya iba por su día cinco desde que había empezado su trayecto a los sexys y morenos brazos de mi futuro esposo - como le gustaba llamarlo - y llevaba un nulo avance que lo había desanimado por completo.

Venga, nadie se propone conquistar a alguien como él. Según las películas románticas que veía cada sábado, las cosas solo fluían entre los protagonistas, una mirada y ¡puf!, al día siguiente ya estaban frente al altar diciendo el "Sí, acepto".

Suspiró con la vista pegada al calendario de su agenda. El día anterior había copiado su horario de 100 días en todos los calendarios que poseía, menos en el de la cocina de su casa porque no quería que su madre se enterara de su plan o que siquiera supiera de la existencia de Kim Jongin. Él esperaba que cuando su familia escuchara ése nombre de sus labios fuera algo así como "Él es Kim Jongin, mi novio" y no "Él es el chico de mis sueños, Kim Jongin, pero no sabe que existo".

Kyungsoo se mordió el labio y cerró los ojos antes de arrancar el calendario con un solo movimiento.

- ¿Qué te hizo el pobre papel? - preguntó Baekhyun tras él. Kyungsoo se sobresalto y se giró para mirarlo con odio.

- No es asunto tuyo. - murmuró con los labios apretados. Arrugó el papel transformándolo en una bolita deforme y se lo metió en el bolsillo. Hubiera querido tirarlo al suelo para tener más emoción y dramatismo, pero no. Él es Do Kyungsoo y no contamina.

- Quizá no. - respondió su amigo caminando hasta el lugar frente a él para sentarse. Llevaba un papel en las manos y lo estaba estirando, para luego sentarse y comenzar a leerlo.

- ¡Maldito seas! ¿Cómo hiciste eso? - exclamó en voz alta Kyungsoo palpando sus bolsillos, ahora vacíos.

Baekhyun se encogió de hombros y mantuvo su atención en el calendario recién robado mientras el chico a su lado empezaba a rezarle a Belcebú por su salvación.

- ¿"Día donde aceptaré ser el novio de KJ", eh? - se burló el rubio mirándolo con una ceja alzada. - ¿Sabes que Minseok te matará si se entera que intentas conquistar a Jongdae?

- ¿¡Porqué demonios crees que quiero conquistar al idiota de Jongdae!? - preguntó Kyungsoo confundido. Tenía las cejas fruncidas cuando se estiró y le arrebató el maltratado calendario a su amigo. Baekhyun lo soltó sin oponerse pues ya había visto todo lo interesante.

- ¿Él es KJ, no? Kim Jongdae. - explicó levantando un dedo por cada sílaba.

- Iugh, no. - Kyungsoo hizo una mueca y agachó la cabeza al momento que sintió un golpe en su nuca.

- No digas iugh cuando hables de mi novio, Soo. - murmuró Minseok con la palma extendida siendo el proveedor del golpe. Rodeó la mesa, se sentó en la silla continua a la que estaba usando Baekhyun y esperó a que este le contara de qué estaban hablando.

- Oh, ¿Kim Junmyeon? - intentó Minseok con energía, entusiasmado con la historia. Kyungsoo volvió a suspirar por centésima vez en el día. Se notaba que sus amigos se divertían intentando adivinar quién era su enamorado.

- Demasiado nerd. - dijo apoyando su cabeza en la palma de su mano. Esto iba para largo.

Minseok y Baekhyun estuvieron divagando nombres por varios minutos. Kyungsoo dudaba que todos los mencionados cursaran en el colegio, al menos él no los conocía, pero no dio signos de estarlos escuchando hasta que Baekhyun soltó un "No creo que sea Kim Jongin..." 
Demonios, pensó cuando sintió su cuerpo tensarse y a sus amigos gritando cosas como "¡No puede ser!", "Por supuesto, ¿cómo no lo vimos antes?", "¡Se lo come con la mirada".

Otros minutos tuvieron que pasar para que se calmaran y Kyungsoo pensó que con eso dejarían el tema, pero la astuta mente del rubio no dejó de trabajar.

- Espera, - dijo Baekhyun - todavía no entiendo porqué estabas arrugando el calendario con ésa actitud tan miserable y porqué ésa fecha está a más de tres meses.

Kyungsoo miró por la ventana algunos segundos y luego, esperando no arrepentirse, se decidió por contarles absolutamente todo a sus amigos, desde su platónico en Kim Jongin desde hace años hasta su nulo avance en su ridículo plan. Ni Minseok ni Baekhyun se burlaron en algún momento, tampoco interrumpieron, y para cuando el monólogo de Kyungsoo terminó, ambos se levantaron al mismo tiempo.

- Vamos a ayudarte. - dijeron con determinación y sonrisas radiantes en sus caras.

Kyungsoo no sabía si eso era bueno o malo, sus amigos solían tener ideas muy raras, por eso no salía mucho con ellos luego del horario de clases; pero sí, sin duda necesitaba ayuda.