Capítulo 46: Regalos Navideños (II)

4.6K 356 52
                                    

—¿Vas bien? —le pregunto a Farren—. El médico te dijo que no cargaras peso.

—Son un par de bolsas con regalos, tampoco es para tanto.

—Nosotros llevamos la peor parte —suelta Hansel detrás mía, llevando el pollo y las gambas.

—¿Perdona? —se queja Ricky al tener que llevar casi todo lo demás, mostrando la fuerza que, al parecer, no es de postureo.

—Venga, sois los dos hombres del grupo. Farren se ha convertido en una princesa temporalmente.

—Cuando me recupere, no vas a salir vivo de la casa —murmura en voz baja, con voz grave que infunde temor en mi cuerpo.

—Eso si sigo viviendo ahí.

—¿Acaso no querías seguir viviendo con ellos? —pregunta Ricky.

—Me lo estoy pensando seriamente.

—Mentiroso —estoy por hacer que Hansel se caiga de espaldas para que le vea Jennifer y le mate—. De todos modos, pronto me voy a mudar. Ya he ganado mi primer sueldo y puedo permitirme un hogar en condiciones.

—Hansel —le llama Farren—, mejor quédate. Así no sufrimos los dos de facturas sorpresa ni nada.

—A mí no me importa, pero tú verás.

—Tranquilo, siquiera molestas.

—¿Deberíamos irnos, Marth? —pregunta Ricky.

—Creo que sí.

—¡No imaginen cosas raras!

De repente, la puerta se abre por la pequeña e inigualable Ashley, la catadora profesional.

—Vaya, vaya —nos mira con detenimiento, más bien la comida—. Pasen, los que traen comida son bienvenidos.

Ahora me da miedo saber si mi hermana pequeña me echaría por no tener comida en mano.

Entramos y somos recibidos por mi madre, quien parece que está recién haciendo la comida que se le asignó.

El olor llega a nuestras fosas nasales y nos abre el apetito. ¿Sopa en navidad? Bueno, cualquier cosa sirve en estas fiestas.

—Hola, cariño —me da un par de besos—. Dejad la comida en la encimera, chicos —hacen caso y lo dejan todo en el lugar indicado—. Me alegra que estés bien, Farren. Es una alegría verte —recibe otros dos besos—. Estáis hermosos todos.

Venimos vestidos formales. Debo de admitir que todos estamos bien guapos, incluso Farren, que se negaba a ir así vestido por miedo a que le ocurriera algo en el brazo por intentar ponerse algo un poco ceñido.

—Gracias, señora Clansky.

—¡Me alegra que lo hayáis traído todo! —aparece Jennifer por el salón, con una tabla que parece contener los apuntes de la cena—. Voy a ir tachando el resto y a tirar la tabla, dudo que la necesite después.

—No seas así —aparece Gloria con un vestido con brillantina que realza su piel chocolate y su peinado rizado está de escándalo—. Guarda la tabla, la necesitarás pronto, seguro que para la cena de año nuevo.

—¡Cierto! Se me olvidaba.

—¡Hola a todos, guapos! —aparece Dana junto con su novio Rodrigo y nuestro amigo Jorge—. ¿Cuándo empieza la cena? Quiero ver una mesa repleta de amigos y amores.

—Pronto, querida —dice mi madre—. Mientras tanto, ¿por qué no ponéis la mesa? Así os lleváis los aperitivos de entrante.

—Jorge, ¿me ayudas? —le pregunto, lo cual asiente—. Pues vamos a por el mantel. ¿Está donde siempre?

Popular NO Busca Pareja (Gay)Where stories live. Discover now