Entre las sombras

6

Mike se encontraba sentado frente al monitor de su cubículo personal, redactando la grabación sobre la entrevista de la testigo del caso Reiss, como realmente era el apellido de la muchacha. Debía entregar el reporte a Erwin antes del receso para almorzar. Su compañero Dietrich trabajaba en otro de los casos del mismo criminal. Escucharon pasos aproximándose a través del pasillo, pero no se tomaron la molestia de voltear, al escuchar la chillona voz de su compañera.

- ¡Muchachos! Supe que ayer interrogaron al novio de la pequeña Krista -dijo al momento que daba una fuerte palmada en las espaldas de ambos.

Mike permaneció serio, e ignorando la situación, continúo su trabajo.

- Verás, son archivos clasificados según nuestro superior -aclaró acomodando correctamente su corbata- no puedes indagar en el caso por si venias por respuestas. Tu trabajo se limita al laboratorio.

- Vaya, si que son unos aburridos. Tan solo, déjame ver un poco de aquello que escribes.

- Ya te dije que no, el oficial Smith se enojará si sabe sobre esto.

- De acuerdo -mencionó con una expresión despreocupada- Finalmente si hay algo importante, de todos modos lo sabré.

Sin despedirse tomo rumbo a la oficina de Erwin. No se tomó la molestia de llamar a la puerta, solo abrió estrepitosamente, logrando estremecer al oficial por la sorpresa de la interrupción.

- ¡Zoë! ¡cuántas veces he dicho que llames a la puerta antes de entrar!

- ¡Lo se cejas, pero esto es importante!

- Bien -apartó los papeles que debía firmar y centro su atención en la ruidosa doctora - que es lo que quieres decirme.

- Verás, ayer Nile, mencionó algunas huellas...

- Si, asi es -asintió tras recordar.

- Ajá, no tuvimos éxito con aquello. Sin embargo, encontré un delgado cabello. Tomó horas identificarlo en la base de datos cejas, ni siquiera he dormido -dijo con un gesto cansado.

- Zoë... ¿que hemos dicho acerca de los sobrenombres? Espera... ¿Has dicho un cabello?

- ¡Así es! -grito animada- Erwin, tenemos a nuestro asesino...

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Petra terminaba de rellenar los formularios de entrada en la recepción principal. A pesar de la hora, no veía a sus amigas por ningún lado. Al parecer luego de la alocada fiesta de la noche anterior, pocos asistirían a trabajar.

- Esto le enseñará a Grisha, a no incentivar las ideas de Ilse... -susurró para sí misma.

- Deberías decírselo personalmente ¿no lo crees? -mencionó una voz que la hizo voltear enseguida.

Permaneció estática al ver de quien se trataba. ¿Acaso era un espía de Jäger? No, definitivamente podía descartar aquella loca teoría, tenía demasiado carácter para recibir órdenes del director. Pero entonces, porque aparecía en el momento menos indicado. La mente de Petra trabajaba rápido tratando de formular una respuesta ante aquellas palabras. Sin prestarle demasiada atención, Levi continuó escribiendo de la misma forma en para registrar sus turnos de trabajo.

- Eh... yo... pues... -murmuró palabras sin sentido.

- ¿Qué hacías en el bar ayer? -interrumpió.

- ¿Disculpa? -preguntó sorprendida.

- ¿Aquel molesto sujeto, es tu novio?

Petra hizo una pausa, meditando a que se debía aquel interrogatorio. Porqué debería responder a todas esas preguntas, porque debía dar explicaciones como si fuese una pequeña niña. A pesar de que su intuición ordenaba que se apartara de su lado, sus labios dejaron escapar contradictorias palabras.