¡Un lugar para divertirse y retar la imaginación!
Cada cierto tiempo publicaremos un reto para ustedes, con el simple objetivo de divertirse y dar rienda suelta a la imaginación. A veces, estas pequeñas iniciativas son buenas para el bloqueo de escr...
Ahora sí, acá les dejamos los 3 ganadores de este reto tan cómico y creativo. Muchas gracias por participar, en verdad que fue divertido leer sus pequeñas creaciones.
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Fandom: TaoRis
—Porquería con mi vida –ZiTao resopla, tirándose sobre las cómodas mantas de su cama cuando finalmente su trabajo y basura de día se acaban.
En la mañana despertó más tarde de lo esperado. Su celular se había apagado por falta de batería, lo que hizo que se atrasara media hora y tuviera que correr a bañarse y ponerse la ropa demasiado rápido, tanto que terminó en el piso con la cara contra el suelo. Sin embargo, eso no había llegado a molestarlo tanto. Su esposo le ayudo a incorporarse y lo mimo un tiempo corto antes de que tuviera que correr nuevamente a su auto para llegar a la empresa en la que trabajaba a tiempo.
Termino llegando a las 9:30 a.m cuando debía estar a las 8:00 a.m en la oficina. La causa: un accidente de tráfico que tardo casi una hora y medía más porque una llanta se pincho en el recorrido. Como era de esperarse, su jefe lo reprendió y le desconto dinero de su no tan abundante salario. Pero estaba vivo, no había porque enfadarse, al menos podía adelantar algo de trabajo que tenía de antes con lo poco que tenía que hacer ahora. Sin embargo, su mala suerte, sus descuidos o la malvada fuerza sobrenatural que lo atormentaba no podía detenerse allí.
Uno de sus compañero tuvo una emergencia familiar por lo que tuvo que abandonar el trabajo y su Jefe, su lindo y gordo jefe, tuvo que delegarle todo el trabajo de su compañero a él para terminarlo ese mismo día.
Su paciencia empezaba a evaporarse, pero tomando un profundo suspiro y sonriendo suavemente, empezó con su deber diligentemente, olvidandose por un rato de todo mientras se ensimismada en lo que estaba haciendo y pasaba por alto el tiempo. Solo cuando su estomago gruño en alto, se dío cuenta de que se había saltado desayuno y almuerzo y las oficinas estaban casi solas. El reloj marcaba las 10:00 p.m, se suponía que podía salir a las 7:00 p.m.
Cuando se libró del trabajo de su compañero y del que tenía atrasado, solo quedándose con el que debió haber hecho ese día pero que ya no alcanzaba, se puso en pie con un terrible dolor en la columna, dejando escapar un lastimero gemido mientras se despedía de algunos de sus compañeros que aún quedaban quedaban.
Ya pronto estaría en su casa, junto a su esposo y sus besos. Se montó en su auto con una tranquilidad fingida y lo encendió, enfureciendo cuando este marco la baja gasolina que tenía y que por lo tanto no prendería por más que lo deseara.
Volviendo a su cama, con las piernas doloridas por la larga caminata a casa, escuchó a su esposo ingresar, su sonrisa resonar a través de la habitación, sentandose a su lado para tocar dulcemente su espalda.
—¿Que tal tu día, amor? –YiFan pregunto dulcemente, y como a Tao nunca le había gustado preocuparlo, sonrió.
