22.¿Rendirse? Eso nunca.

268K 10.6K 2.9K
                                    

(Dafne)

―Oye, oye... ¿era necesario que vinierais todos?―preguntó molesta mirando hacia Ann y Triz que estaban sentadas frente a ella.

―Claro que sí.―contestó la peliblanca sin poder ocultar su emoción y comenzando a tomar planos de toda la cafetería.

Dafne puso los ojos en blanco y golpeó la mesa con impaciencia. Como si anoche no hubiese tenido suficiente con soportar los comentarios de Ann y las tortuosas preguntas de Triz sobre si había algo entre Damián y ella, hoy se habían presentado ambas en su cafetería acompañadas por Kyle, Nora, Matt y Jose, todos ellos con la intención de verificar si Damián aparecería con el pelo cambiado.

―¿Al final Dan y Sonia vienen?―preguntó Triz a Matt y Nora.

―Se supone que sí, pero quién sabe... ―comentó Matt fulminando a Kyle con la mirada cuando éste intentó rozarle la mano a Ann de forma disimulada.―Te estoy viendo Kyle.

―Perdón.―murmuró el chico de la capucha alejando su mano de Ann pero su mejor amiga lo evitó y entrelazó sus dedos con los de su novio.

―No le hagas caso, está enfadado porque papá le dijo que debería relajarse y dejar de atormentarte a ti y a Jose.―contó Ann mirando burlonamente a Matt que se cruzó de brazos con enfado.

―No me lo recuerdes.―murmuró el rubio molesto haciendo que Jose riese.

―Me hubiera encantado verlo.―dijo el castaño ganándose una mirada asesina de Matt, pero Jose lo ignoró y pasó el brazo por encima de los hombros de Nora que como siempre estaba leyendo un libro.

―Nora, ¿al final cuándo vas a cenar con Will?―preguntó Matt con malicia haciendo que Dafne y Ann riesen al ver la mueca de desagrado del castaño.

―Como si a ti te agradase la idea de que vaya a cenar con ese modelo ligón.―murmuró Jose con fastidio, Matt se echó hacia atrás en el asiento y se encogió de hombros.

―No, pero me molesta mucho menos que a ti.―contestó Matt guiñándole el ojo a Jose que bufó irritado.

―¡Shh! ¡Mirad allí está Damien!―exclamó Triz con efusividad señalando a la entrada de la cafetería.

Dafne siguió el dedo de su amiga y vislumbró al chico a la entrada hablando animadamente con otros dos chicos con los que ya lo había visto en varias ocasiones, nada nuevo. No obstante, al fijar la vista en su pelo sintió como el estómago le daba un vuelco y abrió los ojos de forma desorbitada... ¡su pelo! ¡su pelo era negro! Se frotó los ojos con fuerza para asegurarse de que aquello no eran alucinaciones y volvió a mirar, no, no estaba alucinando, su pelo realmente era negro.

―¡Está pelinegro! ¡Te quiere!―gritó Triz emocionada haciendo que varias personas la mirasen incluido el propio Damián que volteó hacia ellos y los saludó con la mano.

―Está... está guapísimo.―masculló Ann con emoción mirándola de reojo pero ella estaba demasiado ocupada conectando su mirada con la de Damián, él le sonrió y se pasó la mano por el lugar donde lo había rapado con nerviosismo pero ella apartó rápidamente la mirada y se cruzó de brazos con enfado.

―Y que lo digas.―admitió Triz sin dejar de mirarlo.

Dafne chasqueó la lengua con irritación. ¿Cómo iba a saber que un Damián pelinegro era mucho más atractivo que un Damián pelirrojo? Ok, ella no había pensado eso.

Lo miró de reojo y sintió un nudo en el estómago, si se había cambiado el color de pelo eso quería decir que... ¡Oh dios mío! ¡Damián estaba hablando en serio con lo de ser novios! ¡Él la quería!

Cállate y Bésame (TQST Libro #2)© [EN LIBRERIAS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora