Enamorada Del Fruto Prohibido.

C20: Por Favor, Piedad.

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Mercy - Shawn Mendes.

–¿Dónde está la quinceañera más hermosa? – pregunto Amelie en cuanto llego a la escuela.

–Falto a clases, porque su fiesta es hoy– dijo Beth de forma obvia.

–¿Faltó?, ¿Y por qué razón estamos aquí? –

–Porque las clases no se cancelan para nosotros–

–Como sea. La primer quinceañera...– Elise miró a Amelie– del año–

–Eso no es lo increíble, lo increíble es que ya es Marzo–

Si, 25 de marzo.

–Debo aclarar que el vestido para las damas está hermoso– Amelie como siempre, tan aficionada por los vestidos–. Díganme qué no soy la única emocionada–

–Todo estamos emocionados, Ames. ¿Verdad chicos? – todos miramos a Jack, pero ninguno dijo nada–. ¿Alguien? –

–Yo, Jack, yo estoy emocionado también– le dijo Samuel.

–Ese es mi amigo–

Todo se había arreglado entre el grupo. Samuel se había disculpado con Sarah por haber sido un poco cruel, David le había explicado la verdad a Sarah, Amelie había medio perdonado a Samuel por ser un idiota. Y todos estábamos felices como siempre.

–¿A qué hora nos veremos en el salón? – pregunto Matt.

–Ocho en punto–

–Así que nada de tareas y pendientes, porque desde que salgamos tenemos que estamos preparando para la noche– Amelie, siempre con un horario fijo para las fiestas.

–Según tengo entendido hoy saldremos temprano–

–¿En serio? –

–Si último día antes de salir de vacaciones–

Dos semanas de descanso, sin escuela, sin molestos líos amorosos, sin tarea. Libres, aunque sean solo dos semanas.

–Aún mejor, tenemos que aprovechar todo el tiempo que podamos–

Amelie cumplió su palabra, desde que salimos empezamos con los preparativos.

Primero llegamos a nuestras casas a comer un poco y recoger los vestidos.

Después nos reunimos en casa de Amelie, ahí nos bañamos, peinamos, maquillamos y vestimos.

La mamá de Amelie nos llevó hasta donde sería la fiesta de Irina. Entramos al salón y subimos a la habitación de la quinceañera.

–Por fin llegaron, se tardaron mucho–

–Pero es un segundo más tarde de lo que dijiste– le replicó Amelie.

–Tenemos que aprovechar todo el tiempo que podamos– le dijo burlonamente.

–¡Le contaste, Beth! –

–Upss, errores técnicos– dijo esta con una sonrisa.

–¿Y los chicos? – pregunto Dalia.

–¡Ya llegamos! – James abrió la puerta de la habitación para que todos entrarán.

No recuerdo mucho de lo que dijeron en esos momentos, solo recuerdo cuando él entró.

Es ridículo pensar que me quedé impresionada al verlo de traje, pues no era la primera vez que lo veía vestido así, pero ahora era diferente, lo veía de una forma diferente, muy diferente.