17| Un paso más

33.1K 2.7K 1.5K
                                    

Según Billy, los sábados eran para descansar y no para estar atascado en tu habitación con una enorme hoja de ejercicios matemáticos y no esta de más mencionar que Billy era realmente bueno con las matemáticas...pero, vamos, que ni siquiera eso hacia la tarea más fácil.

¿Qué era lo que más le molestaba? Pues el hecho de saber que sus padres y la pequeña engendro habían salido al cine y muy probablemete luego irían a comer, porque su madre se despidio con un alegre:

"— siento que estes atado con la tarea, cariño. Te he dejado comida en el refri y te gurde galletas"

Así es, había sido abandonado por su familia...aunque si era optimista, si terminaba la tarea en sábado, tendría todo el domingo libre. Y de hecho se concentro en la tarea por dos tres horas seguidas, sin descanso. Pero en algun punto su mente empezó a desenfocarse hasta terminar pensando en un chico de cabello castaño y ojos grises.

—Mierda...— dijo mientras golpeaba la frente contra la superficie de su escritorio.

Pensar en Jason se estaba volviendo algo normal, demasiado. Era como si el capitán hubiera encontrado la maner de imprimirse en su cerebro, apareciendo en sus pensamientos a cualquier hora del día...incluso en las noches mientras dormía. Sus sueños, joder con sus sueños, eran un tanto (bastante) subidos de tono.

Por lo general sus sueños se ambientban en la habitación de Jason...con ellos dos sentados en la cama y luego...luego la escena cambiaba a un donde el capitán le comia la boca a besos y recorría todo su cuerpo con sus manos. El sueño seguía y seguía hasta convertirse en algo no apto para menores y cabe resaltar que cuando despertaba, Billy se encontraba completamente empalmado y con unas ganas locas de besar a Jason Cooper. En ocasiones se sentía ridículo y otras veces se felicitaba a si mismo por tener tan buena imaginación.

Pero el deso que sentía por el capitán no se detenía ahí, de hecho era más fuerte de lo que Billy se imaginaba y la prueba de ello estaba celosamente guardada en el cajó de su mesita de noche...muy en el fondo....de solo imaginar la vergüenza que había pasado en la farmcia al comprar eso ¿y para qué? No era como que algun día fuera a utilizarlo, mucho menos con Jason, pero se valia soñar ¿cierto?

Pero Billy empezaba a temer que lo suyo no se limitaba a simple deseo, porque al fin se dio cuenta de que aquella sensación desagradable que se instalaba en su pecho cundo alguien tocaba Jason, no era otra cosa más que celos y ni hablar del enojo que sentía cuando Max se acercaba al capitán.

"Es Max y el ama a Daemon" se repetía una y otra vez, pero los celos tenía vida propia y a veces no podía controlarlos, como el martes anterior cuando se había portado todo cortante con Max, solo porque lo había llamado "Jay".

Cerró los ojos y alejo eso pensamientos, ya se sentía lo suficientemente mal consigo mismo. Así que decidió reanudar su tares, pero por más que lo intento no pudó controlarse, etonces termino por enviarle un texto a Jason.

Billy: solo en casa 😢 ¿Quieres hacerme compañia? Te lo agradecería mucho.

Casí salta de la emoción cuando su teléfono vibro con la respuesta.

Jason: ¿Quién se atreve a dejarte solo? 😱Eso es imperdonble...

La suerte del capitán (Suerte #2)Where stories live. Discover now