21| ¡Lo sabía!

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Cap (2/2)
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Jason  no se había sentido tan feliz en demasiado tiempo, era un poco difícil recordar la última vez que le dolieron las mejillas de tanto sonreir, pero era así y se sentía tan bien. ¿La mejor parte de todo? Es que podía compartir esa felicidad con Billy, ese increible chico con los ojos más hermosos que había visto nunca.

Bueno, bueno, quizá estaba siendo un poco demasiado cursi, pero eso era algo que tampoco podía evitar. Billy lo hacia sentir blando y calido por dentro, Billy lo hacia sentir demasiadas cosas, muchas de las cuales ni siquiera podía empezar a describir.

—Se te van a romper las mejillas si sigues sonriendo de esa manera— dijo su rubio en modo de broma. Ambos caminaban lado a lado por los pasillos vacios de la escuela, había llegado muy temprano con la idea de pasar un rato a solas.

—Lo sé, es solo que todavía no puedo creer que me hayan aceptado, es como...es emocionante.

—Pues creételo, chico Boston. — Billy le dió un empujón con su hombro. Se detuvieron frente a el casillero del rubio —y piensa que en unos cuantos años ya estaras en camino de ser el mejor doctor de todos los tiempos.

Jason asintió, siempre que Billy decia ese tipo de cosas, cuando le demostraba la enorme cantidad de fe que le tenía, no podía más que sentir que caía un poco mas por él...¿era posible que alguien te gustara más y más cada día?

—Bueno, intentaré serlo.

—Lo serás.

Jason dio un paso más cerca, estaba a nada de tomar a Billy por las mejillas y darle un beso vuela mentes, pero sin duda ese no era el mejor momento.

—¡Chicos!— Una femenina voz animada interrumpio los planes del capitán. —Buenos días.

—¡Hey Scarlett! — Billy se acercó a la chica pelirroja y le dio un beso en la mejilla. —¿Qué haces aquí tan temprano?

—Nada en especial, es solo que milagrosamente me desperte temprano y quise saber como se sentía llegar antes de tiempo a la escuela.

Jason soltó una carcajada, Scarlett Durham siempre le había parecido una chica peculiar, lo que volvía imposible enojarse con ella por aparecer en el momento menos oportuno.

—¿Y que se siente llegar temprano?— preguntó el capitán sabiendo que la respuesta lo haría reir.

—Una mierda— ella arrugó la nariz— preferiría estar durmiendo en mi cama.

Esta vez Billy también se hecho a reir y que lo condenaran por cursí, pero para Jason, la risa de Billy era el mejor sonido del mundo, podía pasar escuchándolo todo el día.

—¿Y que hay de ustedes? —preguntó la chica acomodandose el tirante de su mochila sobre el hombro.

Billy y Jason compartieron una mirada complice y sonrieron sin saber que Scarlett estaba absorviendo todos los detalles.

—Bueno...ya ves, solo decidimos llegar temprano. —Billy se encogió de hombros luciendo bastante despreocupado, algo en lo que era realmente bueno.

—Aja...—Jason se pusó nervioso pues parecía que Sacarlett no se tragaba esa excusa. Pero la chica sonrió y cambio el tema. —¿y que tal estan los entrenamientos? Espero que bien, porque no saben las ganas que tengo de verlos patear el trasero de los chicos de Rosswood.

—Ten por seguro que lo haremos— Jason se relajo. No es que pensara ocultar por siempre lo que tenía con Billy, pero primero quería saber que era lo que tenían. —Estamos entrenando realmente duro porque nuestra meta es estar en la final si o si.

La suerte del capitán (Suerte #2)Where stories live. Discover now