La leyenda de Oh Sehun [HunHanAU!]

☠Susto Ocho

Atmospheric Soundtrack Vol. 1

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Luhan no sabía si hizo lo correcto o no al haberse decidido por quedarse en el bosque con Sehun. Y es que sentía una especie de cariño y protección a lado de él que era imposible irse de ahí y fingir que nada había pasado.

Era cierto que estaba demasiado asustado con lo de los temas de su hermano gemelo y la ligera obsesión por hacer daño a cualquiera que se le cruzara en su camino porque incluso lo había hecho con él. Sin embargo, después de todo lo ocurrido y vivido en ese lugar, no podía irse simplemente así de la nada.
Por alguna extraña razón, el estar con Sehun le había traído una especie de paz en su interior que no se comparaba nada a cuando estaba solo en casa, la compañía de Sehun era demasiado agradable sin contar que aún pensaba que el ente era muy atractivo en su intento de forma humana.

Jamás se le pasó por la mente en permanecer en un lugar como ese, pero ya no podía echarse para atrás. No podía ni quería hacerlo.

  — Sabes Sehun, yo nunca había creído en esas cosas paranormales ni en fantasmas como los ponen en las películas— confesó abrazando sus piernas sin mirar a Sehun, quien le estaba mirando con toda la atención— Es por eso que acepté la condición de JongIn, porque a mi no me daba miedo y porque estaba seguro de que nada pasaba aquí. Entré porque yo lo quise, porque sabía que nada malo me iba a pasar.

— ¿A qué quieres llegar con esto, Lu?— preguntó, teniendo ya un mejor dominio de las palabras al momento de hablar.

— Quiero decir que yo no te tenía miedo, pero comencé a tenerlo cuando comenzaste a dañarme físicamente. Dime, si tu querías algo de mi ¿Entonces porqué me lastimaste?

— Porque cuando te reconocí, supe que ya no podía hacerte daño. Quebré mi promesa y escondí mi sed de venganza por ti.

— Entonces eso quiere decir que lo que quieres de mi tiene que ver con mi rostro o mi cuerpo— declaró demasiado seguro de sí mismo. Sehun supo en ese momento que el interrogatorio era para saber el objetivo de porqué no le hacía daño como a los demás humanos, por lo que mejor decidió callarse y no responder a ninguna de las preguntas de Luhan.

— Lo sabrás con el tiempo, Luhan. Quiero que tu mismo te des cuenta del porqué estás bajo mi protección— dijo— Sólo espero que te lo tomes bien.

  — ¿Tan grave es?— Sehun se encogió de hombros, no sabiendo qué decir— Bueno, después de las horribles marcas que me hiciste y lo que he vivido en mi aburrida vida, no creo que pueda ponerse peor.

Sehun recordó la primera noche en que Luhan pisó el bosque. Le había desgarrado la espalda con sus uñas en su forma natural como lo hizo años atrás con un tal KyungSoo, luego también lo marcó con una mordida quitándole un pedazo de piel y lo amarró entre las espinas de las ramas para que su cuerpo fuese picoteado como pequeñas agujas. Luego de haberlo pensado mejor y de ponerse a pensar que Luhan era lo único que quería en ese momento, el arrepentimiento por haberle hecho daño hace unos días lo consumió al igual que la culpa.

Luhan aún tenía vendado en donde estaba la herida y estaba seguro de que los rasguños en su espalda iban a dejar unas cicatrices de por vida. De cierta forma le dolió haberle lastimado cuando se prometió a sí mismo que jamás dañaría al amor de su vida, ni él ni nadie. Por lo que, en medio del silencio que se formó entre los dos, se levantó colocándose de rodillas y subir la camiseta de Lu sin su permiso, viendo cómo los ojos del mortal se abrían sorprendido y encendiendo sus mejillas de un color carmesí que bien se podían distinguir en esa oscura noche.