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La primera vez que Jin vio a Satoshi fue cuando tenían 9 años. Él se encontraba internado en la clínica, su hermano lo visitaba casi todos los días, ese sábado por la tarde no fue la excepción... pero no iba solo. 

Jin se sorprendió al ver al niño de cabello plateado y grandes ojos celestes ir detrás de su hermano. Shoichi lo presentó como Kazeyama Satoshi y le dijo que era su nuevo hermanito, que él también había pasado por lo mismo... En ese momento fue la primera vez que veía a alguien realmente, miro a Satoshi, el niño de cabellos plateados miraba una planta casi marchita que se encontraba en su habitación. Veía interesado como el chico movía la planta hacía la ventana que estaba en la habitación, abría levemente las persianas y vertía un poco de agua en esta. Jin se sorprendió en ese momento por dos razones.

Primero: la planta había cobrado vida de nuevo casi de forma instantánea, al parecer aquella pequeña planta necesitaba algo de sol y agua. Segundo: la sonrisa que se dibujo en el rostro de aquel niño cuando vio que aquella planta volvía a cobrar vida. 

- Sa-Sa... Sato... shi... -kun - susurró sorprendiendo a Shoichi y al otro niño que aun observaba la planta pero en ese momento se giro para verlo. Esa fue su primera palabra después de casi un año. Se sorprendió cuando el niño de ojos celestes se acercó a él y tomo su mano.

- Es un placer conocerte, Jin-kun - sonrió, aquel niño tenia un aire demasiado maduro... un aura madura y elegante - Shoichi-san me ha hablado mucho de ti... e-espero que... seamos amigos... 

- S-si... 

Jin no sabía como explicarlo. Pero, desde ese día, se había enamorado de Satoshi. Todos se sorprendieron al ver como Jin progresaba rápidamente con Satoshi a su lado, el niño de cabellos oscuros caminaba siempre de la mano con Satoshi. Se habían vuelto inseparables con forme avanzaban los años. Realmente lo amaba, Satoshi había sido la luz de la esperanza para Jin. 


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Jin se quedó parado frente a ese puente al ver a Playmaker a mita de este, camino lentamente hasta quedar frente a este... Algo no estaba bien.

- Playmaker - llamo - ¿Qué haces aquí?

- No puedo permitir que pases de este punto, SilverWolf...

- ¿¡De qué hablas!? - grito molesto Silverwolf - ¡Si no nos apresuramos Revolver va a...

- Lo sé - interrumpió - por eso no puedo permitir que pases de este punto... no dejaré que interfieras en nuestros planes. 

Playmaker camino unos pasos alejandose de Jin, con sus pasos unos rayos verdes y negros aparecian a su alrededor, el traje verde y negro de Playmaker pronto se cubrió con un chaleco largo blanco con líneas negras, una capucha cubría su cabello. Silverwolf se quedo petrificado cuando Playmaker se volvió a girar, su rostro era cubierto por una mascara.  No creía lo que veía... la reina de Hanoi... todo ese tiempo, Yusaku había sido la reina de Hanoi. 

- En nombre de los Caballeros de Hanoi - susurro quitandose la mascara y la capucha - debo detenerte en este lugar. 

- La reina de los Caballeros de Hanoi... Playmaker... es... La Reina de Hanoi... 

- Aunque "reina" fue un molesto apoco que me puso Soulburner cuando se unió al equipo no me molesta que me llames de esa forma.    

- Tu... ¡Maldito! - grito - ¡Todo este tiempo nos engañaste! ¡Tu siempre has sido la maldita Reina de Hanoi! 

- No fui el único en engañarlos, SilverWolf... - miro con una sonrisa el disco de duelos de Silverwolf donde Windy se encontraba - los Ignis sabían desde un principio quien era realmente, ellos pudieron advertirte a ti y a Spectre que yo era la Reina de Hanoi, la pieza más fuerte del tablero de Revolver... pero no lo hicieron... 

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