"Te Protegeré"

5

Peter se recostó en su cama, el cuerpo le dolía, más que nada sus pies. 

Había estado casi todo el día en la pista de patinaje y tenía algunos moretones, se cayó varias veces y siempre caía demasiado fuerte y aunque cayera suave igual tendría eso porque era la clase de persona que se hacía moretones por cualquier cosa o sólo aparecían ahí de vez en cuando y no sabía como se los había hecho, raro.

A pesar de eso, el día fue increíble.

Aunque le costó hacer que su guardaespaldas entrara con él porque como el Señor Wilson había dicho, él no estaba para eso. Él sólo cumplía con cuidarlo y sólo eso.

"Peter se afirmó de donde pudo, ok, lo entendía ahora, patinar no era lo suyo, pero no iba a dejarlo atrás, no podía quedar como un cobarde o algo así, iba a demostrarle a todos que él podía patinar o al menos salir vivo de aquí.

Si.

Exageraba, pero cuando eres la clase de persona que no tiene permitido hacer nada emocionante, todo parece peligroso y que es un riesgo para tu vida.

Así que esto... si, era lo más emocionante que había hecho desde que vivía en la torre, eso era algo triste.

-Entonces.-Le gritó al mayor.-¿Dónde están tus patines?

El mayor lo miró con una ceja alzada.-Creo recordar que le dije que no entraría además no estoy con el atuendo adecuado para ello.

-Oh, vamos. ¿Qué importa que seas la única persona patinando mientras usa un traje formal?

-Es raro y sólo he patinado algunas veces. Creo que será mejor que yo en esto a pesar de que nunca lo ha hecho.

Se rió un tanto nervioso.-Tú ya lo hiciste, por favor, ayúdame. Tengo miedo de soltarme e irme de cara, no quieres tener que explicarme a mis padres el porqué de que a su hijo le falte un diente ¿No?-Notó como el otro intentaba no sonreír al oír eso, pero no dijo nada de eso.-¿Y?

-Correcto. Entraré ahí, pero te pediré que no digas nada de esto.

-Oh, es obvio, no es como si fuera a contarles a mis padres que no fui a la Universidad y que en vez de eso prácticamente secuestre a mi guardaespaldas y lo traje a patinar.

Su guardaespaldas sólo negó y se dio la vuelta para ir por patines."

-¿Peter?

El castaño gruñó al oír la voz de su papá. Lo último que quería era hablar con alguno de sus padres ahora mismo.-Estoy estudiando.-Lo cual no era verdad.

-¿Por eso tus cuadernos están abajo en la mochila que tiraste en el sillón? Te he dicho que dejes tus cosas ordenadas, Peter.

Se paró de la cama, fue a abrir la puerta encontrándose con su papá.-Lo siento, iré por mi mochila. ¿Correcto? Lamento haber dejado un desorden tan grande, papá, seguro te era imposible encontrar el sillón.-Pasó por su lado, pero la mano en su muñeca lo detuvo.-¿Qué?

-Te he dicho que no me faltes el respeto, Peter.-Tony suspiró soltándolo.-¿Qué te pasa? Sé que estás en la etapa en que quieres más libertad o te da por querer odiar a todos, pero aún tienes que respetarnos a mí y a tu padre.

Peter negó.-¿Cómo ustedes respetaron mi libertad, papá? ¿Cómo ustedes decidieron ignorarme y colocarme un guardaespaldas? ¿Ese respeto quieren ambos?

-¿No puedes entender que intento protegerte, Peter? No quiero que tengas tantos problemas, la otra vez te golpearon demasiado porque defendiste a una chica, me siento orgulloso que hicieras eso, pero te lastimaste. No quiero eso. No quiero que nunca te lastimes.

-¿Y dime que pasará si algún día me enamoro, papá? ¿Cómo vas a evitar que esa persona no me dañe? ¿Le vas a pagar para que nunca me deje? Viniendo de ustedes no me sorprendería porque no les importa lo que yo piense.-Negó.-¿Qué tan lejos van a llegar para que no me dañen? ¿No entienden que debo vivir?

Tony desvió la mirada.-Peter sólo quiero que seas feliz y que no sufras.

-¿Y que te hace creer que soy feliz ahora, papá?-Peter se rió sintiendo sus ojos llorosos.-¿Qué te hace pensar que no sufro viviendo esta vida? ¿Eh?-Bufó y siguió bajando las escaleras dejando a su papá solo.

Al llegar abajo, estuvo tentado a subir al ascensor y salir de aquí, pero sabía que no podría ir muy lejos.

-¿Todo bien, Peter?-Saltó un poco al oír la voz de otra persona.

Volteó y vio a su tía Natasha.-Tía, no te he visto desde casi un año. ¿Ocupada?

-La empresa me da mucho trabajo. Estoy enseñando a más personas para ser guardaespaldas, así que estoy con mucho trabajo, pero al menos tengo a tu padre que me ayude en eso, es bueno que no se enojara porque lo despedí, pero como sabes mis guardaespaldas no pueden fraternizar con las personas a las cuales protegen.

-¿Ni como amigos?

La rubia se encogió de hombros.-Eso es su opción, pero mientras menos contacto tengan es mucho mejor.

-Claro.

-Entonces, debo preguntar como te ha ido con Wilson. Es un de mis mejores guardaespaldas y lo he tenido conmigo hace unos años, así que decidí de inmediato que él te cuidaría

-¿Cuidarme de qué, tía? ¿De mis compañeros que se pueden enojar porque estallé el taller de química otra vez? ¿Por qué una persona querrá golpearme por chocar con ella? ¿Qué peligro hay ahí, tía?

-Sabes que tus padres quieren protegerte, Peter.

Peter gruñó.-No quiero que lo hagan, ese el problema.-Miró a su tía.-No quiero.

-No quieres una vida con dolor, te lo aseguro.

-Nadie habla de que quiero sufrir cada día, pero quiero tener lo que tienen los demás, quiero poder ir al parque sin tener a alguien siguiéndome, quiero ir a fiestas como algunos adolescentes, quiero poder ir a la biblioteca y quedarme hasta la noche, quiero... quiero ser un adolescente el cual pueda vivir su vida sabiendo que puede sufrir en ocasiones.

-Peter...-

-No, no digas nada. Estás de acuerdo con ellos.-El castaño hizo una mueca.-Y sobre el Señor Wilson, está bien. Él no es el problema aquí, tía. El problema es que estoy encerrado en una burbuja que cada día comienza asfixiarme más, pero descuida, seguro nada malo pasa ¿No?