los pajaros tocando tu cancion

Llamalo como quieras

No porque yo le pertenezca, 

sino porque de verdad me conoce.

El dia que se casan es, como dice Blas después, indescriptible.

No por haber sido una gran fiesta, si no todo lo contrario. Una vez que la familia de Blas se habia enterado del compromiso, todos habían querido participar en la planificación de la boda, lo cual habia llevado al mayor a saturarse a tal punto que habia decidido sacar un turno en el registro civil un dia cualquiera e ir sin nadie.

("¿Por qué tenemos que invitar a todos y armar una tremenda fiesta?" cuestiono Blas una noche con los dientes a medio lavar. "Yo lo que quiero es ir a decirte a vos que te amo asi como te lo digo todos los días, eso es algo tuyo y mio, no es de nadie mas."

Junior solo se rio. Era lindo ver a Blas tan consternado solo por el hecho de querer manifestar su amor.

"Sos muy lindo cuando te enojas," dice Junior mientras se acerca a limpiar el resto de pasta de dientes que Blas se dejo en la nariz mientras gesticulaba con el cepillo. "¿Qué me estas proponiendo? ¿Qué nos fugemos?"

"No fugarse," contesta Blas dejando al lado el cepillo y dándose vuelta para sonreírle a Junior. "Solo que hubo muchas cosas de nuestra relación que tuvimos que hacer participe a otras personas sin nuestra intención," Blas se moja los labios antes de hablar nuevamente, "Quiero que esto sea solo de nosotros dos, ¿Esta mal?"

Junior solo puede sonreir y acercarse a robarle un beso a su novio. "Yo quiero que todo sea para nosotros dos mi amor," dice "Pero tu mama nos va a matar a ambos."

"Yo solo quiero acordarme de este dia en cincuenta años y pensar en que fue solo de nosotros dos," Blas se rie pícaramente de esa manera que hace que Junior no pueda evitar devolverle el gesto. "Ademas mi mama no va a poder hacer nada, ya saque el turno en el civil."

No pudo evitar reírse al ver como su novio saca la lengua burlonamente, "¿Y para cuando lo sacaste? Pense que era imposible de conseguir."

"Tengo mis contactos yo tambien," dice Blas mientras se acerca a dejar otro beso sobre la boca de su novio.

La risa se le escapa naturalmente, es invitable cuando esta cerca de Blas. Ese sentimiento único de calido que le aprieta el pecho cada vez que Blas esta cerca. Sus hermanos no habían entendido cuando Junior les habia hablado de casarse. Y Junior no habia esperado que lo hicieran. Sus hermanos no habían pasado toda la vida escondidos, avergonzados de mostrar la mas minima atracción o afecto o expresar el deseo hacia lo que le gustaba. Nunca nadie en su entorno habia naturalizado que le gustaran los chicos, solo habia sido un punto de burlas, señalado como algo que debía ser escondido, un símbolo de debilidad.

No habia para el nada mas excitante que caminar de la mano por la calle con Blas, que presumirlo con sus amigos y juntarse con la familia de Blas todos los domingos. Y Junior no esperaba que sus hermanos entendieran eso, ellos nunca habían tenido que esconderse de nada, pero para Junior todo era nuevo.

Y vivirlo con Blas, con la persona que lo habia amado a pesar de todas sus dificultades, que se habia quedado con el aun después de los momentos mas difíciles. Era todo lo que necesitaba. No necesitaba mas tiempo para evaluarlo, quería estar con Blas toda la vida y lo iba a querer todos los días de todos los años que le quedaban de vida.)

Junior habia esperado ponerse nervioso. Cuando era chico, las pocas veces que habia imaginado su casamiento o habia pensado en casarse siempre se habia imaginado que estaría nervioso, inseguro respecto a si estaba tomando la decisión correcta, o si iba poder sostener el matrimonio con una persona que no estaba seguro de conocer del todo.