Albalia | Lost When You're Not Around

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Madrid. Noviembre. 2018

En aquel portal. Después de que tu lloraras en mi pecho y te aferraras a mi como si me fuera a escapar decidí que lo mejor era separarme de ti, otra vez.

Pero tu te negabas, me agarrabas del brazo como siempre lo hacías. Siempre me retenías y por alguna razón yo siempre me quedaba.

"Ven a casa" dijiste como si no hubiera pasado el tiempo, como si todavía fuera nuestra, aunque ya nada tuyo era mío.

Negué con la cabeza, mirando al suelo. Me estaba auto convenciendo de que era lo mejor no ir, aunque mi cuerpo necesitaba de ti.

"No puedo, no quiero volver a empezar Natalia. Desde que apareciste en mi vida todo se ha ido a la mierda. Solo quiero ser la que era antes" Todo lo que dije era verdad y tu lo sabías. No eras lo correcto para mi, pero ¿desde cuando lo correcto me hacía feliz?

"Que coño dices Alba ¿Enserio me estas culpando a mi por tus problemas?" soltaste molesta, pero todavía no soltabas tu agarre de mi.

"Tu has sido mi puto problema desde que te conocí. Desconfiaba de ti y aún así luché por lo nuestro. Incluso me fui a vivir contigo, seguí contigo después de descubrir que te besaste con otra a mis espaldas, mientras follábamos todos los putos días en verano. Mis padres me rechazaron, por irme de casa y aún así seguí a tu lado, no huí, aposté por ti. Dejaron de pagarme la universidad y me tuve que poner a currar de noche para pagarme mi futuro y nuestra casa. Todo era mucho más complicado contigo, pero para mi todo el sacrificio merecía la pena. Yo lo hice todo por ti y tu me lo pagaste de esa forma. Te parece que tu no eres el puto problema ahora." te dije con una ira y desesperación en la voz. Ya no me salían ni las lagrimas. Me di cuenta que te tenía que borrar, olvidarte.

" Tu lo has dicho follábamos, no éramos nada ahí entonces. Y por ahí no vayas Alba, sabes que no es verdad. Te acuerdas cuando me decías que odiabas a tus padres. Que te forzaban a estudiar algo que no querías. Vivías atrapada en tu propia casa, te controlaban. Te viniste conmigo para alejarte de toda esa mierda de vida que habían formado para ti, la que no querías enfrentar. Ni se te ocurra echarme la culpa, nunca te forcé a que te fueras de tu casa, ni te prometí que todo sería perfecto." dijiste con rabia, te encendiste un cigarro. Se que estabas agobiada, se que solo querías abrazarme. Apoyaste tu cabeza en la pared, cerrando los ojos.

Estabas tan equivocada Nat. Y eso me molestaba, me enfadaba que todavía después de tanto desconocieras la realidad.

"Me fui contigo porque estaba enamorada de ti pedazo de gilipollas, no me fui ni por mis padres, ni por la vida de mierda que tenía. Haber si te enteras de una puta vez que te quiero. Y para mi siempre fuimos algo, yo nunca me fuera liado con otra teniéndote a ti"

"¿Entonces porque te fuiste? Si tanto me querías porque te rendiste tan rápido" dijiste a punto de llorar, tu sufrías y yo te acompañaba. Tu mano en mi cara era fría, tal y como esos recuerdos que abundaban en mi cabeza.

"Ya no aguantaba más, me estabas volviendo loca" Y volví. A esos días oscuros, esos donde me cuestionaba si este amor era real, me volví paranoica, volviéndome más y más adicta a ti. Me hacías más daño y yo más te quería tener. Pero claro todo en esta vida tiene limites.

Madrid. Finales de Septiembre. 2018

Tu jefe te había echado del local en el que tocabas tus canciones, hablaban de mi, de nuestra obsesión, del sexo y el deseo. Bebías más de lo normal, frecuente cuando era el horario de trabajo. Para ti nunca fue un trabajo, solo un pasatiempo, una pasión, como todo en tu vida. Nada te tomabas enserio y yo a veces me preguntaba si yo era la excepción o si también era parte de tu locura de vida.