La Obligación de Quererte

Capitulo 19

En cierta manera no comprendía exactamente la actitud de Alba.
Intentaba comprenderla, y aún así se empeña en escoger el camino erróneo.
Dejo caer mi cuerpo agotado en la cama.
Miro como Marina duerme plácidamente en su cama abrazada a su osito.
¡Qué envidia!
Quién pudiera ser niño para poder dormir tan bien sin preocupaciones alguna.

Y yo, aquí sigo pensando en Alba y su manera tan terca de actuar.
Cierro mis ojos intentando encontrar alguna solución la más adecuada para que entienda que es ella la que está llevando las cosas a cierto extremo sin necesidad porque para eso estoy yo. Para protegerla sin que nada malo le suceda.
Y sin embargo, noto una pequeña desilusión dentro de mí pecho por su manera de actuar llegándome a cuestionarme si en verdad Alba confía o no en mí al ciento por ciento.

Entre tanto, pienso que dentro de dos días debo volver de nuevo a México para seguir con la grabación de la segunda temporada de la serie.
Me levanto con cuidado de no despertar a Marina. Le envío un mensaje a Alba comunicándole que me deje pasar estos dos días con mi hija.

Al minuto me responde:

— De acuerdo. ¿De verdad debes de irte de nuevo, vendrás al menos para despedirte?— A veces no sé si matarla o comérmela a besos. En fin...Más no puedo hacer salvo intentar hablar con ella para que vea que todo no es como ella se imagina.

Después de dos días, llevo a Marina a casa de Alba.
Estamos solos  en la cocina, por su rostro me hago cargo que lo ha pasado mal y eso me escuece de verla de sufrir innecesariamente.

— Alba debo de irme por unos meses.
Aún así, quiero hacerte una promesa.

— Tú dirás. — Su voz suena indiferente a pesar de que sus ojos me dicen lo contrario.

— Te prometo que pase lo que pase entre nosotros, tú seguirás siendo la madre de Marina y haré lo posible para que aceptes mi ayuda para que no les falte de nada. Ni a tú familia ni a mi hija.

— Gracias por todo Héctor. Yo prometo que haré las cosas algo mejor y por ello me disculpo por haberme ido el otro día de borrachera con Kike.
Lo hice porque quería despejarme, me sentía axfisiada y ...

— Alba, comprendo que todo esto sea nuevo para tí y en ocasiones puede que te sientas como si estuvieras en un frasco de cristal y te diera la sensación que te quedaras sin oxígeno.
Sin embargo, quiero decirte, que no debes de temer nada, yo ya he echo todo lo posible para que nadie te moleste en todo este tema referente a la prensa.
Sin embargo, lo que hiciste de irte de copas con tu amigo no me prestó nada bien, además debes entender que las fotos pueden ser manipuladas y aún así terminamos creyendo lo que vemos interpretando lo que en las imágenes se muestran.

— Lo siento, tampoco creí que por salir de copas con un amigo iban a terminar las cosas así.

— Entiende Alba que me has echo mucho daño, tú falta de responsabilidad y porque no había ningún motivo para que te fueras de fiesta sin haberme avisado. Al final somos una pareja y debemos tenernos confianza mutuamente.
Por ello, te pido que durante el tiempo que esté fuera pensemos en si en verdad esta relación nos va llevar algún lado.

— Héctor...yo...te quiero pero necesito tiempo para pensar en todo esto que nos está sucediendo.

— Respeto tú decisión, tómate el tiempo que necesites y a mí regreso hablamos. Ahora debo de marcharme tengo el vuelo en un par de horas.
— Con detenimiento observo Alba la cual me devuelve una mirada apenada.
Los dos permanecemos quietos mirando a Marina haciendo travesuras.