Nothing like us❤️

Enfrentamiento final

Oscuro, silencioso, tenso y vacío. Eso ocurría en aquel sótano de aquella casa abandonada donde el duelo se había realizado, el disparo se escuchó y un cuerpo cayó, sin embargo ni YoonGi ni los tres esbirros de Rose podían interferir en aquella escena. Jimin no daba señales de querer abrir los ojos, su cuerpo se ponía aún más pálido y su respiración cada vez era dilatada. Su corazón mantenía el ritmo de sus palpitaciones, sin embargo estas se hacían cada vez más débiles, desfallecían al paso de los minutos y lo que tenía en las instalaciones de su camilla no le era suficiente, ni era parecido a la atención que tenía en el hospital.

- No... No puede ser...- soltó un asustado YoonGi mirando el cuerpo de la chica en el piso, él sabía que esto ocurriría y estaba rotundamente en contra de lo que en la mente loca de la peli rosa rondaba.

Ese duelo fue la marca fija de la muerte de alguna de ellas, y eso se sabía a la perfección.

Jin

- Por favor, Jinnie, deja de caminar de un lado a otro como un león enjaulado- volvió a insistir en que dejara de hacer lo antes mencionado con sus brazos cruzados sobre pecho.

No me sentía bien, una horrible sensación en mi pecho nacía, sentía un mal presentimiento y tenía ganas de salir por esa puerta e ir directamente al hospital para así poder asegurarme de que T/N estuviera bien. Tenía ese presentimiento de que algo no estaba bien, me sentía ansioso, nervioso, con temor y vulnerable como si fuese un niño pequeño que no era capaz de hacer absolutamente nada para poder salvar a alguien, y ese alguien era T/N.

- No puedo evitarlo, Joonie, tengo ese horrible presentimiento que no me deja en paz. Siento como si algo le estuviera pasando a mi hermana y tengo miedo de que mis presentimientos sean ciertos, no quisiera que mi hermana perdiera a ese o esa linda bebé- solté sin aguantar más lo que estaba sintiendo en mis adentros, quería desahogarme para regular la carga que sentía y con Joonie me sentía cómodo en hacerlo.

- Entonces vamos al hospital para asegurarnos de que todo está bien- sugirió levantándose del sofá acercándose a mí y cuando estuvo cerca lo abracé y él correspondió-. Si quieres nos vamos ya, para así poder calmar tus presentimientos, ¿No lo crees?

Lo miré y medio sonreí, tal vez estaba siendo paranoico, después de todo el hospital era seguro, según me habían dicho. Trate de calmar mi fea sensación colocándo mi rostro en el pecho de Joonie, él acariciaba mi espalda con delicadeza y devoción, como si tratase de calmar mis nervios repentinos. Seguro esperaba mi respuesta, pero no quería llegar a molestar, tal vez ella ya estuviera durmiendo al lado de Jimin, seguro todos estuvieran tranquilos y sin correr peligro. Suspiré pesado en un intento fallido de poder calmarme, la duda e intriga me inquietaba y esa sensación no me dejaba en paz.

Le temía a la oscuridad, lo sé, era absurdo, pero yo era miedoso y esa era otra razón por la cual no me movía de dónde estaba parado. Además, la calidez que el cuerpo de Joonie desprendía me dejaba atado queriendo que este hermoso abrazo jamás se disolviera. Por mí, estaría de esta manera para siempre.

- No, está bien, vamos a dormir, Joonie, ya se está siendo de noche y mañana tenemos que ir temprano al hospital para ver cómo sigue Jimin- aparté mi rostro del pecho de Joonie y lo elevé para poder verlo.

- Y también a tu hermana- asentí sonriendo besando sobre la tela su estrecho pecho-. Bien, ahora iremos a dormir- sonrió mostrando sus hermosos hoyuelos y hasta ahí, mi corazón era un desastre por todo lo que su linda sonrisa me transmitía.

Se separó de mi y sólo salí de mi ensoñación cuando sentí sus brazos tomar entre mi cintura y mis muslos, cargándome como si tal fuese una princesa hasta recostarme sobre la cama con cuidado una vez se desplazó hasta nuestro cuarto. Estaba feliz de tenerlo y esa sensación había cesado por lo bien que me hacía tener a Joonie en mi vida, así, a mi lado.