𝐂𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚𝐦𝐞 𝐮𝐧𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 [one shots/Shalt]

Enamorado De La Luna.

Había una vez hace mucho tiempo, un niño albino que vivía en una choza, solo con la compañía Del Mar.

El Niño miraba a la luna todas las noches y rogaba a esta por tener más compañía un amigo, que jugara con el.

Su oración era a la luna y las mismas palabras antes de dormir "querida Luna, mándame un amigo, tú que tan buena eres, que me quiera y juegue conmigo siempre".

Luego se acostaba en su cama sin quitar su mirada rojiza del satélite, hasta por fin conciliar el sueño.

Una mañana como todas cuando el pequeño había cumplido sus catorce años, mientras cocinaba su desayuno que era el mismo de todos los días, vio caer algo, este provenía de la luna que apenas se escondía entre las montañas. El objeto no callo cerca de su casa por lo que solo decidido ignorarlo.

Termino su desayuno, y empezó con su rutina.

El sol empezó a meterse entre las montañas, el chico se arreglo su flequillo blanquecino, y dejo a un lado el hacha de mano que traía, continuaría mañana. Empezó a caminar a su choza para preparar ahora la cena o mejor dicho ir a pescar la y luego dormir. Tenía la idea de comer un delicioso salmón.

No había terminado de imaginar su festín ni de llegar a su casa cuando empezó a oír su oración, las palabras que le recitaba a la Luna cada noche, claro que después de los once años dejo de hacerlo, lo creía inútil, pues la Luna hacía caso omiso a sus peticiones.

Se escondió detrás de uno de los árboles de la playa, y ahí, frente a el, estaba hincada en la arena una mujer de cabello azul marino, con un pequeño traje de color Blanco, con las manos juntas mirando a la Luna "querida Luna, mándame un amigo, tú que tan buena eres, que me quiera y juegue conmigo siempre" recitó en voz alta.

Decidió salir, y así lo hizo se acercó a ella "oye..." quedo boquiabierto cuando vio su rostro, era muy linda, grandes y brillantes ojos color chocolate, mejillas sonrojadas levemente y tez canela.

"Tú...eres muy linda" se sonrojó mirando a otro lado, ella también río "si gracias, solo hay un detalle, soy un chico" sonrió nervioso.

Estabas aún más sorprendido y avergonzado "a-ah...lo siento" se disculpó "no es importante, mi nombre es Valt, ¿cuál es el tuyo?" Preguntó sonriéndole tiernamente.

"Soy Shu" respondió "es un gusto conocerte Shu" ofreció su mano como saludo, el la tomó "igualmente Valt".

Ambos pasaron aventuras increíbles, jugaban, dormían juntos, Shu le cocinaba y El Niño quedaban maravillado con sus platillos, ahora recitaban una nueva oración a la Luna "gracias Luna brillante, ahora gracias a ti tengo un acompañante" luego ambos se sonreían e iban a dormir.

Algún día Valt le comentó que su estancia en la tierra no iba a durar demasiado.

Era una noche brillante, miraban las estrellas juntos y señalaban las constelaciones.

"Shu..." el ambiente había quedado en silencio si no fuera por qué lo llamo.

"¿Que pasa, Valty?" Preguntó, Valty era el apodo cariñoso que Shu le había puesto.

"Shu tengo algo que decirte, que...tal vez no te guste mucho" respondió preocupado, mirando a otro lado.

"Dime"

"Shu, yo tengo que volver a mi casa, la Luna es mi casa, no falta mucho para la luna llena donde será cuando me iré..." sollozo "estar aquí a sido lo mejor que he hecho, e amado cada segundo de tu compañía...yo, no me quiero ir Shu" (jajajajaja sorry me acorde del meme XD) empezó a sollozar más fuerte luego a llorar.

Le dolía lo que acababa de escuchar, pero más le dolía verlo llorar "ya tranquilo...vamos a disfrutar cada momento juntos, ¿sabes por qué?" Lo abrazo ocultando su rostro en su pecho.

"¿Por qué?" Se había calmado un poco, y correspondido al afectuosos abrazo.

"Por que yo te amo, y no quiero dejarte ir" sonrió, levantando su mentón y depositando y tierno beso en los labios del menor, aún sorprendido trato de corresponder inocentemente.

Pasaron los días, hacían las cosas normales en las parejas demostrándonos todo su amor, su cariño y su importancia a la relación, seguían con la misma oración a la Luna, cantaban juntos, y mientras dormían se mimaban.

"Shu...eres lo mejor que me a pasado" recitaba el menor con cariño juntando sus manos, recostado en su pecho recibiendo los cariños del más alto.

"Tú también Valty" contestaba.

Pasaron los días, y la despedida llego, la Luna llena iluminó con su brillo el cielo nocturno, antes de irse estaban en la playa, tomados de las manos, mirándose a los ojos.

Luego cambiaron su vista dirigiéndose al Lucero de la noche "luna querida, ahora vez mi adoración, por qué gracias a ti encontré al amor de mi vida" luego volvieron a mirarse y se dieron un beso, el último por lo visto, un rayo de luz los abrazo a ambos elevando poco a poco al chico de pelo azul, se separaron dirigiéndose una mirada amorosa, prometiéndose volver a verse algún día.

Desde entonces el chico recitaba las palabras siempre a la Luna, imaginando que desde el cielo su precioso amor le regalaba una de esas sonrisas que solo el podía regalarle.

Aquí tienen la historia de un joven enamorado de la Luna...

Fin.
🔹🌙 Enamorado de la Luna🌙🔹